•A Otra Tonalidad•《Shawn Mendes》

《Capítulo 14》

-____, apurate, ya nos vamos - mi padre salió de la habitación, luego de darle mi primer maleta.
Hoy volvería a Los Ángeles, extraño mucho mi lugar. Extraño la playa y el sol.
Cerré mi bolso y lo cargué en mis hombros para luego cerrar el cuarto con llave. Bajé las escaleras y me reencontré con mis padres en el salón de espera.

-Por fin que apareces - mi madre beso mi frente con una sonrisa - ya te estaba por ir a buscar- sonreí.

-Vamos, el taxi nos espera- asentí y tome mis bolsos, para luego subirlos al auto que nos llevaría hasta el aeropuerto. Extrañaría Canadá, no puedo decir que no. Era el lugar perfecto para relajarse y simplemente descansar.
Llegamos al aeropuerto. Entramos por las enormes puertas de madera buscando la entrada D, hasta que de lejos la encontramos.

-Alla están - mi padre apunto a la familia Mendez. Una pequeña punzada golpeo mi pecho. Tenía que convencerme a mi misma que no me podía gustar, no el, no el artista de mi padre, no el futuro estrella.
Baje la mirada hacer cuando me lentamente.

-Hola ____- la dulce voz de Karen hizo que mi cabeza se levantada para encontrarme con su tierna sonrisa.

-Hola-mire a la derecha encontrándome a Manuel y a Shawn- A todos- dije tratando de sonreír, aunque estoy segura que así no se vio.

Realmente no espero que me entiendan. Todos creen que es tan simple como ir hablarle y no fingir que me gusta, no esconderme. Pero es tan feo cuando sabes lo que pasa, cuando sabes en lo que te convierte esta industria que simplemente ya no querés intentarlo, ya no quiero intentarlo. Estoy hasta de comenzar un libro cuando ya leí el final miles de veces. Ya me cansé de esto y de todo lo que yo como estúpida sufro.

-¿____?¿ Estas aquí?- La voz de mi padre retumbo en mi cabeza.

-eh, si si- dije tomando mi cabeza entre mis manos.

-¿Te sientes bien?- esta vez escuche la voz de mi madre.

-Si ma, tranquilos estoy bien- asintieron sin estar seguros, aunque ni yo lo estaba.

-Bien acaban de llamarnos para embarcar- asentí ante la información que me acaba de dar mi padre. Lo seguí, después de despedirme de los padres de Shawn, y entramos al pasillo que terminaría en el avión. Busque mi asiento, nuevamente alejado de mis padres, pero para mi mala suerte, muy cerca de Shawn. Al lado de Shawn. Coloque mis auriculares y mire por la ventanilla tratando de no prestar atención a nada mas, aunque esto era difícil si no dejaban de tocarte el hombro.

-¿Que?-Gire de mala gana sacando mis auriculares. Lo mire a los ojos por primera ve en el día, los nervios empezaron.

-¿Que te pasa?- su voz era indescriptible. No entendía si estaba enojado, triste, contento o simplemente era una joda.

-¿De que me hablas?- me acomode en el asiento quedando en frente de el.

-¿Es en serio?-asenti insegura- De esto te hablo, pensé que estábamos bien- su cabeza bajo levemente- Y ahora ni siquiera quieres hablar conmigo- la culpa me llego fuerte.

-No quiero hablar de esto ahora ¿si?- mis manos empezaron a temblar. No quiero volver a sufrir, no de nuevo.

-¿Y cuando vas a querer hacerlo? Porque no creo que sea pronto- baje la cabeza viendo como mis dedos peleaban.

-Perdon ¿si?- lo mire y sentí lo mismo que cuando lo vi en la tienda de música - No puedo con esto- mi voz empezó a quebrarse. Los recuerdos inundaban mi cabeza con una sola conclusión. El me lastimaría.

-¿Pero porque?- y en este momento me arrepentí de esa pregunta, y de su respuesta.

-Porque no me puede gustar el artista de mi padre ¿Lo entiendes? ¿Sabes cuantos ya jugaron conmigo? No quiero esto de nuevo. Solo no quiero- gire en mi asiento y coloque nuevamente mis auriculares. Arrepintiéndome de mis palabras.