¡Después de mucho tiempo, una actualización! ¡La universidad me ha estado matando! ¡mil disculpas! pero de algún modo me alegra que a pesar de no actualizar muy seguido, aun siguen votando por mi historia ¡muchas gracias!
Saben...nunca me gustaron los fanfics (al menos escribirlos) siento que en algún momento pierdo la identidad de los personajes, me pregunto "¿esto suena como si Kuroo lo dijera?" o "¿Tsukki diría algo así?" y así se me pasa el tiempo...Si en algún momento llego a alterar la personalidad de los personajes, ¡avísenme! y me daré una cachetada por la profanasión, bueno no tanto...pero, si lo pensare
Una ultima aclaración, el texto escrito con esto: "«»", son pensamientos, los que están en negrita, son de Kuroo, y los normales son de Tsukki. Y lo escrito en cursiva son flashbacks. ¿se entendió? Creo que no resta nada más que decir.
¡Leed y disfrutad!
~***~
«A veces pienso en que me equivoque de vida, siento como si no debería estar aquí. No puedo quitarme esta continua ansiedad. Continuando el día a día en solitario, por alguna razón tengo el presentimiento de que alguien debería estar a mi lado, es un vago sentimiento pero se que esta soledad debería ser llenada con esa persona, pero ahora mismo en lugar de "esa persona" estoy atorado con una persona molesta que por alguna razón no me deja en paz»
-Entrena conmigo
-No gracias- respondió el rubio sin tardar
-No fue una pregunta
-No eres quien para darme ordenes
Kuroo parecía que no querer insistirle y alargar más la pelea pero por alguna razón no quería dejar marchar al rubio.
-Entonces quédate conmigo
-Ya he dicho que...
-Solo quiero compañía, es todo.
«¿compañía ...?»
Tsukishima soltó un suspiro y entrando al gimnasio se sentó al lado de la puerta.
-Serán solo cinco minutos
-Es suficiente
«No será suficiente»
Una a una las pelotas salían despedidas de la mano de Kuroo, el menor en total silencio miraba casi hipnotizado cada movimiento que Kuroo hacía , aunque quizás al otro le incomodaba el silencio no podía articular palabra alguna, por ello solo se mantenía continuamente entrenando mientras era observado por la penetrante mirada de Tsukishima. Ninguno se atrevía a pronunciar algo, uno por la culpa de quizás forzar al otro a algo de lo que quizás le molestaba, aunque desde siempre se salía con la suya en todos sus propósitos, no había fallado al mantener a Kenma en el equipo.
Pero con Tsukishima era diferente, al inicio fue gracioso fastidiarlo continuamente, pero lo de unirlo al equipo fue bastante espontáneo, insistirle fue más bien un impulso por haber sido rechazado anteriormente pero ¿fue un mero capricho insistir hasta forzarle a entrar al equipo como mánager? había llegado a tal extremo de no lograr concentrarse en el entrenamiento y ahora ...¿ese mero capricho también le hizo invitarlo a entrenar?
En primer lugar ¿Que sentía Tsukishima? estaba claro que tanto fastidio quizás le creara rencor contra Kuroo pero respecto al volley ¿odiaba tanto el deporte al punto de no querer jugarlo o simplemente odiaba a la escuela? No podría ser odio ¿verdad?. Sino no miraría tan concentradamente la pelota que con agilidad Kuroo hacia mover de un lado a otro.
«¿Por que?»
-¿Será acaso que paso algo por lo cual no puedes jugar?- pregunto Kuroo sin notar que había formulado la pregunta en voz alta.
El rubio parpadeo un par de veces, pensando en la pregunta tan espontánea que salio de los labios del pelinegro. Este bajo la mirada, abrió los labios para decir algo, pero en seguida los cerro.
-Nada que te interese- respondió secamente.
-Yo tenía un amigo que no gustaba particularmente del volley, pero jamás lo abandono.
-No intentes compararme con las demás personas, yo tengo mis propios motivos
-No trato de compararte, es solo que...
-¿Qué? - repitió el de lentes al ver que el otro no terminaba la oración
Kuroo alboroto su cabello con pesar, algo en Tsukishima le hacia extrañamente decir y hacer cosas complicadas que involucran discusiones- y no de las divertidas-.
-¡Eres tan complicado!- grito ya casi harto
-¿Yo? hablo la persona que hostiga a alguien a quien apenas conoce, se mete en la vida privada de los demás ¿por que lo haces? ¿acaso tu vida es tan aburrida que no encuentras más diversión que molestar a los demás?
-¡No soy así con los demás!
-Kuroo-san, creo que los cinco minutos terminaron- musito poniéndose de pie para dejar el lugar y dar por terminada la conversación
-¡Tsukki! ¡Entrena conmigo!
-¡Ya dije que no lo haré!
-¡Solo por un momento!
-¡Te dije que no quiero!
-¡Vamos, sera divertido! ¡Jugar al volleyball juntos sera divertido!
"-¡Jugar al volleyball juntos sera divertido Tsukki!"
-¡Ya te dije por millonésima vez que no lo haré! ¡no quiero jugar el mismo deporte en el que él falló! ¡Cállate de una vez Yamaguchi! - grito desesperado.
Tras procesar lo que acababa de decir, Tsukishima apretó los puños y sin mirar al pelinegro a los ojos dio pasos hacia atrás, saliendo a toda prisa del gimnasio dejando al mayor sin palabras.
Toda la energía que parecía mantener de pie a Kuroo desapareció casi en su totalidad, dejándolo caer al suelo totalmente agotado.
-Con que...Yamaguchi- hablo para si mismo
Kuroo miro hacia la puerta por la cual un Tsukishima furioso y apenado acababa de salir, se podía divisar a lo lejos el ardiente atardecer
«Quizás me este entrometiendo demasiado, pero por alguna razón, no puedo parar con esto. Y sea cual sea la razón por la cual ese rubio testarudo se niega a jugar, algo me dice que ese tal Yamaguchi lo sabrá»
~***~
¡Ah! al fin lo escribí, llevaba semanas con esto a medias y de algún modo tomo este rumbo.
¿Que habrá pasado con Tsukki y el pecoso? descúbranlo en el siguiente ca...bueno ya.
Espero hayan encontrado ligeramente interesante el capitulo, aunque todo se fue en las divagaciones de Kuroo.
Especiales agradecimientos a @MonicaMinero quien siempre me ayuda con la ortografía, en esta y en mis demás historias, y a saber si lo que escribo es basura o no :D ¡Muchas gracias querida!
...En fin
¡Gracias por leer! ¡Nos leemos en el siguiente capitulo!
Atte. TWW
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Path Of Destiny
RomanceLa vida no es siempre fácil ni sencilla, nos pone obstáculos para caer una y otra vez, pero no importa que tan lejos o cuanto tiempo tome, cuando dos personas están destinadas a conocerse sin importar los diferentes caminos que lleven siempre estos...