Fraternidad Evans

016 Maratón 2/2

Un mes después...

Después de que Scott se fuera todo cambió, los chicos se comportaban raro, y el nuevo "líder" era yo. Scott se mudó a la fraternidad de enfrente lo que hizo que ninguno de los chicos le devolviera la palabra. Costó mucho que él entrara a la casa enemiga pero lo consiguió.
Al mismo tiempo hace como un mes que no veo ninguna camioneta negra que tiene droga.

-Voy a hacer las compras- dijo Jacke desde la puerta.

-Te acompaño- gritó Devi y fue corriendo hasta allá, se puso una campera y salieron juntos.

-Yo voy a ver a Megan- avisó Ryan, últimamente todos los días iba a ver a Megan desde lo que sucedió con Scott.

-Bueno, sabes cuándo vuelve Blacke del viaje?- le pregunté, él negó con la cabeza mientras se ponía una campera.

-Pero creo que pronto.

Salió y me dejó sola en la enorme casa. Decidí ordenar un poco, luego estudiar para mis exámenes y después salir a tomar aire fresco.
Ya se habían hecho las cinco de la tarde y estaba volviendo a la fraternidad, cuando miré en frente vi a Scott con Matt en la puerta de su nuevo hogar, Matthew hablaba de cosas y miraba para todos lados, Scott sacó su celular y un minuto después me llegó un mensaje.

De: Scott
Para: Cara
Ve a la casa y quédate allí, así no sospechará que estoy hablando contigo.
Estuve investigando pero no encontré nada, eso sí mi odio a él a bajado, me trata de otra forma, pero necesito recordar lo que hizo antes.
Bueno me dejo de enrollar, hoy a las dos y media de la mañana llega una camioneta y yo soy el encargado de ir a buscar lo que trae. Pero y si es una trampa? Qué haré?
Ayúdame!

Mientras que leía el mensaje entraba a la casa, me acomodé en la silla de la cocina. Cuando terminé de leer me di cuenta de que él tenía razón, podía ser una trampa. Entonces llamé a Devi.

-Sí, entiendo lo que dices y puede que sea una trampa pero cómo haremos para frenarlo?- dijo.

-Es imposible, hay que armar un plan.

-Sí, siempre armamos planes pero con lo de Scott no funcionó.

-A menos... tengo una idea, dile a todo el mundo que hoy hay una fiesta en esta casa, invita a tus amigos, a tus padres, a quién sea.

-Pero hoy es lunes, nadie va querer venir- dijo.

-Diles que va a ver un volcán.

-Volcán?- preguntó confundido.

-Diles, y a todos, a los chicos también para que ellos hagan lo mismo, la mejor fiesta de todas.

Me pasé toda la tarde buscando decoración, un volcán, comida, bebida, todo. Tenía la suerte de que los chicos hacían muchas fiestas entonces tenían muchas bebidas, Jacke había ido a comprar comida y lo mandé a Ryan a que traiga decoraciones, yo me encargué del volcán.

-Juro que si ese volcán no está voy a dejar de ser tu amigo- dijo Devi mientras caminaba por toda la casa- le dije a todos mis amigos y si no está van a dejar de serlo.

-Lo conseguí- dije cuando terminé la llamada.

-Cómo?

-Va a ser un jacuzzi con el agua de color rojo y espuma roja, no es mucho lo sé, pero es lo que encontré.

-Está bien, te salvaste- dijo mientras sonreía.

Cuando se hicieron las once de la noche las personas comenzaron a aparecer, habían invitado a todo el mundo, hasta a la fraternidad enemiga. La gente estaba maravillada con el intento de volcán, muchos se metían y bromeaban con que era lava y esas cosas. Yo me quedé mirando la ventana, había una fila enorme de gente que quería pasar, era obvio que si hoy entregaban la mercancía todo el mundo se iba a dar cuenta.
La fiesta estuvo buena, no voy a decir que no, la pasamos muy bien con los chicos, hasta vino Scott pero nadie le dirigía la palabra. Él me miró y yo lo miré, me hizo una seña para ir afuera, caminé entre toda la multitud y llegué a mi destino.

-Y? Conseguiste algo?- le pregunté cuando estábamos en el patio, caminamos hasta atrás de un gran árbol que había.

-La verdad es que sí, mi habitación está al lado de la habitación del hijo de Matthew, ves estas ojeras- se señaló los ojos- el niño no para de llorar.

-Bueno, entonces encontraste al tercer drogadicto?- Scott bajó la cabeza y luego me agarró la mano.

-Tienes que verlo con tus propios ojos.

Comenzamos a correr como si no hubiera un mañana y llegamos a la fraternidad enemiga, entramos por atrás y subimos las escaleras, había muchas habitación y era muy lindo el lugar, todas estaban vacías menos una en donde había un bebé llorando. Nos acercamos a esa, la puerta estaba entre abierta, yo me puse adelante para poder escuchar mejor, pero ambos estábamos atrás de la puerta.

-Vamos nene, vamos... hazle caso a mamá- esa era la voz de Camille- yo sé que las fiestas te despiertan, no puedes dormir y lloras, y lloras, y lloras, y lloras...

Miré a Scott tenía una mezcla de enojado y asustado, me señaló mi pantalón, en donde estaba mi celular, lo saqué e hice un vídeo, pasé el celular por la puerta, pero lo suficiente para grabar, no todo para que ella no lo viera.

-Ten... vamos nene... te va a hacer bien... vas a dejar de llorar- seguía diciendo- tu papi iba a conseguir más hoy pero no pudo, ya sabes esa medicina que te doy para que duermas.

Volví a mirar a Scott, estaba llorando, le hice señas para que se fuera, que todo iba a estar bien, pero él se quedó en el pasillo.

-Vamos... mira, haz como mamá- Camille se inyectó heroina, bueno eso es lo que parecía y estaba a punto de hacer lo mismo con el bebé, pero entré en la habitación seguida de Scott.

-Qué estás haciendo?- le grité, Camille me miró y luego a Scott, le sonrió y dijo.

-Amor, hola...

Holaaa! Fin del maratón pero espero que les guste mucho.

Aclaro que no lo dejé a medias, así era como quería que terminase.

Bueno bueno, si les gusto por favor me ayudarían mucho si:

Votan, comentan y/o comparten mi historia.

Gracias!!

Los amo, bye!