El fin de semana transcurrió sin grandes cambios, tía Mery estuvo en el hospital y me sentí muy a gusto con ella, me prometió volver el próximo fin de semana, es súper cariñosa, ella tiene muchas fotos mías, pero, a decir verdad, no me gusta lo que vi en esas fotos, porque, aunque en la mayoría sonrió, no parece que lo hiciera, la mirada es fría y distante.
También pasaron a visitarme toda la familia, incluidos Sheryl y Matthew, no pude hablar con ellos como a mí me hubiera gustado, pero me agrado verlos. De mis primos el único interesado en hablar realmente conmigo fue Gael, él también tiene fotos mías, pero no eran recientes, eran fotos de antes que muriera el abuelo, al parecer nos gustaba hacer gamberradas en el jardín de la abuela.
Es domingo y Bryan se quedara esta noche conmigo, a pesar que le he dejado claro que no es necesario que lo haga, no hubo manera de hacerlo cambiar de opinión, lo bueno es que mañana Alexander no podrá venir por la mañana, lleva toda la semana sin ir a trabajar y aunque es el jefe, tiene que firmar unos documentos, que al parecer no pueden esperar, así que Sheryl se quedara conmigo mientras Bryan va a casa a ducharse y a descansar un poco.
Yo me acomodo en la cama y en cuanto cierro los ojos siento que me sumerjo en un profundo sueño.
–*–
La rutina de las mañanas es siempre la misma, después de la ducha tomo el desayuno en compañía de Bryan, solo que hoy tiene prisa por querer marchar, no para de ver el reloj.
– Bryan puedes irte, Sheryl estará por llegar, además fuera están Cesar y Liz. –. Intento convencerle.
– Espero cinco minutos más y si no ha llegado me voy. –. Pongo los ojos en blanco, ni que me fuera a perder en su ausencia. Tras un par de toques en la puerta esta se abre.
– Buenos días –. Saluda Sheryl y no viene sola, la acompaña un chico de ojos y cabello negro, me ha llamado la atención la forma en que se peinó hacia atrás el pelo con la mano, por ese detalle estoy segura de que es Billy, no me pregunten como lo sé, tan solo lo sé. – Ayrín, él es,,, –. Antes de que acabe con la presentación la interrumpo.
– Es Billy, lo sé.
– ¿Te acuerdas de él? –. Se apresura a preguntar Bryan.
– Creo que fue más bien intuición, tengo un recuerdo de Billy de cuando éramos nichos, pero no ha cambiado mucho.
– Bueno yo me tengo que ir –. Bryan se acerca y me da un beso en la frente. –Te dejo en buena compañía, portaos bien –. Me hace un guiño y se marcha.
– Gracias a tu intuición me siento menos olvidado –. Bromea Billy mientras se acerca y me da una bolsa.
– ¿Qué es? -. Pregunto extrañada.
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AYRIN
RomanceDesperté en la habitación de un hospital, no sé quién soy, ni que me ha pasado, hay unas personas que dicen ser mi familia pero yo no las recuerdo, en mis sueños hay dos versiones distintas de mi vida, en una soy una mujer feliz, estoy con el hombre...