One Shots Chardre

¿Seguro es mesero?

Eran las 8 de la mañana y en una hora mas Leo debía ir a la universidad. Se encontraba donde siempre; sentado al lado del ventanal, mesa 6. y como siempre, esperaría a que llegara el empleado de las 8, un chico dos años mas grande, rubio de ojos celestes, alto y gracioso, llamado Charlie.

Tenía algo con él, no se, le gustaba verlo de lejos, que él le trajera su comida, y le gustaba que lo trate con familiaridad, osea, ir todos los días a la misma hora, pedir siempre lo mismo y encima sobornar al dueño del local para que Charlie solo lo atienda a él en esa hora que se quedaba, debería estar acostumbrado a verlo.

Pero era raro, el chico lindo no aparecía. Leo había ido a la misma hora de siempre, y Charlie no estaba. Eso no estaba bien. Así que se levanto y fue al mostrador a preguntar por él, pero no sabían nada. Charlie no avisó que faltaba. Entonces preguntó su dirección y con gusto se la dieron.

Subió a su auto y se dirigió a la casa de esa persona. No sabía que al llegar se encontraría con eso. Un hotel siete estrellas altísimo. Al entrar toda persona lo miró con desprecio por la ropa que utilizaba. Solo llevaba unos jeans rotos y un buzo negro grande, tampoco lucía tan mal. Así que se tragó todos los insultos que iba a utilizar en su defensa y caminó para la administración. Se dió cuenta que hasta las recepcionistas elegantemente vestidas lo miraban mal, pero le restó importancia y preguntó.

-¿Aquí vive alguna persona llamada Charlie Lenehan?

Además de responderle, una tomó un teléfono y se fue, dejándolo con la otra, quien lo miraba sorprendida y disgustada. Leo no entendía por qué, pero bueno. Cuando la chica al fin volvió, le preguntó su nombre, y sin ganas se lo dio. Ella, allí mismo, le dijo a la persona del otro lado del teléfono el nombre y luego cortó. Se dirigió a Leo-

-El señor Lenehan te espera. Vaya por el ascensor, último piso, que tenga buenas tardes.- dijo sin ganas.

Leo sin seguir entendiendo subió por el ascensor hasta el último piso como le dijeron y se dio cuenta tarde... Su Charlie vivía en el penthouse del hotel. Tenía que salir rápido antes de que...

-¿Leo?

Mierda... ¿Tan rápido va el ascensor?

-jaja, ja, hola Charlie...

-¿Qué haces acá? ¿No deberías estar en la universidad?

-¿Eh?- Leo miró su reloj y, sip, definitivamente debía estar en la universidad, pero no importaba ya. -Si, eh, yo, quería saber por qué faltaste al trabajo, digo, me pareció extraño que no estuvieras. No sabían donde estabas y, bueno, eso.

Supongo que a Charlie le dio risa, ya que se rió.

-¿Te preocupaste por mi Devries, así como para venir hasta mi apartamento?

La sangre le subió hasta que llegó a la cabeza. Tenía razón. Había dejado su comida y su café, había faltado sin querer a la universidad, y además fue a buscarlo hasta su casa. ¿Tan obvio era?

Volvió a reír y se fue acercando a Leo mientras este buscaba una excusa para irse y morirse luego de eso. Se acercó hasta estar al frente de él, puso sus dos manos detrás de la nuca del contrario y sonrió.

-Solo estaba con un poco de dolor de cabeza, y sinceramente no me quería salir de la cama.

-Y... estás mejor?

Charlie inclinó su cabeza hacia la de Leo y dijo. -Ahora lo estoy. ¿Y te digo algo? Yo le dije al dueño que aceptara el soborno- y lo besó, cortando totalmente la distancia entre ellos.

***

Alguien mas se lo imagino con bata al Charles? xDD