《Capítulo 4》

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Estaba comiendo galletas cuando mi celular sonó.

'Mensaje nuevo. Número desconosido'

"Hola, sinceramente no puedo dejar de pensar en vos"

Miré extrañada el celular, no reconocía el número.

"¿Quién sos?"

Dejé mi celular a un lado pero a los pocos segundos volvió a vibrar.

"¿Niall, ya me olvidaste?"

Imposible olvidar esos ojos azules. Sonreí.

"No lo hice, ¿cómo estas?"

Como era de esperarse, la respuesta llego muy rápido.

"Bien, mejor ahora que hablo contigo"

Reí, mucho.

"Coqueteo barato. ¿No se te ocurrió nada mejor?"

"Eso fué un golpe bajo, me dolió el corazón"

Reí por su estupido mensaje.

"Oh lo siento llamaré al doctor"

"Que sea uno bueno. La herida es profunda"

"¿Y cómo podrán arreglarla entonces?"

"Digamos que si una linda chica llamada ____ aceptaría acompañarme hoy a tomar algo el daño estaría curado"

Sonreí al leer su mensaje.

"¿A qué hora y en donde?"

"¿Eso es un si?"

"Si"

"En starbucks a las cuatro"

"Ok"

Dejé el celular y miré la hora, eran las dos de la tarde.
Subí a mi cuarto y me tomé una ducha larga. Salí y me vestí con unos shorts blancos y un crop top bordo. Peiné mi pelo con los dedos y me puse unas vans blancas.

Bajé las escaleras y caminé hasta el sturbucks, no había rastros de Niall.
Me senté en una mesa de afuera para poder verle cuando llegue.

-_____- levanté la mirada y sonreí.

-Niall hola- lo saludé con un beso en la mejilla y nos sentamos en la mesa.

-Tengo que admitirte que nunca pense que aceptarias-sonrió y rasco su nuca.

- ¿Por qué no?- lo miré curiosa por su respuesta.

- Ya sabes- estaba nervioso, podía notarlo- sos una chica de una clase mejor. Y yo simplemente soy un vendedor- lo miré sorprendida por sus palabras. ¿Acaso eso pensaba la gente al verme?

- Se nota que no me conoces- sonreí- No me interesan esas cosas- sonrió.

- Entonces tendré que conocerte mejor- nos miramos sonriendo.

Pedimos nuestras bebidas y desidimos salír a caminar por la playa.

- Y cuentame mejor de ti- le dije tratando de acabar con el silencio.

- No hay mucho que contar- sonrió- Nací en Irlanda, a mi papá lo transfirieron de su trabajo hasta aquí. Crecí alrrededor de la música, mis papas siempre tocaban instrumentos y cantaban por toda la casa- reimos- fué lindo ver como la música los unia- conectamos nuestras miradas y bajé mi cabeza- Y cuentame de ti- dijó al rato.

- Bien, nací en pittsburgh, al otro lado de los estados unidos. Me crié en el medio de la música y mi papá consiguió trabajo aquí, asi que cuando tenía cinco años nos mudamos- sonreí al recordar lo enfadada que estaba por hacerlo.

- ¿Tocas algún instrumento?- pregunto mirando al frente.

- Si, la guitarra desde que era pequeña- miré hacia el agua.

- ¿Y cómo se llama tu papá?- lo miré confundida.

- ¿Acaso eso importa?- ¿porqué quería saberlo?

- Solo curiosidad- su mandíbula se tenso- ¿Como se llama?

-Tommy- dije agachando la cabeza, rogando aue no lo conociera.

- ¿Tommy wood?- Abrió sus ojos y su rostro estaba sorprendido.

- Si, supongo- no quería esto de nuevo.

- Lo admiro mucho, siempre soñe con que firmaba con el- asentí.

-Niall tengo que irme- me paré en frente de el- Nos vemos otro día- asintió y salí de allí.
No se porque me sentía incomoda. Odio hablar de mi papá, simplemente porque todoa parecian conocerlo.
Era algo raro e inecesario hablar de el, pero creo que eso solo estaba en mi cabeza porque  al parecer todos querían hablar de el.

Llegué a mi casa y me dirigí directamente al salón de música.

Era un cuarto gigante con un hermoso piano y unas cinco guitarras. Había un micrófono en el medio y una pared llena de amplificadores.
Me acerqué a una guitarra y la tomé del mango. Crucé la cinta por mi cuello y caminé hacia el micrófono.
Empecé a cantar Photograf de Ed Sheeran. Cerré mis ojos dejandome llevar por la melodía. La letra de esta canción era tan linda, tan sentimental.

Cada vez que cantaba todo se me iba de la cabeza. Los problemas desaparecian por lo menos unos minutos. Era mi forma de desestresarme y de relajarme. Siempre funcionaba.

Toqué los últimos acordes y me separe del micrófono.

Abrí los ojos de golpe al encontrarme a mi papá aplaudiendo en la puerta.

- Pequeña eso fue hermoso- se iba acercando a mi.

-No fue nada- dije apollandó la guitarra donde estaba.

-¿ Es encerió? Cantas hermoso, tenes mucho talento- asentí y le sonreí- Creo que me la paso buscando talentos cuando enrrealidad lo tengo en mi propia casa- sonreí y lo miré a los ojos.

-¿Que estas tratando de decír?- Lo conocía y sus palabras siempre eran por algo.

- Quiero que firmes contrato, que hagas tu música- sus ojos brillaban- quiero que te conozca todo el mundo, tu música se va a escuchar hasta en Reino Unido- su sonrisa era inmensa- Mañana mismo grabaras una canción para tu disco- traté de hablar pero no me dejo- Tranquila los escritores siempre tienen alguna canción nueva- suspiró- Vas a ser increible, ya imagino tu primer conciert....

-¡ Basta!- grité haciendo que mi papá se callara- Perdón pero no quiero eso- salí del cuarto dejando a mi papá hablando solo.
Yo no quería fama. No quería que todo el mundo me conozca, ya suficiente tenía con mi papá.
Simplemente quería seguir siendo normal, a mi manera.

•A Otra Tonalidad•《Shawn Mendes》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora