Mi Acosador Favorito

Salvador

Trato de procesar trato de entender que mi padre tiene responsabilidad en esto y aún así no puedo entenderlo.

-Mi.... mi padre - tartamudeo.

-Mack estarás bien - aprieta mi muslo -Ven te ubico en la habitación que  vas a quedarte.

Suspiro y lo sigo no quiero preguntar más me siento cansada.

El cuarto es pequeño pero prefiero que sea así porque me siento más seguro.

-Si necesitas algo me llamas..... O ya conoces mismo habitación - hace una seña.

Me recuesto y cierro mis ojos tratando de encontrar la paz y dormir pero no puedo siento la opresión en mi pecho y duele, me doy mil vueltas en la cama hasta que me harto aún son las 11 de la noche y necesito calmar esta desesperación.

Oigo la puerta principal cerrarse de un golpazo y me incorporo.

Que no sea nada que no sean los que tirotearon mi casa.

Pero no, es Edmund que sale a toda prisa y desaparece en su auto.

Voy por la cocina y me sirvo un vaso de agua tengo los nervios de punta y necesito tranquilizarme.

-¿Qué haces despierta? - doy un brinco del susto haciéndome tirar al suelo el vaso de agua.

-Miles... - digo con la respiración acelerada - Lo siento quería agua... y.. y.. Se cayó... Voy a limpiar- me agacho pero él me sujeta de las manos lo miro fijamente lleva solo unos pantaloncillos de tela y su torso está completamente desnudo, así debe dormir.

-....lo lo siento -tartamudeo - Es que estoy algo...

-¿Nerviosa? - termina mi frase - Es normal acabas de pasar un mal rato. Yo te cuidaré siempre lo he hecho y siempre lo haré si tú me lo permites claro.

Mi cuerpo tiembla pero no del miedo no, es otra cosa y conozco la muy bien.

-Es que no puedo dormir - suspiro. - Aún estoy algo conmocionada.

-Bien, ven conmigo - agarra mi mano y me lleva a su habitación - Yo vigilaré de ti puedes dormir aquí..... si quieres.

-¿Y tú? ¿Dónde dormirás en el suelo?

-No....aquí en la silla giratoria siempre he querido dormir ahí y será una experiencia nueva - miente.

-No debes hacer esto yo... Iré a la habitación que me dieron y....

-¡Shhh! duerme yo vigilaré tus sueños

Me niego al aceptar eso y menos que duerma ahí tan incómodo, agarro de su brazo y lo obligo a sentarse en la cama.

-Puedes... Dormir a mi lado mmmm claro si quieres - le digo mirando a la pared tratando de no hacer contacto visual.

Miles esboza una pequeña sonrisa y se acuesta a un lado y yo hago lo mismo respeto su espacio así como él hace lo mismo estamos acostados en la misma cama pero al mismo tiempo estamos tan lejos. Nos mantenemos así un largo tiempo mirando al techo muy incómodos.

-Emmmm bien ya ¿Te sientes mejor? - dice algo incómodo.

-Si - asiento.
Claro que me siento mejor pero ahora me siento incómoda.- Tú cama es cómoda.

-Si, lo es - sonríe y me regresa a ver lo siento aunque tenga mi mirada fija al techo.

-Si, lo es.

Su mirada está muy fija en mi y quiero evitar el contacto visual.

-¡Ah no aguanto! - me voltea hacia él y pega sus labios contra los míos al principio va lento pero después empieza a tornarse más fuerte.

Escucho como su corazón empieza a latir fuertemente y siento entre mis piernas los mucho que me desea.

-Se supone que....no podemos hacer esto, ya no somos novios - le digo tratando de sacar mi pequeña parte moralista.

-Desde cuando ese es nuestro estilo - enarca una ceja haciéndome reír a carcajadas y trato de olvidar todo por un momento todo.

-Esto no va a cambiar nada Miles Tayler - aclaro.

-Lo sé Mackenzie White - susurra.

Agarro fuertemente su cabello y lo beso tan fuertemente mientras siento su lengua acariciar la mía con delicadeza, sus menos acarician mismo muslo y despoja toda ropa que evita que me acaricie a piel viva siento mismo cuerpo temblar de mejor sensación de mi vida la que solo he llegado a sentirme así con él, su boca baja hacia mi cuello y pechos entonces abre el cajón, "genial esto hubiera servido la primera vez que estuvimos  juntos". 

Abre el envoltorio y saca el condón muy aprisa se lo pone con desesperación vuelve hacia mí y se coloca encima mío y con mucha suavidad empieza a entrar en mí pero conforme pasa el movimiento y la delicadeza pasa a otro nivel que me hace gimotear y a Miles también muevo mis caderas para sentir aún más fuerte lado sensación una y otra y otra hasta que siento lo que tanto estaba esperando esas cosquillas esos espasmos que hacen sentirme satisfecha.

Coloco mi cabeza en su pecho jadeante mientras escucho su corazón ese sonido que me hace enloquecer.

-Vaya forma de quitarme el nerviosismo. - sonrió mientras trato de cerrar mis ojos.

-La mejor forma - me abraza con fuerza y termino por dormirme.

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Ya no hay mucho que hacer en el instituto solo alumnos de último año que piden puntos extras para poderse gradúar y el olor a desesperación por graduarse, cuando faltaban meses ahora solo faltan días.

Estoy en dirección este año estuve ahí como mil veces por cosas buenas y malas.

El baile de graduación es este viernes y la graduación el sábado.
El director me repite las cosas como miles veces todo debe estar listo todo así que mis compañeros deberán esmerarse con la decoración.

Salgo de ese lugar algo asfixiada ya quiero que acabe este año me dejó marcas y de las peores y me temo que aún falta cosas por venir.

-Mackenzie esperaba toparme contigo. - saluda James.

-Hola.

-Debes contarme sobre tú paseo y lo tú novio bueno ex novio.

Lo miro extrañada - ¿De qué hablas?

-La pelea algo me contaron tus amigas
-¿Qué pelea? - me sorprendió aún más.

-La de Miles y Chad creí que.... Lo siento me metí en donde no debía.

-No está bien- asiento.

-Mack quería saber tú respuesta ya sabes lo de llevarte al baile - suelta

Que demonios no tengo cabeza para eso.

-Pues..... Este sabes tengo que ir a ver a mis padres si luego te escribo- huyó de ahí.

Al llegar a casa puedo ver que ya se cambiaron las ventanas y el auto esta estacionado, es hora.

-Madre - suspiro al llegar al verla ahí sentada en el sillón. -¿Dónde está papá?

-En la cárcel - dice con la voz entre cortada