SE TERMINO...

Capitulo 12 "El bollo en el horno"

Mientras tanto en París, Michael se estaba preguntando a dónde estaría su esposa, ella ya debería haber llegado a casa.

Tal vez el camión se descompuso? Con el clima tan frío, lo más seguro es que el regreso se pospuso. Lo que sea que fuera él iba a ir a buscarla por la mañana.

Tal vez ella fue capturada por el enemigo? No. Él tenía que permanecer optimista. Su "Señorita Atrevida" estaba bien. Ella iba a cruzar el umbral de la puerta en cualquier momento sonriéndole.

Pero él se estaba volviendo loco de preocupación, así que fue en busca de un camión para ir al campamento a buscar a su esposa.

Una noche más
Una noche más contigo
Cierra tus ojos que te daré mi amor
Una noche más
Una noche más contigo
Por favor abrázame una vez más
Porque te amo
Aqui yo estoy
Y no puedo llorar
Mi corazón se esta quebrando
Tu dices adiós
Encontraste a alguien más
Donde sea que tú vayas
Yo estaré contigo
Una noche más
Una noche más contigo
Escúchame ahora, no puedo dejarte ir
Una noche más
Yo te abriré mi corazón
Por favor abrázame una vez más
Porque te amo
Pero antes de que te vayas
Solo tómame entre tus brazos
Y dejame sentirte una vez más
No puedo más
Todavia dependo de ti
Lo que sea que hagas
Estaré contigo
Una noche más
Una noche más contigo
Cierra tus ojos, te daré mi amor
Una noche más
Una noche más contigo
Sabes cuánto va a durar
Depende de ti
Quiero abrazarte una vez más
Porque te amo

Candy estaba soñando que llegaba al hospital en brazos de Terry y corría hacia Michael para asegurarle que nada había pasado entre ellos.

- Oh Michael, te amo tanto -murmuró ella entre sueños.

Terry, quien había abierto sus ojos al amanecer, se sintió herido. Pero no quería soltar a Candy, gozaba de un deleite que no iba a tener la ocasión de que se repitiera después. Así que tomó total ventaja del momento.

Candy se sentía bien, tibia y segura en los brazos de Terry, se acomodó un poco más... amaba el olor de su colonia... en brazos de Terry... Oh... no... tenía que abrir los ojos y si ya era de mañana... tendría que dejar ese peligroso lugar que eran los brazos de él... pero... despertó y no se movió, se quería acurrucar, se sentía tan bien, sentía que estaba en su lugar, durante esas breves horas... su lugar? Pero en realidad su lugar era estar con Michael, no con Terry... Terry estaba casado con Susanna... ese sólo pensamiento la puso tan triste que lágrimas empezaron a rodar por sus mejillas. Terry sintió que ella ya había despertado.

- Candy, estás bien?

- Si Terry. No estamos muertos de congelamiento.

- Por el contrario -dijo él sonriendo.

- Tu piensas que es divertido, no es así?

- Yo pienso que fue un placer haberte tenido en mis brazos durante toda la noche...

- Nos tenemos que levantar... -dijo Candy quien no se quería mover para nada.

Entonces ellos escucharon un ruido afuera y vieron la cara de Michael quien los estaba observando por la ventana. "Ah... no te asustes" se dijo Candy, quien temió que la alegría que tenía de estar con Terry fuera demasiado obvia. Pero Michael no sabía que Terry era el hombre que ella amaba, el hombre que todavía ama. Se calmó a sí misma.

- Michael? -dijo Candy sonriendo.

Se sentó, abrió la puerta y saltó a los brazos de su esposo. Ella había empujado un poco a Terry hacia un lado abruptamente y el se sintió herido por eso...

- Candy! Estaba tan preocupado! -dijo Michael- Pero si hubiera sabido que estabas con Terry, no me hubiera angustiado demasiado...

"Oh Cielos" pensó Candy. Esas palabras sonaban demasiado insólitas, viniendo de la boca de su esposo. Michael confiaba en Terry, si supiera la verdad... ella no quería ni pensar en eso. Tomó sus cosas y se dispuso a volver con Michael al hospital.

- Terry, gracias por mantener tibia a mi esposa...

- Por nada Michael, tú hubieras hecho lo mismo por la mía -dijo Terry.

Otro transporte del campamento militar había llegado y estaba encargándose del camión de Terry.

- Gracias Terry -dijo Candy mirándolo con cariño.

Él se hundió en los ojos de ella por un momento, entonces Candy se dió la vuelta para ir al camión con Michael.

- Adiós Candy -dijo Terry casi para sí mismo.

En el camión que estaba llevándolos de regreso, Candy iba pensando que a ella le estaba empezando a gustar esa situación demasiado. Ella tenía a los dos hombres que amaba con ella, en la guerra; pero se sentía un poco desleal a Michael, porque él no sabía que Terry era el hombre que ella amaba, que ella ama... si, ella ama a Terry locamente . Ay... la vida era tan complicada!


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