Día 1 tras despertar
...
Lovino permaneció en el sitio, estático. Acababa de romperle en pedazos con sólo aquella inocente pregunta.
-¿No me reconoces?- Se rio, nervioso. Debía ser simplemente una broma. Una cruel broma.
-No… - Tosió por el tiempo que había pasado sin hablar-Lo siento. ¿Debería?
Sí. En cualquier momento volvería a sonreírle como antes y le diría "Todo era una broma, Lovi. ¡Claro que me acuerdo! ¿Cómo iba a olvidarme de la persona a la que más quiero en todo el mundo mundial?", para luego recibir un cabezazo y un sonrojo por parte del menor, terminando con un "cállate, idiota". Ese momento no llegó.
Una enfermera llamó a la puerta y entró. Al notar la situación en la que ambos se encontraban, decidió llevarse a Lovino de allí antes de que el hospitalizado pudiera decir algo más.
Le explicó con sutileza que su prometido había sufrido lo que se llamaba Amnesia Orgánica post-traumática, una pérdida de recuerdos debido a un golpe contundente en una zona específica del cerebro. Antonio había bloqueado todos los recuerdos relacionados con las personas que había conocido a lo largo de su vida, además de no recordar lugares que conociera de hacía muchos años. El resto de recuerdos, tales como nombre, domicilio y algún que otro dato sin demasiada importancia (gustos, recuerdos vagos de la infancia…). No estaban seguros al 100% ya que recién se acababa de despertar prácticamente, pero le rogó al italiano ser paciente, ya que era común que el afectado terminara por recuperar su memoria tarde o temprano. Ese dato consiguió alentar un poco al decaído joven.
Otro dato importante a tener en cuenta era la Amnesia anterógrada, un trastorno que impedía recordar eventos ocurridos más allá del propio suerte para Lovino, este problema solía desaparecer al poco tiempo ya que era fruto de los mareos de acabar de despertar.
Después de contarle todo de forma que el menor pudiera entenderle medianamente, le rogó comprensión y paciencia, ya que el joven acababa de despertar. Lo que menos necesitaban era que le causara más lesiones internas.
Lovino cerró la puerta de la habitación, entrando de nuevo en esta. Le dedicó una mirada fugaz al hombre que estaba frente a él, mirándolo con ojos confundidos.
-¿Hola?- Preguntó este, buscando una respuesta.
-¿Cómo te encuentras?- Decidió preguntar.
- Desconcertado… ¿Qué ha pasado?
-Tuviste un accidente.
-¿Quién eres?
-Me llamo Lovino- Vio hacia el suelo y decidió acercarse un poco más a su compañero-. Tú te llamas Antonio. Lo sabes, ¿verdad?
-Sí, claro. Todo está borroso…- Se llevó una mano a la cabeza-. Lo siento. Supongo que debería acordarme de ti.
-Sí. Deberías, pero no te preocupes demasiado por ello. Tus recuerdos volverán.
-¿Era alguien importante para ti?
Lovino se tragó su propio orgullo y asintió, todavía mirando fijamente a las baldosas que pisaba.
-En ese caso estoy seguro de que tú serías alguien importante para mí- Sonrió, algo que el italiano pudo notar simplemente por su tono de voz. Hubo un momento de silencio, mientras el moreno trataba de buscar las palabras que decir-. Perdona. ¿Cómo te llamabas?
-Lovino- Respondió, sin espíritu. Dirigió su mirada hacia el otro, el cual tampoco es que pareciera demasiado alegre en ese momento.
-Es un nombre muy bonito. Yo soy…
-Sí. Ya sé quién eres- El menor sonrió, decaído. Trató por todos los medios de no comenzar a llorar, no en ese momento. Sería fuerte-. Lo sé muy bien.
-¿Qué me ha pasado?
-Tuviste un accidente- Repitió, casi automáticamente. Mirada fija al suelo-. Todo por mi culpa.
-¿Enserio? ¿Qué pasó?
-Fui un descuidado y…- Decidió no seguir. No era el momento. Si seguía así se derrumbaría tarde o temprano- Olvídalo. En un momento ya no recordarás ni mi nombre.
-No creo que realmente fuera tu culpa. No fue intencionado, ¿verdad?
-No, pero…
-Entonces no importa.
Lovino decidió detener la farsa en ese momento y dejar que las lágrimas salieran. Sólo lloró en silencio. No pensaba montar una escena únicamente porque no tuviera tanta fuerza de voluntad como debería. El español se alarmó.
-¡Eh, eh, eh! ¿Qué pasa? ¿Qué ocurre? ¿He dicho algo que te haya molestado?
-No, idiota…- Suspiró, limpiando la última lágrima que se había aventurado a resbalar por su mejilla- Por cierto. Soy Lovino.
-Encantado- Sonrió, notablemente preocupado-. Me llamo Antonio.
...o...o...o...
Aunque lo puse anteriormente, intentaré definir mejor los trastornos. Ojo, que no soy experta ni mucho menos. Todo esto está sacado de internet.Amnesia orgánica: Daño cerebral debido a una dolencia física, como un golpe, una sobredosis... Puede ser retrógrada o anterógrada. No es común en este tipo de dolencias el olvidar la propia identidad (Como se muestra en las películas)
Amnesia anterógrada: Se olvida lo ocurrido tras el accidente, es decir, no se puede recordar nada vivido después. Unas pelis de ejemplo serían "Memento" y "50 primeras citas". Lo de si es temporal o no si viene dada por una orgánica retrógrada, ni idea. (Digamos que sí, para que quede más bonito y menos complicado para la autora)
Amnesia retrógrada: Se olvida algo ocurrido antes del accidente. Dependiendo de la persona, puede olvidar desde unos minutos antes a prácticamente todo.
Ahora definiré el problema de Antonio. Este tiene anmensia post traumática y ha olvidado todo dato autobiográfico (gente conocida, lugares, recuerdos en general) salvo la identidad y "cosas" (Como sería un juguete, su casa...) las cuales conoce desde hace mucho tiempo. La memoria semántica y la de procedimientos no se pierde en estos trastornos, por lo que sabe hablar y las aptitudes y conocimientos adquiridos antes no los ha perdido (Esto ocurre, por ejemplo, en "Todos los días de mi vida")
Nunca se irá uno a dormir sin aprender algo nuevo, ¿verdad? Creo que la nota ha sido más larga que el capítulo en sí... En fin.
Hasta la próxima
ESTÁS LEYENDO
¿Lo recuerdas?
RomansaLa vida de Lovino era simplemente maravillosa. Puede que no tuviera muchos amigos, ni un buen trabajo, pero no podía ser más feliz al lado de su prometido. No obstante, ¿qué pasaría si de un día para el otro esa persona tan especial ni se acordara d...