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Le daba vueltas una y otra vez al lápiz que tenía en el escritorio. El abogado aún no llegaba y JinHan parecía estar bastante ansioso. Mire el reloj y solamente tenía unas horas antes de irme a Corea en el vuelo que ya había programado.

Jiyeon me había enviado algunos mensajes diciendo que debía hablar conmigo y que ya se encontraba en la casa pero ayer por la noche recogí alguna de mi ropa y me reivindiqué en un Hotel cercano a la capital.

—Le llamaré si así lo quiere—decía JinHan tomando su teléfono celular. Levante una mano indicándole que no se molestara y me levante de mi asiento.

—Despídelo, primero hablaré con Jiyeon y luego contrataremos uno nuevo. Cualquier persona que llegue tarde a un compromiso no vale la pena.

Tome mi billetera y mi celular y los guarde en mi bolsa. JinHan aún seguía mirándome con algo de confusión.

—No te preocupes. Pero preferiría que tú no hablaras con ella hasta saber que es lo que en verdad desea hacer.

JinHan asintió y yo en verdad me sentía como una basura al hacerlo pasar por todo esto. Extendí mi mano hacia el y la estrechó, abrí la puerta de la oficina y camine hasta los ascensores quienes me llevaron hasta el estacionamiento.

Al llegar allí me llevé una sorpresa. Jinyoung estaba recostado a mi auto mirando hacia la nada, cuando se percató de mi presencia dejo de estar recostado.

—¿Que haces en mi empresa?—le pregunte cruzándome de brazos mientras que el se acercaba un poco a mi.

—Mira. Sé que tú y yo no nos llevamos bien, y también se que jamás lo haremos pero, no creo que ella se merezca ser tratada así.

—¿Y qué hay de mi?—pregunte sonando sarcástico—Ella tampoco pensó en mi en ningún momento, creo que eres el menos indicado para decir eso.

—La lleve a tu casa ayer por la noche. No deberías ir a ese viaje, solo empeorará las cosas.

—¿Como demonios sabes que me iré?—pregunte acercándome a el.

—Te escuche hablando con tu secretario en el hospital. Mira, Yixing se que estás muy enfadado pero SoYeon te necesita.

Intente mantener la compostura al escuchar el nombre de mi hija. Trague un poco de saliva y le quite la alarma al auto, eso hizo que Jinyoung se sobresaltara.

—Tu no sabes nada de mi. Mucho menos intentes adueñarte de mi hija. Pelearé por ella.

—Se que pelearas por ella, el abogado al que contrataste trabaja para mí.

Me detuve mientras caminaba hacia mi auto, me voltee a mirarlo.

—Así que esa era la razón de no presentarse esta mañana.

—No todo en la vida es justo—comentó aún mirándome—Pero si quieres llevar esto tan lejos debo advertirte que pelearé con ella. Y la apoyaré en todo.

Abrí la puerta del auto aún sin dejar de mirarle y una risa salió de mi boca. Me puse el cinturón de seguridad y salí de volado hasta el Hotel en el que me estaba hospedando.

Las horas pasaban y yo no podía dejar de pensar en mi pequeña. En lo difícil que iba a ser mi vida si decidía irme para siempre y no pelear por ella. Quizá y si las cosas con Soori hubiesen funcionado mi vida sería mucho más fácil.

Incluso ya lo había planeado todo, no estaríamos casados ya que sabía que no era una de sus metas en la vida. Pero quizás ya estaríamos viviendo juntos y yo seguiría dirigiendo la empresa de papá, claramente viajaría de China a Corea y al revés cada cierto tiempo pero sé que a ella no le molestaría.

Linger » Yixing » BP #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora