Inadaptadas

Capitulo IX

-Venga Andrea, ¿verdad o atrevimiento?

-Se que me voy a meter en un lio, pero digo atrevimiento.

-Tienes que escribir una carta de amor, pero de amor amor, y dejarla bajo de la almohada de Daniel.

-¿¡QUE?!-gritó histérica.- Me muero-se encontró al borde de un infarto- ¿No

puedo decir verdad?

-Em... no.-dijeron sus amigas entre risas.

-Podrias empezar con...

<<"Querido y amado Daniel:">>

-Y seguir :

<<"He pensado mucho tiempo en ti, demasiado quizás, por lo que mi amor por ti es demasiado fuerte para callármelo, por ello, te escribo esta carta donde te doy a conocer mis sentimientos.">>  

-Y terminas con:

<<"Con amor A.">>

-Dios....-Andrea no paraba de repetirse eso una y otra vez.

-Si, me gusta.-comentó Alice con sonrisa malévola.

-Si no hay más remedio...-Andrea se apartó a un rincón y empiezó a escribir.

-Uhh... Marina. Estas muy callada.

-No, que va.-susurró Marina.

-Venga, tu turno. ¿Verdad o atrevimiento?

-¿Callada? ¡Volvámonos locas, venga!-exclamó Marina- atrevimiento.

-Tienes que subir a la habitación de tu hermano, cogerle "prestados" unos boxes y ponertelos durante veinte minutos en la cabeza.

-¡Ni loca voy a hacer eso! -protestó Marina-eso es toxico, me quemaría el pelo.

-Te aguntas -le dijo Andrea, ya que estaba igual o peor que ella-lo mío es peor.

-Si, tienes razon.

-Gracias.-le agradeció la chica con una sonrisa torcida.

Marina abandonó la habitación, y unos minutos después apareció con los boxes en la mano.

-¿Estos os parecen bien?-dijo alzando unos de color rosa.

-Perfectos. Te van a juego con el pijama.