"Recordándote Una Vez Más"

Cap. 2 "Amor en silencio"

TokiOto Cap. 2 "Amor en silencio"

-Ittoki: ¿Ya acabaste de lavar los platos?

-Tokiya: S-Sí, y perdón por empapar te de agua

-Ittoki: Jaja no te preocupes, después de todo yo lo comencé

-Tokiya: Fue muy divertido

-Ittoki: Si jeje me alegra que seas mi mejor amigo

-Tokiya: ¿Sabes? Tú eres la primera persona que se ha vuelto muy cercana a mí

-Ittoki: ¿Eh? ¿Enserio? –Preguntó incrédulamente-

-Tokiya: Sí, generalmente no permito que nadie sea así de cercano, excepto a ti

-Ittoki: T-Tokiya -Se sonrojó por lo que escuchó-

-Tokiya: Tengo que ir a practicar una canción. Nos vemos luego Otoya

-Ittoki: Sí, cuida te

Tokiya Solamente le dio una sonrisa sincera y se fue yendo a su ensayo dejando al menor bastante sonrojado por sus palabras.

-Ittoki: "¿Por qué me das la esperanza de que seremos algo, Tokiya?"

Mientras el guitarrista seguía con sus pensamientos; el otro caminaba hacia afuera junto al árbol en el que ellos dos se hablaron por primera vez como amigos.

Se sentó en el tronco para poder ver como los pétalos de cerezo caían, una hermosa atmósfera se hizo presente, bastante tranquila y hermosa siendo presenciada por aquel peliazul, justo cuando extendió su mano una pequeña flor cayó en ella, acarició lentamente sus pétalos con una sonrisa en su rostro.

-Tokiya: Se parece mucho a ti mi Otoya, siempre alegre a pesar de todo, aunque la flor ya no esté en las ramas de ese árbol sigue siendo igual de linda, buscando protección para quien la atrape, cautivando con su gran belleza a los ojos de quien la vea, sintiendo esa suavidad inexplicable al tacto, mientras uno lo trata tan delicadamente; aquella que con el más mínimo toque pareciera que se destruyera como un cristal.

Mi lindo Otoya me es tan difícil querer dejar de sentir esto por ti, no es como si de un día para otro vuelva a ser un insensible y cruel contigo. Me has cambiado, y eso no lo dudo ya que muchos dicen que los ojos reflejan el alma y el corazón que uno tiene, supongo que se dieron cuenta de la manera en la mis ojos se fijan solamente en tu presencia, pero me pregunto si los tuyos serán cálidos y muy brillantes ¿no crees?

Incluso he deseado que tus sonrisas sean sólo para mí. Cada vez que te veo con otra persona regalándole tu felicidad me hace sentir enojado, frustrado, que incluso me duele saber que mi amor por ti nunca será correspondido. Pero distintos deseos me invaden, no negaré que quisiera probar esos labios que tú tienes, saber si son dulces y suaves como en mis sueños. Al fin poder sentir la delicadeza de tu piel, incluso escuchar que de tu boca salga un "te amo"...Otoya

Ichinose estaba perdido en sus pensamientos que no se dio cuenta que de su boca salieron dichas palabras, aquellas frases que había estado escondiendo dentro de su corazón, aún no se quitaba ese peso que tenía encima; sin embargo, si quería lograrlo tenía que confesarse, pero si lo hacía corría el riesgo de perderlo y él no lo soportaría.

-Jinguji: Vaya~ ¿entonces es Ikki?

-Tokiya: Jinguji ¿q-qué haces aquí? No deberías estar con Hijirikawa-san