Capitulo 10

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Tormento era la palabra que describía en su totalidad a Peter en estos momentos. Su sincero corazón se estaba marchitando a pesar de que navegaba en un mar tan denso que sólo lo estaba hundiendo en su miseria esperando naufragar nuevamente a los brazos de Wade. Nadie más entendía su dolor. Nadie más notaba que se desangraba de tras de esa sonrisa que le parecía adorable a cualquiera. Nadie sabía que tan roto estaba. Pero lo que él no sabía es que aún no tocaba fondo...

El castaño se dirigía a la mesa donde sus demás amigos charlaban disfrutando el intermedio de las clases. Al tomar asiento su mejor amigo no tardo en recriminarle su más reciente hábito.

—Por dios Peter apestas a alcohol. —Dijo Harry con un gesto de desagrado. — ¿Acaso tu padre no se da cuenta?

—No grites tanto por favor. —Se quejó el castaño, la migraña causada por la borrachera de anoche volvía a acerca presente. —Él está ocupado teniendo sexo con Steve.

—No nos gusta verte así. —menciono el rubio con pena.

—Exageran demasiado. —Peter trato de excusarse.

—Todo es culpa de ese idiota. —Harry se escuchaba bastante molesto.

—Quiero vengarme. —susurro el castaño.

—Nunca has estado de acuerdo con la venganza. —Le recordó el rubio.

— ¿Y qué piensas hacer exactamente?—Cuestiono Harry con una ceja alzada.

—Seduciré a varios hombres frente de el .—dijo totalmente decidido ante su estúpida idea.

—Peter esto no llevara a nada bueno. —le insistió Harry.

—Tú no eres un mal chico, no es necesario que hagas eso —trato de convencer la antorcha humana a su mejor amigo.

—Y de qué sirve ser buena persona si te trataran como mierda. —dijo levantándose molesto, era su decisión y no planeaba cambiar de parecer solo porque a los demás no les parecía.

La noche callo cubriendo todo con su densa oscuridad, los faroles de la calle servían como guía para aquellas almas pérdidas que solo buscaban algún refugio para calmar su corazón con cual quier inquietante vicio que poco a poco terminaba con ellos a tal punto de desaparecer.

Peter volvió nuevamente con el objetivo de aprender a seducir a cual quiera que se a travesara en su camino, comenzó aceptando las copas que algunos clientes le enviaban como invitación a una noche en un motel barato, otros eran más directos e iban a charlar un poco con el pero el castaño solo hacia comentarios cortos y superficiales para seguir fingiendo que les ponía atención. Todo parecía marchar a la perfección hasta que mientras salía del baño se topó con alguien que no esperaba ver en un lugar así.

—Stark, valla sorpresa encontrarte aquí. —se acercó con rapidez al arácnido hasta que lo arrincono en la pared. —Así que no solo eres el nerd que todos piensan.

—Puedo ser todo lo que tú quieras. —dijo guiñándole un ojo, si no hubiera bebido antes tal vez no tendría el valor para haber dicho eso. — ¿Quieres que gima tu nombre? o ¿Quieres escuchar como gimo el de alguien más? —su mano derecha acariciaba torpemente el pecho de Flash, trataba seducirlo pero aún no era un experto con el contacto físico que no fueran besos o tiernos abrazos.

—De verdad que me dejaste sin palabras. —dijo con una gran sonrisa. —Esto te gustara. —puso una pequeña pastilla de color amarillento en su lengua. Y para sorpresa de Peter, el rubio lo beso con desesperación y de esa manera paso la pastilla a su boca para finalmente tragarla.

— ¿Qué era eso?

—Solo un dulce. —rio ante la pregunta del castaño. —Sera una noche interesante. —dijo llevándose a Peter...

D.A.D Despecho, Alcohol y DrogasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora