#10 " ¡Dios! Estoy tan orgullosa de tí hija"

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Me desperté por los cantos de los putos pájaros que me despertaban día tras día.  Ya estoy harta!! Ahora verán! Me quite las sábanas y caminé enojada hasta donde había dejado la ropa del día anterior, la de mi gorda hermana. Cogí el zapato que me dejó,  abrí la ventana de mi habitación,  haciendo que los bisagras de ella chirriaran, observé a dos pájaros parados en el árbol de al lado de mi ventana. Agarré el zapato con fuerza y impulso y lo lancé contra ellos, haciendo que uno cayera de donde se encontraba y el otro saliera aleteando sus alas fuertemente. TOMA! Os jodéis pájaros asquerosos. Después de desahogarme contra esos pájaros, miré el reloj de mi mesa, marcaban las 10:26 am. No tenía nada que hacer hasta la tarde, así que, con mucho vagueo fui hasta donde se encontraba mi mierda de móvil: uno de color azul marino con una pegatina de una calavera, hecha por mí, que se cierra y se abre, con los teclados de los números algunos rotos, por culpa del antiguo perro de mi prima, murió accidentalmente cayendo por la ventana de la habitación de invitados, haciendo que se abriera la cabeza en el impacto, fue muy triste pobrecito.

Bueno, a lo que iba, miré para asegurarme que no tenia ningún msm o ninguna llamada, ya que al no tener internet no tenia whatsapp, y era cierto no tenia nada, lo volví a dejar en su sitio y me dirigí hacia mi armario para coger ropa interior, mis pantalones negros cortos y altos de cintura de cuero, mi camiseta blanca ajustada al cuerpo, mi gorro de lana grisácea, unas botas altas militares y mi gargantilla. Después, me dirigí hacia el baño para darme una ducha, abrí el agua, dejándola reposar para que se calentara, para después desnudarme y meterme en ella tranquilamente. 

Después del placentero baño me vestí con la ropa elegida, secándome el pelo al aire, para luego recogerlo en un moño desenfrenado a lo alto de mi cabeza. Miré mi reloj de la muñeca, las 11, abrí la puerta del baño, salí hacia la cocina para comer algo, por la mañana no soy muy tragona, normalmente cereales con leche o fruta, esta figura no se cuidaba sola, servía para dos cosas, darle envidia a Amber y para que los chicos se fijasen en mi. En esa habitación se encontraban mis padres, cocinando y leyendo el periódico.

-Hola ____-Dijo mi madre.

-Hola- Dije seca.

-Bueno, ya habrás empezado a buscar trabajo, ¿verdad?-Dijo mi padre levantando ambas cejas.

-Si-repetí con el mismo tono.

-¿Y...?-Dijo mi madre dándome pie a continuar- ¿Dónde? ¿Te lo dieron?

<< que pesada la menopausica...>>

-Si, en Nando's- Miento. <<Pero que coño has dicho ____?! Aun no lo tienes, te tienen que hacer una prueba!>>

-¡De verdad!- Dijo animada,  miré hacia mi padre que despegó su vista del periódico cuando pronuncie mi Si.-Si... -Tartamudeé. 

No es que quiera mentirles. 

Pero tengo que hacerlo.

Seguramente si les digo que me tienen que hacer una mierda de prueba me dirán directamente, 'Haz las maletas y fuera' 

Por lo que prefiero mentirles y esperar a que realmente lo obtenga de verdad. 

-¡Dios! Estoy tan orgullosa de tí hija.-Mi madre se acerca con intenciones de abrazarme.

Me muevo hacia un lado para darle a saber que no quiero darle ningún abrazo.

Ella hace un tipo de mueca y se queda en su sitio.

-Nunca creería que llegaría este momento. Realmente me sorprende que haya llegado tan pronto. Ahora. -Dice mi padre.

-¿Qué quieres decir con eso? -Ruedo los ojos.

Change (Austin Mahone Fanfic) Cancelada temporalmenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora