Debemos Empezar De Nuevo.

Capítulo 19:

Llegamos a casa, _____ no quería ni bajar del auto, la tuve que cargar, en cuanto abrí la puerta principal, los chicos se abalanzaron contra nosotros haciéndonos caer.

Se le veía feliz en los brazos de cada uno, extrañaba verla sonreír de esa forma; ayudamos a subir sus maletas, ella comenzó a temblar, ya sabía la razón del que se pusiera así.

Tomé su brazo y la guíe lentamente hacía la habitación de nuestra pequeña hija, conforme más nos acercábamos, los pasos de ______ eran más y más torpes.

-Tranquila, todo estará bien, no tienes porque estar nerviosa.
-No sé Oliver, sólo tengo miedo... ¿Y si ya no me recuerda?, ¿y si ya olvido quién es su madre? -suspiró con tristeza.

Tomé su mentón e hice que me viera a la cara.

-Deja atrás esos pensamientos, ella te ama, todas las noches antes de hacerla dormir le hablo de ti, le enseño nuestras fotografías, seguro que recuerda a quien le dio la vida, anda, vamos los dos -sonreí.

Abrí lentamente la puerta, Ashley estaba sentada sobre su cama, mientras jugaba con sus muñecas y veía sus caricaturas favoritas, "Los padrinos mágicos".

______ en cuanto la vio, se deshizo de mi agarre y corrió hacía ella, Ashley solamente comenzó a reír tiernamente, se miraban tan lindas juntas, abrazadas, tal y como lo había soñado anteriormente. Comencé a llorar de alegría, _____ lloraba tan intenso pero ni eso podía borrar la felicidad que le causaba tener de nuevo a su niña en brazos.

Le dije que se quedara con ella en lo que yo iría a preparar la cena, bueno, más bien iría a decirle  a los chicos que fueran a comprar algo para comer, no sabía como administrar su medicamento, pensaba en hablar con ella y contarle que debía tomarlos, por orden de su psicóloga o desboronar las pastillas sobre su comida o bebida.

Sólo por hoy no se las daría, suficiente tuvo con el que le inyectaron hace horas.

Todo parecía un sueño, y si es que lo era, espero no despertar, por fin tengo a mis dos princesas conmigo... Cuando por fin ______ acabe con esto, le pienso proponerle mudarnos, comprar un nuevo hogar y por fin, unirnos en matrimonio.

Pasó una semana, las dos cada vez se veían mejor, _____ era muy atenta con Ashley y nunca la dejaba sola, es más, hasta la sobre protegía.
Llegó el día que teníamos que ir de gira por un mes, todos estábamos preocupado por como reaccionaría _____ pero les propuse a los chicos invitarla a ir con nosotros...

-¿Y entonces? -dije emocionado.
-No lo sé Oliver, aún no me recupero del todo -suspiró.
-¿Por qué?, ¿te has sentido mal?, ¿que sucede? -conteste preocupado.
-No, no es eso, me refiero al cansancio físico, en lo mental estoy bien, no hay de que preocuparse -sonrió.
-Entiendo -susurre.
-Oli -tomó mi cara entre sus manos- no lo tomes a mal, pero prefiero quedarme en casa, con mis padres y pasar más tiempo con mi hija, cuando crea que es necesario salir con gusto aceptaré ir.
-No te preocupes hermosa -sonreí- lo entiendo, bueno, te dejo, iré a hacer las maletas.
-Suerte -sonrió.

Salí y los chicos estaban en el pasillo.
-¿Qué pasó? -preguntó Matt N.
-Si ya lo sabes, ¿para qué preguntas?
-Oye -gritó- yo no estaba...
-Todos estaban -dije serio.
-Lo sentimos -susurraron.
-Viejas chismosas -bajé riendo.

Antes de que salieramos, subí a despedirme de _____ y Ash.
Abracé por un largo tiempo a mi hija mientras lloraba, no la quería dejar sola, estaba tan acostumbrado a verla todos los días, sentir sus pequeños bracitos rodear mi cuello, cuando se sube en mi estómago para dormir, sería el mes más largo de mi vida.
______ sólo me dio un gran abrazo.

Por último dejé las indicaciones a los padres de _____ para que la vigilarán y cada cuando debe tomar sus pastillas, ir con la psicóloga e informar sobre lo que pasa.

También que si notaban algo raro me llamarán inmediatamente, no es que desconfiara de ella, pero, ya fueron dos veces (de las que yo me enteré) que le hizo daño y no quiero que vuelva a suceder. Ashley es mi todo.