One Shots Chardre

3 Copas de Alcohol

1ra Copa

   Leo dormía profundamente, tan cómodo y tan feliz por estar en su cama suavecita. Pero claro, uno nunca duerme bien completamente.

   El teléfono sonó a las tres de la madrugada y, Leo teniendo una idea de qué trataba, se levantó y respondió cansado.

-¿Dónde?

-Club Longman. Y Leo? Vení rápido, esta vez se pasó.

   Cerró los ojos, suspiró cortando el teléfono y se empezó a cambiar. Era la cuarta vez en dos semanas que pasaba lo mismo.

   Tomó un taxi hacia el club más famoso de la ciudad. No le gustaba bailar ni tomar ni nada. Era un chico tranquilo, pero lastimosamente su mejor amigo no. Cuando llegó, los hombres en la puerta lo reconocieron y le dejaron entrar. Se adentró en un pasillo que llevaba a la sala VIP, donde se encontraba una barra propia, baños y una pista. Entonces lo vió, acostado sobre la barra y una mujer encima de él toqueteándolo todo.

   La bartender fue hasta Leo -¡Leo, que bueno que... Leo?

   Pero Leondre ya no la escuchaba. El enojo le subía a la cabeza y ya no pensaba. Solo le atinó a ir hasta Charlie y tirar a la zorra que antes estaba ahí. Lo arrastró del cuello de su camisa y se lo llevó del club hasta el taxi.

-Noooo~ me estaba diviertendoo liioo- le hacía pucheros

   Leo solo lo ignoró.

***

2da Copa

   Charlie dormía plácidamente en una cama, no estaba seguro si era la suya, pero era una cama a fin de cuentas. Su ropa olía a alcohol, así que se imaginó qué estuvo haciendo la noche anterior. Pero si no era su cama... entonces...

   Charlie se sentó en la cama de repente para admirar el cuarto, pero un dolor increíble le atacó la cabeza, obligandolo a volver a acostarse. No pudo ver mucho, pero con lo poco que vió, reconoció el cuarto de su mejor amigo.

-Leeoo- trato de gritar Charlie. - ¡Leooooo!

-¿Qué querés Lenehan?- entró Leo a la pieza.

-¿Lenehan? Nunca me llamás Lenehan, solo cuando... Oh.

-Si, oh. Estoy enojado. Es la cuarta vez Charlie, la cuarta.

-Heey no grites...

-Ahh ¿te duele la cabeza?

-Si...

-Que mal que no te duelan los chupones en tu cuello o tu labio cortado ¿no?

-Oh no, ¿qué hice?

-Estoy cansado Charlie, cansado. Solo... andate cuando te sientas mejor. Y no esperes que la próxima te busque.

-Leo...- cortado por el sonido de la puerta -¿Aspirinas no tenés?

***

3ra Copa

   Eran las diez de la noche y Leo se iba a dormir; ya había terminado un rap nuevo y sus tareas, así que estaba bien.

   Pero cuando estaba por ponerse en la cama, sonó el teléfono. Miró la hora extrañado, pensado que las llamadas son después de las 2am normalmente.

   Fue hasta el teléfono y respondió.

-¿Hola?

-¡Leo, tenés que venir, Charlie, él...

-¿¡Ya?! Pero si son las 10 apenas.

-Lo sé, pero...

-A ver, ¿dónde esta vez? ¿En el club de nuevo?

-No, esta vez es en centro de skaters.

-Está... ¿bien?

  Sin más que decir, cortó el teléfono aun más confundido... Se vistió y tomó otro taxi.

   Al llegar al lugar, lo vio vacío y oscuro. Fue como si de una broma se tratare.

   Entró por la puerta frontal y se encontró con un camino de petalos y velas que lo llevaron a una rampa en U. En ella había una mesa y dos sillas. La mesa estaba tapada por un mantel y dos platos de comida. Solo se podía ver el brillar de las velas. Con todo apagado, lo único para guiarte eran estas.

   Escuchó un carraspeo detrás de la rampa, y de ahí salió Charlie todo arreglado.

-Hola Leo, sentate por favor- dijo con una sonrisa que se le pegó al menor.

   Se dirigió a la mesa y se sentó en la silla al frente de Charlie. Éste hizo lo mismo, y empezó a hablar.

-Lamento todo lo que pasó en estos días, no volverá a pasar. No solo me hago daño a mi, sino que también a vos. ¿Aceptás mis disculpas?

Leo la pensó bien. Bastante. Es decir; la disculpa fue más o menos... Al final, siquiera necesitó que Leo le dijera lo que pensaba, porque sabía que era un "si" esa sonrisa suya.

***
Waaaa no pude entrar a mi cuenta de wattpad jajaja te despistada. Por eso no actualizé el domingo :v me quería morir. Pero pude entrar al fin gracias al consejo de Iarahuffi (TKM)