Path Of Destiny

Día 3 - Parte II - Tormenta

Pequeño recordatorio.. Las letras en "cursiva" son flashbacks, sucesos que sucedieron antes... Para evitar confusiones jeje

Sin más preámbulos...¡Leed y disfrutad!

~***~

El aire fresco le golpeaba directamente su rostro quien caminaba con notable desesperación. El caminar se transformo en un trote, con el anuncio de que las ennegrecidas nubes se acercaban cada vez más el trote cambio a una carrera.

***

Rememorando, al principio el día se veía totalmente despejado, con una ligera brisa fuerte pero no era impedimento para salir al aire libre. O era lo que parecía, a lo lejos un cúmulo de negras nubes parecían acercarse. Pero para el príncipe pelinegro quien no tenía en sus planes "salir de castillo" ese hecho no podría importarle menos.

Pero aún así esas antinaturales nubes que parecían haber brotado de la nada le intrigaban en exceso. Se encontró a sí mismo contemplándolas durante un prolongado tiempo a través del cristal de una ventana.

-¡Oh! -exclamó alguien con la mayor admiración fingida que Kuroo había escuchado en su vida.

-¿Qué sucede Osamu?- preguntó el otro zorro con igual desinterés.

-Mira esas nubes.- respondió el primero señalando con su dedo a las nubes que ahora parecían más cercanas.

-Nubes de lluvia, por lo visto se avecina una tormenta.

-No podría importar menos...- se quejó Kuroo en sus pensamientos

-¡Oh! pero...¿Acaso no es terrible? Su alteza Tsukishima ha salido y no parece que regresé pronto.

Esas palabras le hicieron abrir un poco más los ojos, una cierta angustia le invadió.

-No, el debió llevar a algún sirviente.- pensó de nuevo en sus adentros para calmarse.

-¿Acaso no ha ido por su cuenta? - habló Atsumu.

-Espero no le ocurra nada malo...- dijo Osamu con fingida preocupación.

Kuroo alzó su mirada, encontrándose sin demora con la de los gemelos.

-Oh, su alteza Kuroo, perdone nuestro balbuceo, no le habíamos visto aquí.- Se disculpó el castaño haciendo una reverencia.

El pelinegro negó con su rostro a modo de darle a entender que no le molesto su "conversación".

Kuroo giró su rostro para mirar hesitante el cielo que ahora estaba parcialmente nublado.

-Si se encuentra tan preocupado por su seguridad, ¿Por que simplemente no va?- lanzó sin vacilar Atsumu.

Parpadeo perplejo y mordiendo ligeramente sus labios en acto de duda, miro nuevamente las ventanas para luego regresar su mirada a los gemelos quienes lo miraban atentamente. Lo miraban como si sus acciones fueran la cosa más ridícula, parecían juzgarlo en silencio, entender y interpretar sus dudas.

-Si no se va ahora mismo, la tormenta comenzará y buscarle será más difícil.- Agregó Osamu ante la falta de impulso del pelinegro.

Tragándose su orgullo, sus prejuicios, creencias y muchas cosas más. Sus piernas comenzaron a andar y una vez éstas comenzaron a moverse, no hubo nada que las frenaran. Con el par de días en los que había estado ahí había podido conocer las rutas básicas a los lugares, así que no tardo mucho en verse en la salida y al inicio de su búsqueda.