Capítulo 7

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Mi amiga me mira con los ojos como platos.

-¿Enserio?- Me dice cuando le termino de contar lo que me pasó ayer. Estamos pintando las pancartas de la fiesta de esta noche. Asiento mientras mojo el pincel en el color azul.- A mi no me pasan esas cosas...- Hace pucheros con la cara.

-Yo prefiero que no me pasen. Con lo tranquila que estaba.- Nathan aparece y se sienta al lado nuestra a pintar.

-Nena, te recojo a las siete.- Dice clavando sus ojos verdes en mi.

-Ok Nath.

-Que sosa eres...- Dejo lo que estaba haciendo y lo miro.

-Sabes que soy así.- Me hace burlas con la cara y así pasamos las horas de clase. Stef no había venido hoy y Sophie estaba preocupada por si la iba a dejar tirada.

Termino de lisar mi pelo y me doy cuenta que me llega casi por el trasero.- Uf, madre mía y encima tengo bastante cantidad...- Que agobio. Ya me lo cortaré. Me pongo la cinta blanca, me delineo los ojos, aplico algo de rubor en mis mejillas y algo de brillo en mis labios. Un poco de máscara de pestañas y estoy lista. Son las seis y media, aún queda media hora. Mi padre se fue al hospital. No le dio tiempo a verme pero me haré una foto.

-Zaphiro, vente con mami.- Digo mientras me siento en la cama y mi gato se acomoda en mi regazo. Me pasé acariciando a Zaphiro hasta que mi timbre sonó. Cojo mis cosas y me voy a abrir la puerta.

-Que hermosa eres Sel.

-Tú también eres hermosa Nati.- Le saco la lengua a mi amigo y éste se queja.- Estás muy guapo.- Veo que se sonroja. LLeva unos vaqueros rotos y una camisa abierta. Menudos abdominales.

Justo en la entrada nos esperan Sophie, Stefan, Ariana y Jake, un compañero de clase. Stefan viste una cazadora negra y unos vaqueros desgastados, Ari lleva un mono de colores y la ropa de Jake es parecida a la de Nathan. Stef me mira y frunce el ceño. Luego mira a otro lado. ¿Qué le ocurre?

Realmente parece que estamos en esas épocas. Hay una bola de discoteca en el techo del gimnasio. Música antigua, bailes antiguos. Muy Sophie y yo. Nathan y yo estamos bailando en la pista. Nos compenetramos muy bien. Algunos comentan que somos más que amigos pero no es cierto. Stefan aparece y nos detenemos.

-¿Puedo robarte a Selena?- Nath me apretaba más contra él. Después me mira.

-Como ella quiera.- Yo le sonrío y cogo la mano que Stef me tiende.

-Ahora vuelvo Nath.- Al parecer a mi amigo no le gustó nada lo que hice, pero como negarle un baile a Stefan Salvatore. Stefan me acerca a él rodeando su brazo en mi cintura. En ese momento una canción lenta suena. Que puntería.

-Hola Stef.- Digo mirando esos ojos azules.

-Hola, Sel.

-¿Y Sophie?

-Se puso a bailar como una loca y le dije que eso no era lo mío. Entonces me dijo que te sacara a bailar.- Levanto una ceja.

-¿Tú también te acercas a mi porque me parezco a Elena?- Me atreví a preguntar. Stefan se detiene y me mira serio. Coge mi mano y me saca fuera del recinto. Hace algo de frío fuera. Stef se percata de que tengo frío y me pone su cazadora en mis hombros. Sus dedos tocan mis hombros desnudos y me estremezco.- Gracias.- Él me mira y se mete las manos en los bolsillos.

-Al principio sí.- Dice.- Ya tuvimos algunos incidentes a causa de eso en el pasado. Al principio creía que eras otra replica Petrova. Pero una vez que te vi más de cerca comprobé que no.- No estoy entendiendo nada. Solo me limito a mirarlo.- Damon se encabezonó con que eras Elena. Pero es evidente que no eres ella. Elena dejó bien marcadas nuestras vidas y ahora que no está en ellas, todo se esfumó.

In My BloodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora