Por donde la noche no camina mis pasos se marcaban, recordando actos olvidando un recuerdo que jamás ocurrió pero aun si mis malos hábitos me traicionaban, un vacío dentro del pecho llenaba mis ideas de una triste ilusión, ser yo mismo me asustaba mas estando solo pues, ser yo es difícil, solo se hablar de mi frustración por ello nunca me escuchaba siempre obedecía mi corazón, mis malos hábitos me delataban producto de una nostalgia infame que desgarraba la razón, ¡mis habitos!, que es de ni sin ellos solo soy un caminante quieto que el mundo desecho, soy la causa de la tinta en papel y de las manchas de vino el suelo, mis hábitos maldición soy nadie porque alguien deje ser, denme un día a solas con minreflejo y este abandonará el cuarto cuando yo voltee a ver si aún estas, hábitos... Cuanto perdí para lo que gano, solo, mirar lunas distintas en lugares iguales, caminar descalzo con una alma que viste mi cuerpo desnudo entregandoce a la razón, ¡son mis habitos! una maldición escribirte cartas mientras el cigarrillo me consume, abandonar mi cama a media noche para ver un paisaje podrido recordando quien soy, extrañarte lentemane, verte con los ojos cerrados, dejar un silencio profundo solo por si me piensas o simplemente llevar el mal habito de recordar algo que contigo jamás paso.
ESTÁS LEYENDO
Columpios oxidados
RomancePequeños relatos nacen cuando el mas frío recuerdo es olvidado por tan sólo recordar que existió.