Capítulo 11: Malentendidos- Parte 1

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Emma

Estaba preocupada, ni siquiera Mason sabía de él, pensé que llamaría después de notar mis llamadas, pero no.

Quería pensar que perdió su celular o que lo asaltaron, por que Mason me aseguró que no podía ser nada grave.

— ¿Emma ya estas lista?

— ¡Rayos! Bajo en cinco minutos...

Felizmente llegue a tiempo ya que a mi padre le dio ganas de llevarnos a la escuela, bajé del auto y al llegar a la entrada observé a Mason y Caitlyn entrando juntos.

Genial, mi nuevo amigo es íntimo con mi peor enemiga.

Entré a clases molesta, me disgustó verlos juntos, no puedo creer que se sea amigo de ella y para colmo parece que le gusta.

— ¿Qué pasó? —preguntó Andy a mi lado.

—¡Todo! —  dije lanzando mi bolso.

—Tranquila, no te desquites con la carpeta. 

—Lo siento, solo no estoy de humor.

—Y se puede saber por qué.

— ¡Ahora no!

—¡Emma!

— Chicas por favor, no quiero quedarme sorda.

— Uy que sensible...

— Lo siento. ¿Qué sucede?

— Tienes que contarnos lo que pasó el sábado con Mason—susurró Aileen en mi oído.

—¿Cómo sabes que..

—Te vimos —interrumpió Kelsey.

—Lo puedo explicar...

—Tranquila, lo hablamos en el receso.

Este día esta empeorando, Colton sigue desaparecido, Mason enloqueció por Caitlyn y Kelsey cree que le mentí.

No me sentía bien, mi cabeza estaba por estallar; a la mitad de la clase el Sr. Johnson me pidió resolver un ejercicio en la pizarra, traté de pararme pero me sentía pesada.

— ¿Estas bien? —preguntó Andy.

—Sí, solo hace un poco de calor - contesté acomodando mi cabello.

Avancé hacia la pizarra, empecé a resolver la ecuación, cuando estaba por acabar, noté mi mano borrosa, cayó el marcador y luego todo se volvió negro.

                           *******

Cuando desperté estaba recostada en la enfermería.

—¿Cómo te sientes? —preguntó la enfermera.

—Muy cansada —respondí tratando de sentarme.

— ¿Tú y tu novio están usando algún método anticonceptivo?

—¿Qué? ¡No! Yo no tengo novio; soy virgen.

—Muy bien, veamos.. ¿Estás alimentándote?

Demoré en responder— Bueno, no tenía apetito y...

—Espérame un minuto —interrumpió.

Me vestí y me decepcionó al ver el reloj que solo había pasado media hora, solo quería que acabase el día.

— Aquí tienes —dijo entregándome un vaso.

—¿Qué es?

—Vitaminas, te sentirás mejor.

Mi Mejor ErrorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora