Era sábado por la mañana y me desperté con el sol brillante que bañaba mi cara. Mantuve mis ojos cerrados hasta que se acostumbraron a la luz. Retiré las mantas y me levanté buscando mi teléfono. Removí las sábanas con ansiedad buscándolo. Miré debajo de la cama, en la mesita de noche, en el baño y no pude encontrarlo. Di pasos hacia atrás y hacia delante, intentando recordar los hechos de la noche anterior, hasta que recordé su última localización. Lo tenía en mi mano antes de irme a la cama.
Miré de nuevo a mi cama y fui hacia allá, lentamente levanté la almohada y encontré mi teléfono.
Volví a tumbarme revisando mis redes sociales. ¿Qué hacer con mi vida?
Dejé caer el teléfono a un costado y me quedé mirando el techo blanco detrás de las aspas de mi ventilador.
Brandy
Brandy Brandy Brandy Brandy Brandy
El pelo largo y marrón de Brandy, sus ojos marrones y relucientes, esa sonrisa perfecta, sus descarados pechos, el olor de su perfume afrutado, el sabor de sus carnosos labios rosados, la sensación de sus manos por todo mi cuerpo, el sonido de sus gemidos resonando en mis oídos; todo acerca de ella rondaba mi cabeza.
¿Por qué no puedo dejar de pensar en esta mujer? Cualquier cosa que venga de ella me hace quererla más. Si no la tenía esta noche tendría que encontrar otra forma de complacerme a mí mismo, y todos sabemos que tuve que hacer eso ayer.
He de recordar mis límites, una a la semana.
La necesitaba montando mi polla, en este instante.
Me levanté de un salto, corriendo hacia el baño para tomar una ducha. Fue rápida, menos de diez minutos. Me puse una chaqueta gris con una camiseta blanca debajo y unos jeans azules. Rápidamente encontré mis llaves y me dirigí hacia el coche. Mientras trataba de salir del edificio me topé un chico.
- Lo siento -dijo.
Después de recorrer los cinco pasos que me llevaban a la acera, el chico dijo:
- Hey, ¿tú sabes si Linda vive aquí?
- Sí, vive aquí, pero está fuera de la ciudad debido a una urgencia familiar -dije.
- Está bien, gracias -dijo él.
Sonreí traviesamente para mí, antes de andar por la acera hasta mi coche. Lo desbloqueé, lo encendí y puse la radio.
Tarareé una canción mientras conducía hasta la casa de Brandy. Llegué al antiguo edificio rojo y encontré un sitio donde aparcar al otro lado de la calle. Me bajé y bloqueé el coche mientras corría hacia la otra acera. Casualmente, alguien salía del edificio así que entré sin llamar.
Subí hasta su piso y, mientras me acercaba a su puerta, escuché música. Música explosiva. Toqué su puerta, pero la música estaba tan alta que probablemente no lo escuchó. Giré el pomo de la puerta y para mi sorpresa, estaba abierto. Abrí la puerta mirando hacia el interior.
Brandy estaba bailando en medio del salón. Pero no cualquier tipo de baile. Su pelo estaba recogido en una cola de caballo. Llevaba puesta ropa interior de cintura alta junto con un sujetador y tacones negros. Sus ojos estaban cubiertos por una máscara negra.
Me acerqué mirando como se deslizaba alrededor de una barra plateada que estaba en medio del salón. Bajó al suelo, sentándose y dándose la vuelta para quedar a cuatro patas. Sacudió su pelo, gateando alrededor del poste antes de agarrarlo y volver a elevarse. Volvió a bajar y dobló su cuerpo hasta que su cabeza casi tocó la parte trasera de su muslo. Podía oír su tenue voz cantando: "I can't feel my face when I'm with you. But I love it".
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Insane → j.b → spanish version
FanfictionEn la que un psicópata se enamora de una bailarina de barra. --- Esta historia no nos pertenece, sólo la traducimos con el permiso de su autora, @cummccann. Todos los créditos van a su persona.