En Nueva York, Susanna estaba en la cima del cielo. Ella iba a tener un hijo de Terry! Aunque él no estuviera ahí para compartir su alegría, le había enviado a ella un telegrama de felicitaciones. Su madre no estaba de acuerdo con Susanna. Para ella, Terry debería de regresar y permanecer con su hija y el futuro bebé.
- Pero por qué él tiene que estar arriesgando su vida en la guerra? En lugar de que esté aquí cuidándote en tu condición...
- Mamá, Terry se casó conmigo como tú querías, él renunció a la que amaba. Yo voy a tener a su hijo... si, está en la guerra pero yo rezo por él cada día. Él está cumpliendo con su deber y va a regresar cuando la guerra se termine y continuará con sus obligaciones... como padre y esposo.
Pero lo que no le estaba diciendo a su madre era que su esposo tenía que pensar literalmente en otra mujer, para que pudiera cumplir con su deber... pero su amiga Karen si lo sabía. Ella frecuentemente hablaba con ella de eso.
- Susanna eres feliz?
- Tengo a Terry, Karen, así que yo tengo todo lo que necesito...
- Susanna, él te llama "Candy" cuando te hace el amor! -dijo Karen indignada.
- Yo sé que él nunca me amará como la ama a ella... pero es eso o ningún contacto físico del todo... y lo amo tanto... y soy tan feliz cuando él...
- ... te llama "Candy"?
- Karen... por favor. Basta de arruinarme el momento.
- Susanna, no es sano lo que tú estás viviendo. Es una ilusión...
- Pero el bebé no, es una realidad.
- Si... debes de agradecerle a Candy... -dijo Karen irónicamente.
- Karen.
- Tú deberías de ir a ver a un psiquiatra, hablar acerca de tus problemas...
- No estoy loca Karen, estoy enamorada.
- Si, aparentemente, tú estás confundida... bueno. Está bien, tienes que estar en calma por el bebé y si eres feliz... como tú dijiste... yo solo puedo apoyarte.
Susanna continuó viviendo en una nube. La hacía feliz y la detuvo de hacerle pensar que su esposo no la amaba. El bebé... el hijo de Terry, él nunca la abandonará ahora que ella iba a tener un hijo de él...
oOoOoOoOoOo
El tiempo pasó y era temporada de fiestas decembrinas otra vez. Candy pasó la Navidad, bajo las balas nuevamente, con la familia de Michael. La madre de Michael había tomado a algunos niños huérfanos bajo su cuidado. La casa estaba llena. Su familia le había enviado algunos alimentos para las fiestas y quería compartirlos con ella y los niños de la guerra. La señora había organizado un programa, que durante la época navideña, consistía en llevar a algunos niños con familias adineradas, quienes a pesar de la guerra podían subsistir. Así que muchos huérfanos estaban pasando la época con familias de cuidado temporal. Candy estaba conmovida con la generosidad de la madre de Michael y las demás familias. Ella nuevamente fue con sus colegas y Michael a ayudar a el orfanato. Albert, Archie y Neil enviaron alimentos y juguetes a los niños. Annie se encargó de los otros en el Hogar de Pony. Candy estaba feliz porque Annie no se olvidaba de los niños del Hogar. Ella recordaba cuán feliz eran ellas cuando despertaban en la mañana de la Navidad y junto con los otros niños encontraban que "Santa Clause" había venido y había sido muy generoso, porque ellos habían sido muy buenos.
Como siempre la Cruz Roja organizó la recepción de Año Nuevo y los soldados del frente habían sido invitados, entre ellos Michael y Terry. Candy y Terry no le habían dicho a Michael todavía que ellos ya se conocían, que ellos eran muy cercanos y que se hubieran casado de no ser por el accidente de Susanna. Ellos se decían, para que preocupar a Michael sin ninguna necesidad? Todo se había terminado entre ellos para bien y no podía haber nada entre ellos nuevamente. Respetaban sus mutuos votos de matrimonio.
ESTÁS LEYENDO
SE TERMINO...
FanfictionDespués de la fiesta en el Hogar de Pony, Candy recibe noticias inquietantes...