• Cap 12 •

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¿La paz vuelve a París? Hace unas semanas que no ha ocurrido ningún ataque de ningún tipo ¿Hemos vuelto a la normalidad?

— Vaya, ¿a qué se debe esto?

— He... Estado ocupado últimamente.

— ¿Distrayendo a la enemiga? Porque si es así, te felicito.

— Sí, tiene que ver con tu enemiga, pero no la distraigo, bueno, como a ti te gustaría.

— ¿Disculpa?

— Exacto, ella está bajo mi protección.

— ¿De qué demonios hablas?

— La edad te tiene bastante sordo ¿verdad?

— ¡¿Podrías explicar el punto?!

— Te lo he dicho, yo ya no trabajo para ti.

— ¡Eres un asesino!

— Sí, y si vuelvo a matar será para protegerla, nada más. Permiso, señor. — dicho esto, salió, dejando al hombre de máscara y mariposas con las palabras en la boca. Lo había decidido, la protegería, aún en contra de su moral y el instinto asesino en su sangre.

— Hola, prrrinces. — entró por la ventana de su departamento, ella no estaba, sólo había una nota en la mesa y su teléfono. Tomó la nota en sus manos, era su letra y el celular marcaba las últimas llamadas: Nino😃 ¿Nino? ¿Por qué él la...? — se escuchó el cierre de una puerta, un sollozo y una ligera caída. Bajó rápidamente y la vio, llorando en la puerta sin levantar la vista. — ¿Princesa?

— ¿Chat? ¿Qué haces aquí? — se levantó y secó sus lágrimas.

— ¿Qué pasó?

— N-nada.

— Estabas llorando. — se acercó un poco a ella mientras la miraba preocupado.

— Chat, déjame. Quiero estar sola.

— No me iré de aquí hasta que me digas que pasó.

— Vete, gato tonto.

— Dos horas.

— Bien.

Flash Back

Estaba en la cocina, tomando agua mientras revisaba su celular: Llamada entrante: Nino😃

¿Sí? ¿Nino?

Mari, Alya tuvo un accidente.

— ¡¿Qué?!

Estamos en el hospital central. Ven rápido. Los doctores no me dicen nada sobre ella.

Voy en seguida. — cortó la llamada, tomó sus cosas, menos el celular, el cual dejó sobre su escritorio junto a una nota por si Chat Noir iba a buscarla. Subió a su motocicleta sin siquiera saludar a Claude. En menos  5 minutos, ya estaba corriendo por los pasillos de la 2° planta.

—  ¡Lahiffe!

Marinette, que bien que llegaste.

¿Qué le pasó? ¿Está bien?

Romance Asesino [En edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora