DRACUL ( IV libro, Serie La Niña Y Los Monstruos)

¿QUE ESTOY HACIENDO?

Dracul se controló lo mejor que pudo al sentir al vampiro pasar detrás de él. El demonio no recordaba haberse puesto jamás a sí mismo en una posición tan vulnerable.  Que estúpido he sido, ¿que estoy haciendo? se dijo. Nunca había bajado la guardia como lo había hecho desde que estaba cerca de esos niños. El vampiro se podía haber lanzado contra su cuello y recién en ese momento él hubiera reaccionado.

Se dijo que tenía que asesinarlo inmediatamente, no lo había visto nunca antes, por lo que debía ser amigo de los que él había asesinado. Era claro que volvería a su clan y les hablaría de él. El vampiro no sabía mucho, pero lo poco que sabía, le debía haber dejado claro que no era humano, pero sí muy peligroso.

Se puso de pie para ir tras él y los niños se pararon también, les dijo que lo esperaran allí pero ellos no quisieron. Para su disgusto los niños estaban decididos a estar a su lado sin importar nada. No le quedo más que aceptarlo, ya borraría sus mentes si es que ellos llegaban a ver algo que no debieran.

Al ir saliendo del restorán se toparon con clara, la amable muchacha que los había saludado, a su lado estaba su odiosa y desagradable madre, las dos también estaban saliendo del lugar. La mujer miro con mala cara a los niños y le dio un empujón a Harek al pasar por su lado, clara llamo la atención de su madre y se ganó un fuerte y grosero regaño por haberse atrevido a levantarle la voz.

Dracul que ya estaba bastante contrariado, y apenas aguantaba la rabia que sentía, se enojó aún más con la desagradable actitud de la mujer, no solo con su hija, sino también con Harek y con ellos. Su corazón estaba lleno de odio y maldad, su hija por otro lado era todo lo contrario, solo había bondad e inocencia en ella.

_"Clara"

La llamo Dracul y se paró frente a la muchacha dándole la espalda a la desagradable mujer. Acto seguido tomó una de sus manos y la llevo a sus labios para darle un casto beso.

_"A sido todo un gusto conocerla, y un honor que una dama tan elegante y bella como usted se haya acercado a nosotros a saludarnos. Espero que tengas un buen día, adiós hermosa y dulce Clara. Le guiño un ojo y le sonrió.

Después de esto soltó su mano y se marchó sin haber mirado en ningún momento a la madre de la muchacha. Sus amigos se fueron tras él enseguida, y le decían lo horrorizada y furiosa que estaba la mujer por lo que había hecho. Sin embargo la muchacha había quedado en las nubes por su caballeroso gesto y sus palabras. Se había sonrojado nada más que Demian pronunciara su nombre.

_"Sabes que podemos tener problemas... cierto? Pregunto Harek

_"Eso no me interesa" contesto Dracul

Y así era, estaba más preocupado del vampiro que de unos cuantos humanos escandalizados por una estupidez. Había perdido valiosos minutos por estar hablando con las dos humanas.

Que me pueden importar a mí, esas humanas se dijo para sí mismo, pero le habían importado. Que me importan estos mocosos que me siguen como si yo fuera alguien importante para ellos, se dijo esta vez, pero le importaban, pues seguía al lado de ellos y se había preocupado lo suficiente como para comprarles comida y que tuvieran ropa decente. Se tragó un rugido de rabia y preocupación, pues no le gustaba como se estaban dando las cosas. Esto no me está gustando para nada pensó Dracul, Mientras caminaba con paso decido siguiendo el rastro del vampiro.

El rastro lo llevaba directo al puerto. Por alguna razón a Dracul no le gustaba pensar en agua en grandes cantidades, no tenía idea si tenía que ver con su pasado como humano, humana en su caso, aun no estaba seguro. O a algo que tuviera relación con su estado demoniaco. Lo cierto era, que le aterraba el solo pensar en estar rodeado de toda esa agua.

Al llegar al puerto vieron varias embarcaciones alejándose, Dracul se concentró en el vampiro y este iba en la embarcación que estaba más lejos del puerto.

Lo podía alcanzar pero era pleno día y había demasiados humanos dando vueltas por el lugar. Sin contar con los muchachos que estaban pegados a su lado mirando embobados todo lo que había a su alrededor. Era la primera vez veían tanta agua y las embarcaciones.

Después de mirar en todas direcciones y considerar sus opciones, opto por lo que le pareció lo más sensato y fácil de explicar para los humanos. Gracias a sus sobrenaturales habilidades, podía ver al vampiro sobre la cubierta del barco mirándolo directamente a él, Sonreía de manera burlesca en señal de triunfo, se sentía seguro en el lugar donde estaba. Dracul correspondió a su sonrisa y la cara del vampiro cambio completamente.

Dracul Concentró al máximo sus poderes y fijo su atención en el barco y en el vampiro. En solo unos segundos se oyó un gran estruendo, y el barco exploto lanzando pedazos por los aires a todos lados. Incluso alcanzo a otras embarcaciones que estaban a unos cientos de metros.

La conmoción fue inmediata.

Los gritos de la gente y sirenas de los otros navíos no se hicieron esperar. De un momento a otro el caos era total en el puerto.

Inmediatamente varias embarcaciones se empezaron a acercar al lugar en busca de algún sobreviviente.

Dracul sabía que no había ningún sobreviviente, se había asegurado que así fuera. El vampiro había sido el primero en morir. Sus amigos quedaron horrorizados con la explosión, pero ninguno se dio cuenta que el delgado y demacrado muchacho a su lado había sido el responsable. Los muchachos se quedaron en el lugar que estaban y observaban todo lo que ocurría. Estuvieron allí durante un par de horas, viendo cómo iba llegando más y más gente al lugar, además de las autoridades y varios familiares de las víctimas. Por suerte no eran tantos los que viajaban en el barco, eran más que nada tripulación.

El vampiro había pagado una gran cantidad de dinero para ser sacado de allí inmediatamente, y sin que se hicieran preguntas según comentaban las autoridades portuarias, por lo tanto no había registro de quien era él o a donde se dirigía, las autoridades no sabían absolutamente nada.

Dracul sonrió ante esto, pues los humanos podían hacer mil suposiciones y ninguna sería la correcta, por otra parte, había sido bastante astuto el vampiro al salir corriendo en vez de enfrentarlo, lamentablemente no le había servido de nada. Nadie tenía la menor idea del alcance de sus poderes. Miro a su alrededor y no pudo evitar preguntarse qué harían los humanos si él dejara en ese momento su apariencia humana y volvía a su forma demoniaca. Probablemente todos creerían que satanás había salido del infierno y venía por ellos. El caos sería aún peor que el que estaban presenciando.

Un grito llamo la atención de los niños y vieron a Clara llorando desconsolada corriendo en dirección al muelle, su madre iba unos metros tras ella abrazada a una mujer mucho mayor. Una vez que la muchacha llego a la orilla del agua empezó a llamar a su padre.

_"Su padre estaba en el barco que exploto" dijo uno de los niños.

Dracul por primera vez supo lo que era el remordimiento, miraba a clara llorar desconsoladamente y miraba los restos de lo que había sido el barco, hasta ese momento Dracul jamás se había arrepentido de algo que había hecho. Su corazón latía muy rápido, quería acercarse a ella y pedirle perdón, quería consolarla y prometerle que todo estaría bien.

Esto está mal se dijo Dracul, debo salir de aquí ahora mismo.

El demonio se horrorizo de sus pensamientos. Se estremeció de solo pensar en volver a atarse a una promesa. Se dijo que no volvería a dejar que nadie se creyera con el derecho a hacer con su vida lo que quisiera. Ya fuera vampiro o un humano. No permitiría que nadie lo volviera a controlar, ya bastante daño le habían hecho en el pasado. No recordaba del todo su antigua vida, pero sabía que tanto los vampiros como algunos humanos habían estado inmiscuidos en su vida, y tenían gran culpa de todo lo que le había pasado, estaba seguro que de una u otra manera todos ellos lo habían empujado a convertirse en el ser maldito que ahora era.

_"Nos  vamos  le  dijo  a  los  muchachos"  y  se  fue   de  aquel  lugar.

Se  dijo  que  llevaría  los  niños  de  vuelta  al  orfanato,  asesinaría  a  los  cuidadores  y  se aseguraría  de  dejar  en  su  lugar  a  buenas  personas,  después  seguiría  su  camino.