Capítulo 24.

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-¿Mudarnos?-grite sin poder creer lo que mi madre me estaba diciendo.

         Mis padres decidieron que querían pasar más tiempo juntos, en familia ya que ahora mi padre estaba trabajando en Estados Unidos, con la edición de The X Factor de allá.

         Yo tenía la esperanza de terminar el colegio con mis mejores amigos, como siempre soñamos, pero ahora ya veía aquello muy lejos.  Mi madre trato de convencerme de que en Estados Unidos podría tener una mejor formación académica, en la universidad y que tenía más opciones, aunque eso fuera lo que menos me importara.

-¿es en cerio?- dijo Jazmín, con tono triste mientras me miraban empacar mis cosas, sentados en la cama.

-¿Por qué estaría empacando si no fuera cierto?-le dije mirándola y dejando de empacar por un rato. Me senté junto con ellos.

-porque te vas de vacaciones-dijo Frankie y los otros tres lo apoyaron con un movimiento de cabeza. Resople cansada y triste.

-bueno, no me voy de vacaciones.- les dije algo molesta. –Creo que todo va a ser distinto ahora.

-¿Qué va a pasar con Niall?-pregunto Jenny. Iba a contestar, pero antes de que lo hiciera, Max hablo.

-Solo tú preguntas estas cosas, Jenny.-

         La verdad es que sabia como irían las cosas. Yo me iría a Estados Unidos, ellos seguirían aquí trabajando, tal vez tendrían suerte y llegarían al Nuevo Continente y se hicieran más famosos, pero para aquel momento todo habría cambiado y todos habríamos crecido.

-nada. No va a pasar nada.

         Cerré la valija y la baje de mi cama con una sola mano, mientras hablaba por teléfono con los chicos. Les había avisado sobre mi mudanza y me llamaron inmediatamente.

-es por el trabajo de mi padre. Estamos muy separados últimamente y queremos pasar más tiempo en familia- les comente cuando ellos me preguntaron porque. Esa era la razón, aunque yo no quería dejar Inglaterra.

-te vamos a extrañar muchísimo, pequeña Cowell. –dijo Liam y yo solo me pude morder el labio y contener las lágrimas. Por suerte Zayn hablo y no se noto mi silencio.

-te queremos mucho y te deseamos lo mejor.-

-yo a ustedes, chicos. Tienen una gran carrera por delante. Disfruten. –Le conteste- pero acuérdense que siempre voy a ser la Directioner numero uno.

         Con los chicos habíamos tenido que pensar en distintas formas para vernos luego de que los fotógrafos nos sacaran fotos casi dos meses atrás. Los chicos generalmente venían a casa o yo a su apartamento alquilado, aunque siempre tenía que entrar con muchísimo cuidado y tratando de pasar desapercibida.

         La gente se había calmado luego de que los chicos dijeran que solamente era una amiga de ellos, que uno de Liam conocía de antes de entrar al programa, y además, de que dejara de aparecer fotos mías con ellos.

         Las clases ya habían terminado, y por eso es que mis padres habían decidido que nos mudáramos a Estado Unidos y así yo poder empezar mi último año de secundaria en aquel país. Eso me ponía algo nerviosa, ya que no tendría a mis amigos a mi lado ni conocería a nadie allí.

         Nos quedamos un rato mas hablando y deseándonos suerte. Yo sabía que les iría bien, y que lograrían mucho.

-¿pueden cantarme la canción que eligieron como single?-les pedí, poniendo voz de niña chiquita. Me habían dicho como se llamaba pero no sabía cómo era.

-¿le cantamos, chicos?-pregunto Louis- Conéctate al Skype y la cantamos.

         Prendí mi laptop y entré al Skype, ya estaba muy ansiosa por escucharlos y cuando vi a Niall con una guitarra en sus manos me emocione.

-¿Estás lista?- pregunto Louis

-Si

         Niall comenzó a tocar la guitarra y luego de algunos acordes, Liam comenzó a cantar. La canción era movida y muy pegadiza, con un ritmo extremadamente contagioso y juvenil. Los representaba muy bien a ellos. En cuanto terminaron los aplaudí. Me había encantado.

-tenemos que juntarnos antes de que te vayas y cantarla contigo. –dijo Liam. Yo sonreí.

-claro.-dije emocionada.

         El día había llegado. Me tenía que ir. Ya me había despedido de todos mis amigos y de los chicos, con quienes disfrute muchísimo cantando su canción “What Makes You Beautiful” y me habían cantando dos canciones más: Stole My Heart y I Wish, las cuales eran de las que tenían grabadas.

         Les había pedido a todos, tanto a Jazmín, Jenny, Max y Frankie y demás amigos del colegio, como a los chicos que no quería que fueran al aeropuerto porque me harían sentir peor. No quería despedidas allí, quería irme sin tener que separarme del abrazo de nadie, sin tener que mirarlos a la cara y decirles “adiós” porque sabía que me dolería más de lo que ya me duele.

         No sabía que me esperaba. No sabía con que iba a encontrarme en Estados Unidos. Muchos dicen que allí son bastante más exigentes en cuanto a lo físico y estético que en Inglaterra, a pesar de que acá lo son. Tengo suerte de que me guste la moda y pienso que tengo buen gusto. ¿Esperaba hacer buenos amigos? Tal vez si, aunque no estaba segura de si podría hacer amigos de verdad en solamente un año de instituto. No sabía si allí jugaban mi deporte favorito, ni tampoco sabía mucho de cómo funcionaba allí la estructura de la educación.

         Me esperaban muchas cosas nuevas, aunque estaba segura que The X Factor seria mi salvación aquel año en el instituto.

          Ya sin mi valija en las manos y haciéndome una trenza en el cabello, la voz de una mujer sonó por los altavoces, avisando que los pasajeros de mi vuelo debían comenzar a abordar. Nosotros, obviamente, íbamos en primera clase, por lo que no teníamos tanto apuro en correr. En cuanto termine de hacerme la trenza mi madre hizo un gesto con la cabeza y se levanto del sillón. La imité y colgué mi bolso de mano en mi hombro derecho.

         Seguimos a la multitud que iba hacia el mismo destino que nosotras: Los Ángeles, California, EEUU.

         Ya en el avión y antes de que prendiera el motor, les envié un mensaje de texto a todos mis amigos, incluyendo a los chicos, despidiéndome de ellos y deseándole suerte en sus proyectos a venir. Les dije que los esperaba ver pronto y que los extrañaría, que haría lo posible por ir a verlos en las fiestas o para mi cumpleaños, tal vez.

         Luego de enviarlo, espere unos minutos, mientras el avión se iba llenando de gente y no tenia porque apagar mi celular aún. Este comenzó a sonar: un mensaje de texto. Alguien me había contestado y  me sorprendió un poco ver quién era, porque una parte de mi esperaba que fuera o Jazmín o Jenny.

         Era Niall.

“Yo también te extrañare, pequeña Cowell. Fuiste, eres y serás una pieza muy importante en nuestro puzle y no sabemos cómo agradecértelo. Personalmente, para mi eres una gran amiga, a la cual adoro. Espero que tengas un buen viaje y que disfrutes mucho de tu familia, de Estados Unidos y de todo lo que te espera por allá. Con cariño, Niall”

The Secret [Niall Horan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora