Capítulo 15 "La fiesta de Año Nuevo"

582 40 8
                                    



Hacia frío y la nieve caía sobre la ciudad de Nueva York. El puerto estaba atestado de gente que venía a esperar a sus familiares y seres queridos que habían sobrevivido a la guerra. La mayoría de los reencuentros eran muy emocionales, madres y esposas llorando de felicidad, niños felices de encontrar a sus padres con vida, padres más que felices de verlos a ellos.
Ese día se organizó un gran desfile en honor a los soldados, con globos y confeti cayendo por doquier y los bares celebraban ofreciendo bebidas gratis a los soldados.

Terry y Michael estaban celebrando junto con sus amigos y después tuvieron que separarse.

- Nos vemos después amigo -dijo Michael.

- Adiós Doc, cuida de tu pequeña esposa...

- Tú también y dale un beso a tu hijo por mi... tenemos que vernos para que nuestras familias se conozcan...

- Claro... -dijo Terry no muy seguro de eso.

Él sabía que Susanna nunca aceptaría encontrarse con Candy y su esposo, pero podría ser que el hecho de que Candy estuviera casada con otro hombre y con un hijo en camino...

- Nos vemos Doc -se despidió Terry alejándose.

- Adiós Terry -dijo Michael.

Terry se puso en marcha para ir a visitar a su amigo Charlie quien ahora tenía su propio bar y estaba entre los que ofrecían bebidas a los soldados. Sus problemas con la ley eran cosa del pasado y ahora era un hombre casado y padre a la vez. Los dos amigos al verse se abrazaron.

- Terry! Qué bueno verte amigo!

- A ti también. Estoy feliz de verte tan estable...

- Ya he pagado mi deuda con la sociedad y ahora soy padre de un pequeño niño...

- Felicidades! Yo también soy padre...

- Felicidades! Tenemos que planear un día para que nuestros hijos se conozcan y jueguen y lleguen a ser muy buenos amigos como tú y yo, en aquellos viejos tiempos...

- Es bueno verte Charlie...

- Lo mismo digo. Podías haber muerto en la guerra y no hubiera podido verte jamás... Te casaste con tu hermosa enfermera? Candy? Ése era su nombre?

- No Charlie. No me casé con Candy...

- Pero cómo? Qué pasó?

Terry le contó la historia de lo sucedido con Susanna y Charlie no podía creer lo que escuchaban sus oídos!

- Terry... te sacrificaste por una mujer que ni siquiera amas? Lo siento amigo...

- Gracias... Así es la vida... tengo que ir a casa a ver a mi hijo y esposa.

- Nos vemos después... está bien?

- Hasta luego... -dijo Terry retirándose.

Terry se dirigió a casa a ver a su esposa e hijo. Caminaba gritando vítores con los demás soldados a lo largo de las calles hasta que por fin llegó, tarde al final del día. Además de que las calles estaban atestadas y era difícil caminar.


oOoOoOoOoOo

Mientras tanto Michael llegaba a Chicago, entre gritos de felicidad de la gente durante todo el viaje. Tomó un taxi para que lo llevara a la Mansión Andrew. La última vez que él estuvo en esa Mansión, fue con su primo, el día en que conoció a Candy...
Estaba nevando. Llamó a la puerta y el mayordomo vino a abrir.

- Si?

- Soy Michael, el esposo de Candice.

- Ohh... pase por favor, en seguida llamo a la señora.

El mayordomo no tuvo tiempo de ir por Candy, está última estaba ya corriendo al encuentro de su esposo saltando a su cuello gritando:

- MICHAEL!!! Oh Michael te extrañé tanto!!!

- Y yo a ti "Señorita Atrevida"! Dios mío! Se siente tan bien tenerte nuevamente en mis brazos!

Él buscó los labios de ella y la besó apasionadamente por un largo momento. Cuando ellos finalmente se detuvieron, vieron que toda la familia los estaba observando y Candy les sonrió.

- Recuerdan a Michael? Excepto tú Albert, no te encontrabas aquí... él es mi esposo el Teniente Michael Durand...

- Es un placer conocerlo Teniente -dijo Albert sonriendo.

- Lo mismo digo yo -respondió Michael feliz.

- Y ella es Patricia, la esposa de Stear... -añadió Candy.

- Encantada de conocerlo Michael -dijo Patty.

- Es un placer Sra. Cornwell -dijo Michael besando la mano de Patty.

Se preparó una fiesta en honor al regreso de Michael, otros invitados llegaron y todos estaban felices. Eliza llegó con su esposo, pero se mantenía alejada de Michael en la presencia de su esposo. El último recuerdo que ella tenía de Michael era de cuando ella quería detenerlo de que ayudara a Candy. Candy se encontraba en el séptimo cielo, su esposo se encontraba ahí y la guerra había terminado. Cuando los invitados se retiraron, Michael permaneció contando historias de la guerra hasta muy entrada la noche.

En su alcoba, Michael y Candy estaban preparándose para ir a la cama.

- Estás bien cariño? -él preguntó.

- Tú eres médico, lo puedes ver por ti mismo.

- Se supone que los médicos no pueden tratar a los miembros de sus familias...

- Tú no estás tratándome querido, tú estás revisando al bebé...

- Más tarde... ahora, yo solo quiero una cosa... pero antes que nada, cuando quieres venir a Francia conmigo?

- Michael, podemos esperar hasta que el bebé llegue?

- Por qué?

- Porque la travesía fue una pesadilla para mí...

- Oh... cuánto lo siento cariño... está bien entonces, vamos a esperar a el bebé...

- Pero si tú, absolutamente tienes que irte...

- No. No quiero dejarte...

- Yo tampoco... Oh Michael, estoy tan feliz de verte -dijo Candy abrazándolo.

Ellos fueron a la cama y se mostraron el uno al otro cuánto se extrañaban, cuánto estaban sedientos el uno por el otro.


SE TERMINO...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora