Estrellas

95 14 0
                                    

-Jamás me imaginé que salieras con mi hija - dijo mi padre mientras se servía la ensalada.

-Ni yo - susurro él
Me regresé a verlo y le dí un codazo en su brazo.
- Ni yo pensé en lo maravillosa que puede ser Mackenzie - aclaró su garganta.

-¿Y cuánto tiempo llevan? - preguntó mi madre.

-6 meses

-3 meses

Dijimos los dos al mismo tiempo.

-Bueno 6 más 3 son 9 y como nos encanta dividir ¿Verdad cariño? - pellizco mi mejilla tan fuerte que le dí un golpe a su pierna contra la mía.
Y perdió un tanto el equilibrio.

-Si cariño - dije fingiendo mi sonrisa.

-Bueno estaba algo preocupado por rumores que escuché, pero te conozco desde niño sé que eres un buen muchacho. - Asentó mi padre.

¡Que está ciego! ¿Y como lo conoce?

-Perdiste - susurró Miles.

¡maldición!

La siguiente hora papá y Miles se la pasaron hablando mientras mamá los escuchaban tan atenta y con una sonrisa enorme, era raro ya que muy poco vivo estos momentos entre familia y aunque odio admitirlo se sentía confortable.

-Bien es hora de marcharnos - pronunció él.

-¿Marcharnos?

-Si cariño no olvides en que quedamos - me dijo entre dientes.

Papá nos miró - ¿A dónde irán? Es de noche

-A dar una vuelta, ¿Walter usted me podría dar permiso de llevar a su hija? Solo será un momento.

¡No!

-Claro  mi esposa y yo saldremos también y llegaremos tarde ya sabes que confío en ti Miles así que si, dale mis saludos también a tú padre.

-Lena fue un placer conocerla espero volver a verla. - apretó su mano.

-Igualmente y será todo un honor que vuelvas a cenar a casa, entonces no lleguen tarde.

......

-Estás algo sería

No podía esperar más la curiosidad me mataba por tanta preguntas que debía hacerle.

-¿A dónde vamos?  ¿Desde cuándo a acá mi padre y tú se llevan tan bien?
¿De dónde lo conoces? y los más importante ¿Quién eres tú?

-Creo que necesitas respirar.

-No, necesito que me contestes estás preguntas.

-Porque no solo admites que tengo un encanto natural y les agradé a tus padres.

-Porque mi padre detesta a todos los novios que he tenido.

-¿Novios? eso significa que somos novios.

-No, pero claro que no.

-Por eso les agradé porque no somos novios.

-Pero ellos no lo saben y no me cambies la conversación y contéstame todas mis preguntas.

-Está bien lo haré cuando lleguemos.

-¿A dónde vamos?

-A un lugar que quiero enseñarte.

Me siento como en esas películas de terror es un bosque algo tenebroso y no hay nadie a excepción de los chicos que no tienen un lugar para tener sexo y decidieron quedarse ocultos y solo se escucha sus gemidos.

-Es enserio querías traerme aquí ¿Por qué?

-Es mi lugar favorito.

-Tú lugar favorito es el bosque donde cientos de pareja tienen sexo a mitad de la noche.

El comenzó a lanzar carcajadas
-Pues no, aunque si quieres podrías hacerlo tú sabes en la madrugada hacen una competencia para saber quienes gimen más fuerte.

-Idiota ya basta quiero ir a casa

-Tranquila más arriba no se escucha nada ya llegamos.

Subimos por unas escaleras improvisadas sentía que ya me faltaba el aire me dolían los pies de tanto caminar pendiente arriba ya era muy tarde para querer regresar y dar vuelta atrás, entonces nos paramos.

-Ya llegamos - dijo Miles.
Estaba detrás de él y no veía más que las sombras de los árboles pero sabía que la pendiente había acabado.

-¿Es aquí?

Miles se colocó tras de mi, sentía como sus suaves manos tapaban mis ojos no podía ver,  se pusieron en alerta mis demás sentidos sentía la brisa el olor a pino el perfume de Miles y su piel.
Y dimos unos cuantos pasos.

-Lista- me susurró

Entonces lo hizo descubrió mis ojos y lo vi, el más maravilla paisaje las luces de varias casas todo se veía bello.
-Mira arriba - continuó él

Las estrellas jamás se vieron más hermosas tan brillantes con un cielo despejado. Miles jaló de mi, me hizo acostarme en el suelo y así quedamos los dos boca arriba contemplando lo majestuoso que era esto.

-Este es mi lugar favorito desde que era niño  - prosiguió mientras veía fijamente el cielo - un día mis padres pelearon tan fuerte que salí de mi casa en la noche , claramente no se dieron cuenta de mi ausencia - esbozo una sonrisa - Aunque debo admitir que si no hubieran peleado de esa forma jamás hubiera encontrado este lugar. Debo darles crédito.

Lo miré fijamos mientras él recordaba aquel día y regreso a verme.
-Nadie lo conocía, ahora tú formas parte de ese 2% que si.

-No debiste indicarme un lugar tan importante para ti ¿Por qué lo hiciste?

-No lo sé

-Lo aprecio mucho pero.....

Lo pensé Miles Tayler sería la última persona que le enseñaría mi lugar favorito pero para él yo fui la primera.

No quería decir más, necesito más respuestas pero no en este momento, él se ha vuelto un mal necesario para mi.

-Quieres que conteste tus preguntas y lo voy hacer Mackenzie, solo necesitaba algo de paz antes de aclarte algunas cosas -

Fue un momento de debilidad me acerqué hacía él mientras me informaba de la paz que le daba ese lugar así que jale de su chaqueta y lo besé un beso cálido que debió durar dos segundos, no abrímos la boca y ambos nos quedamos estáticos me despegue mirando hacía el horizonte y el bello paisaje.

-Mackenzie White ¿Irías a mi casa?

-Si - asentí.


Mi Acosador FavoritoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora