How To Train Your Robot | myg + pjm

Lección 15

Cómo NO navegar en internet

—Bien JiMin, esto es una laptop de último modelo, es como la tableta que te presté, pero mejor. Nunca he tenido una pero sé cómo se usan, ahora que gano dinero puedo darme el lujo de tenerla —el robot estaba sentado en el sofá a un lado del pelinegro y lo observó por unos segundos mientras el mayor abría el aparato recién comprado y lo dejaba en la mesita de centro.

—Hyung, sé perfectamente lo que es una laptop —tenía mucha información en su sistema, no era tan tonto—. También sabía lo que era una tableta sólo que nunca había usado una.

YoonGi lo miró, hizo una mueca con los labios y JiMin sonrió.

—Mira pequeño presumido, igual te voy a explicar lo que es —se quejó, colocándola enfrente del robot—, calladito te ves más bonito.

JiMin soltó una risita por eso y miró la pantalla de la laptop, escuchando atentamente lo que su Hyung le decía sobre las funciones y cosas como las redes sociales de las que debía estar enterado si quería verse lo más humano posible. JiMin se dio cuenta de que YoonGi tampoco parecía saber mucho acerca de las computadoras, aún así, no le dijo nada y se mantuvo atento.

—Y si estás muy aburrido puedes usar esto para chatear con quien yo tenga en mi lista de amigos —el rubio miró con atención, a pesar de haber usado el aparato anterior, era la primera vez que YoonGi le explicaba el funcionamiento de las redes sociales.

—Sólo conozco a HoSeok Hyung... —decía mirando los nombres—. ¡Oh! Aquí está el nombre de SeokJin —señaló la pantalla.

—Ah, ¿y este qué hace aquí? —miró el aparato un poco confundido.

—¿Puedo hablar con él?

—No necesitas hacer eso —YoonGi tomó su chaqueta y JiMin hizo un puchero.

—¿Por qué no?

—Después creerá que me cae bien y no es cierto —se rió y tomó una mochila—. Regreso en unos minutos, puedes quedarte jugando con esto —salió del cuarto.

—¡Adiós Hyung~! —se despidió mientras tecleaba el nombre de HoSeok.

[💻]

YoonGi había llegado a casa, con bolsas de comida y algo cansado porque las filas en las que había estado metido avanzaron tan rápido como una tortuga obesa, se había quedado parado más tiempo del que acostumbraba alrededor de más gente de la que acostumbraba y se suponía que había salido simplemente por un par de golosinas. El lado bueno era que no había llevado al robot ya que seguramente estaría preguntando cientos de cosas y haciendo comentarios extraños, y él no estaba de humor para explicarles a todos que él era un robot.

—JiMin, ya llegué —le avisó en alto desde la puerta, encargándose de llevar las cosas a la cocina.

En ese momento, unos pasos rápidos llegaron hasta la cocina y YoonGi notó que JiMin se sentaba rápido en la isla de la cocina con una ligera sonrisita encantadora en el rostro que lo hacía sonreírle de igual manera.

—Estás mejorando mucho con tus expresiones —su mano se alzó hasta la cabeza del contrario, de repente se preguntó qué estaba haciendo y con algo de pánico le dio un par de palmaditas que no entendía de dónde habían salido—. ¿M-Me dirás por qué se supone que estás contento? —disimuló mientras caminaba hacia los estantes para guardar la comida.

—He aprendido expresiones nuevas, todo gracias a HoSeok Hyung y también aprendí a hacer algo con mis mejillas —al decir aquello las tocó con las puntas de sus dedos, sonriendo.

—¿Y qué tal?

Un repentino gemido se hizo escuchar en toda la casa y YoonGi se giró escandalizado, casi cayéndosele la bolsa de papas fritas.

Frente a él, un JiMin con las mejillas rojas y con una cara de satisfacción tremenda se mordía su labio inferior para luego humedecerlo con su lengua y, para agregar, lo miraba fijamente desde su asiento con aires invitación mientras movía ligeramente su cuerpo (sus caderas, específicamente), como si lo estuviera invitando para...

—¡¿Qué mierda estás haciendo?! —lo tomó de los hombros y lo detuvo, justo cuando sintió su estómago revolverse y no de la mala manera.

—Hyung... no entiendo —¿no lo había hecho bien?—. Hice exactamente lo que vi en esa página web.

—¡¿Página?!

—Yo... HoSeok Hyung me mandó páginas en internet y me dijo que a usted le gustaría que hiciera las expresiones que veía allí para hacerlo feliz —infló sus mejillas.

YoonGi sintió un repentino tic en el ojo.

—También aprendí a hacer algo con mi boca... —YoonGi se apartó en el instante que el menor pareció inclinarse hacia él.

—No, no hagas nada, no necesito que hagas nada y HoSeok no puede decirte qué cosas hacer, solo yo, ¿entiendes? —suspiró un poco tembloroso, JiMin asintió—. ¿Algo más? —quiso estar seguro.

—Bueno, me pareció curioso cómo las personas hacen esas cosas en los vídeos, pero tienen caras de dolor, entonces ¿por...?

Bien, definitivamente YoonGi no quería hablar al respecto.

—JiMin, borra eso —dijo rápido mientras se tropezaba con las palabras, tomándolo de los hombros para que no se le ocurriera hacer ninguna otra cosa.

—Pero Hyung, tengo muchas preguntas, HoSeok Hyung me dijo que usted querría hacer algo como eso porque estaba solo y...

—JiMin, bórralo —insistió, sus mejillas rojas a más no poder mientras se imaginaba la escandalosa risa de su mejor amigo.

—¿Seguro, Hyung? —ladeó su cabeza, YoonGi asintió rápidamente.

El robot se quedó un par de segundos en silencio y sus ojos brillaron en rojo un segundo, el hombre lo miraba con atención hasta que volvió a parpadear.

—¿Listo? ¿Todo?

—Sí, Hyung —sonrió.

—¿Entonces no recuerdas nada de lo que viste en esa página? —lo miró con cautela.

—¿Cuál página? —ladeó su cabeza, sonriendo con inocencia y YoonGi sintió el alma volver a su cuerpo. No quería tener que explicarle a NamJoon lo que había sucedido.

—Bien, quédate aquí y no toques la computadora —tomó nuevamente sus llaves y empezó a caminar hasta la puerta mientras murmuraba maldiciones.

—¿A dónde va? —se bajó de su asiento, siguiéndolo con una cara de curiosidad—. Acaba de llegar, Hyung.

—Mataré a HoSeok —explicó rápidamente, JiMin formó una expresión de miedo.

—¡No, Hyung! —corrió tres él—. ¡Matar es ilegal!

JiMin corrió hasta YoonGi y lo atrapó entre sus brazos para detenerlo del posible delito, cayendo ambos al suelo por lo repentino que había sido su ataque. El hombre lo miró desde el suelo, el robot se encontraba sentado en sus piernas mientras lo miraba con preocupación y él estaba lo suficientemente avergonzado al respecto como para siquiera empujarlo.

Su mente pareció querer ser cruel con él en ese segundo y pensó entonces qué cosas habría hecho el contrario con la información obtenida, qué cosas habría sido capaz de decirle o qué cosas pudo haber intentado hacer.

Tragó saliva.

—Uh... Hyung —lo llamó, acomodando su posición—, ¿tiene algo en el pantalón? —preguntó repentinamente y YoonGi esta vez, sí lo empujó para quitárselo de encima—. ¡Hyung! —se quejó cuando estaba en el suelo, mirando con confusión como el contrario se encerraba en su habitación.

Bueno, por ahora, YoonGi tendría que prohibirle el internet a JiMin, hablar seriamente con HoSeok y luego... quizás matarlo.