Capitulo final
—¡Joder!— decía mientras trataba de llegar al hospital.
Acaba de llegar de una misión, acaba de entregar su equipo de armas, cuando escucho su celular sonar pero no alcanzo la llamada. Tenía 15 llamadas perdidas de sus hijos y su madre; iba a regresarles la llamada cuando vio que era Ryōki —¿Qué pasa hijo?.... ¿Qué?... En 5 minutos estoy allí. — Salió corriendo y gritando como loco que su bebé nacería.
Se estaciono y entro corriendo al hospital —Señorita. Miesposoloacabandeingresares AomineRyō— dijo a gritos pero no se le entendió nada.
—Tranquilícese— dijo con miedo. Pues Aomine Daiki aparte de lo acelerado que estaba. Traía el uniforme especial e imponía miedo. Las personas se comenzaron a alejar.
—Daiki. Estas asustándola— dijo Akashi Seijūrō entrando con su esposo.
—¡Sólo quiero saber dónde está Ryō!
Seijūrō negó —Es el esposo de Aomine Ryō. Entro en labor de parto— dijo calmado.
—¡El de los gemelos! ¡Por aquí!— indico una enfermera y se llevó al peli azul.
—Se ve bastante alterado.
—Es normal, Kōki. Es la primera vez que experimenta ser padre.
—Ya lo es.
—Me refiero a verlo nacer...
—Mejor busquemos a los gemelos.
————————
Nervioso, siguió a la enfermera e hizo lo que le pidió y entro al quirófano. Nana lo vio y sonrió; besó la frente de su hijo y salió del quirófano.
—Ryō— le tomo de la mano.
—Qué bueno que llegaste— dijo sonriendo. O al menos eso intento.
—Tranquilo. Estoy aquí— dijo sonriendo.
—Vamos a comenzar— indico Shintarō para que todos se prepararan —Era hora de que llegaras, Ahomine.
—Cállate, cuatro ojos.
—Tranquilo, Daiki— susurró Ryō.
—Mejor guarda silencio, Aomine— acotó Shintarō y comenzó la cesárea.
Ryō noto el miedo en los ojos de su esposo y no pudo evitar sonreír —Tranquilo... Todo estará bien.
Asintió y acaricio con su pulgar los nudillos de Ryō. Tenía miedo. A pesar de tener a Ryōdai y Ryōki, no tuvo la oportunidad de verlos nacer, y esta vez era diferente.
Cuando Shintarō le soltó que Ryō estaba embarazado lloro como bebé. Ya había perdido las esperanzas de ser padre nuevamente y más con lo que le había hecho Inari... Pero quién diría que esa loca, amiga de Ryō, al atacar sus genitales le haría posible que el conteo de espermas aumentara, al igual que su calidad y duración suficiente para embarazar a Ryō. Ese día, sin importarle que fuesen las dos de la mañana en Estados Unidos, llamo a la pelinegra y le agradeció la tortura.
Después de la noticia siguieron con la boda. Pero él comenzó hacerse análisis con Shintarō para ver como seguía su Daikicito como le gustaba llamarlo últimamente, y todo iba bien. No está totalmente curado pero al menos más tranquilo al saber que había progresado considerablemente.—Succión— gritó Shintarō llamando su atención.
Observó al peliverde y vio cómo extraía a su bebé. Grandes lágrimas surcaron sus mejillas al verlo.
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¿Realmente fue un error?
FanfictionPara un castaño que pudo tener la noche más perfecta de su vida, para un peli azul fue un ERROR. Ryō se marcha de Japón, huyendo, a donde esperaba ser feliz y reconstruir su corazón con un hermoso milagro. Daiki reacciona muy tarde a su error y pier...