CAPÍTULO 9. EL COMPROMISO.

17 2 4
                                    

(ASI ES COMO ME IMAGINO A LILIANA, MAS O MENOS Y con el cabello mas cobrizo.)

La noche no es clara gracias a la luna menguante que rige sobre el cielo, blanca y serena, las estrellas brillan expectantes  mientas que una que otra nube gris surca lentamente el cielo casi despejado, se oye el murmullo del río a un lado que destella ligeramente con la plateada luz de la luna mientras uno que otro grillo anunciaba su presencia al rededor de la pareja.

Ella ama  con locura a aquel hombre del que se aferra abrazando su cuello con los ojos cerrados que derraman incontables lágrimas, se que se siente aliviada de verle, confiada en sus brazos y angustiada pero yo no se porque.

— Te amo, no me importa nada mas, huye conmigo por favor. — le suplica ella .

Y entonces  se separa un poco para ver al hombre a la cara y puedo ver el de ella.

¡¡¡ La muchacha soy yo!!!!

Que hago yo ahí con ese desconocido cuyo rostro no veo bien.

El chico volvió a abrazarla o abrazarme con fuerza. Podía sentir su cariño y el debate interno que él sentía,  a pesar de solo estar observando.

Entonces algo la  atravesó profundamente mientras él la estrechaba en sus brazos haciéndome sentir un intenso dolor.

Dio un doloroso grito y desperté gritando a pleno pulmón.

Me siento sobre mi cama. Mi almohada y rostro se encuentran empapados en lágrimas, Me toco el costado  y se doy cuenta que el dolor menguaba rápidamente.

Enciendo la vela a lado de la cama y compruebo que no hay sangre en la cama ni en mi bata, camino al espejo, levanto mi bata hasta las costillas y observo que  no tengo ninguna herida ni siquiera un moretón. Estoy intacta y ya ni siquiera hay rastro del dolor.

Solo ha sido un sueño, pero fue tan real, tan vivo.

Los colores, los sonidos,los aromas del bosque, la sensación del fuerte cuerpo que me abrazaba y el intenso dolor experimentado en mi costado.

Yo se muy bien que cuando tengo sueños tan vivos son generalmente cosas que han sucedido o que están por suceder.

Pero yo nunca me e enamorado ni citado con nadie a media noche en el bosque.

Solo se puede tratar de dos posibilidades, o era un muy mal sueño o es algo que esta por suceder.

Sin embargo, yo jamás por muy enamorada que estuviera le rogaría a un hombre huir conmigo ni iría a una cita a media noche en el bosque como una simple cualquiera solo para arrojarme a los brazos de alguien.

Así que eso solo me deja la opción de que fue un sueño de muy mal gusto causado por la inquietud de los acontecimientos de ayer.

Con el corazón aun acelerado me acuesto en la cama y ya protegida por mis cobijas intento conciliar el sueño.

Intento e intento, pero no logró dormir, me siento aún perturbada por el sueño  e inquieta por la incertidumbre de lo que pasó ayer.

Cuando llego el príncipe Faraji, el segundo en la linea de sucesión al trono de Astoren no fue especialmente amable como la mayoría de los embajadores, sino mas bien fue serio y cortante al límite de la descortesía.

Podía no ser el príncipe heredero,pero sin duda era el rey de los prepotentes.

Sus ojos celestes eran fríos y calculadores,en cuanto los vi sentí escalofríos, no sabía a que venía pero sin duda no era a nada bueno.

Me saludo por obligación como a Lili y yo le devolví una tensa reverencia.

Después de esto entramos y él rey le ofreció descansar, sin embargo el no aceptó ser llevado a sus aposentos hasta después de tener una reunión privada con él. Mi tío acepto y ordeno a mi padre y el capitán del ejército acompañarlos.

LA DAMA Y LA ESPADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora