Capítulo 19 FINAL.

293 22 8
                                    

Narra Hiroki.

- Tu hermana está viva...

Esas fueron las palabras que me impulsaron a hacer este viaje...
En este momento estoy en el avión, rumbo a Florida, donde mi hermana está... No puedo creer que viví engañado todo este tiempo... Mi princesa... Viva...

Por si se lo preguntan... Estoy viajando solo... Nowaki se quedó en Japón con la bebé y me pidió que le llamara en cuando llegara a Florida.
Falta media hora para llegar, no puedo esperar más...

Al llegar, saqué mi mochila y salí del avión junto a un montón de gente. Lo primero que hice al estar en el aeropuerto, fue llamar a Nowaki.

- ¿Nowaki? ¿Hola?

- Hiro-san, ¿cómo estás? ¿todo salió bien?

- Sí, no te preocupes... ¿Cómo está mi bebé?

- Está bien, pero te extraña mucho, ¿no amor?

Y escuché la risa de mi bebé. Me emocionó mucho escucharla...

- Yo también te extraño, cielo.- le dije a mi pequeña.

- Sólo vas a estar allá tres días, ¿no?

- Sí... Me gustaría estar más tiempo... Con ustedes... Me gustaría que conocieran a mi hermana...

- A mi también...

- Bueno adiós... ¡No olvides mandarme una foto de mi pequeña!

-(risita) Está bien, te quiero, adiós.

- Adiós...

Y colgué. Suspire y después de varias horas de tortura de migración y la inspección de maletas, por fin, pude salir del aeropuerto. Tomé el primer taxi que encontré y le dije la dirección del hotel en el que me iba a quedar.

El hotel era bastante grande y muy bonito. Me fui a la recepción y pedí un cuarto, me dieron la llave del cuarto y me fui (los padres de Hiroki le pagaron el hotel)
Lo primero que hice al estar en mi cuarto fue echarme sobre la cama, que era bastante cómoda. Después me fui a bañar y me puse me pijama ya que era bastante tarde. Saqué mi celular y hablé con Nowaki un buen rato, me mandó fotos de mi niña, todas hermosas, y sonreía al verlas. Apagué mi celular y me eché a dormir.

Al día siguiente...

Me desperté y me levanté de la cama lo más rápido que pude. Me bañe, me vestí, agarré mi celular y mi billetera y salí del cuarto.
No tenía ganas de desayunar, quería ver a Sakura lo antes posible.
Ahora que lo pienso... ¿Qué voy a decirle? No es solamente ir y decir: "Hola, ¿me recuerdas? Soy tu hermano y pensé que estabas muerta"
Tomé un taxi y le dije a la dirección de la casa de Sakura.
En el camino, me la pasaba mirando por la ventana.
El taxi se detuvo y el conductor me dijo que era aquí, le pagué y salí del taxi.
Miré otra vez el papel en el que tenía la dirección. Sí... Es aquí...

Me acerqué a la casa y dudé un poco en tocar el timbre.

- Vamos... -me dije.-... Tú puedes...

Toqué el timbre y mis manos no paraban de temblar. Y la puerta se abrió... Pero... No fue Sakura quien abrió la puerta...

- ¿Si?- preguntó un chico de cabello negro y ojos color gris oscuro.

Hiro-san, Estás Qué!? ( M-preg )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora