Y el sábado llego, y con él, el partido y la fiesta. Yo me encontraba haciendo ejercicios para calentar mi cuerpo antes del partido. Mis padres nunca fueron a estos, simplemente porque la gente sabía quienes eran y ellos no querían la atención en ellos sino en mí. Alguna gente puede decir que son malos padres por no apoyar a su hija pero para mí son los mejores y los amo muchísimo.
Me mire en el espejo. Me asegure que mi pelo estuviera bien atado y tirante, cosa que no me molestara. Mire mi vestuario, asegurándome de que todo estuviera en su lugar y listo para dar lo mejor de mí, para ganar esta competencia y ser la mejor jugadora de Hándbol del colegio y de la competencia, también. Tenía que hacerlo, debía hacerlo, necesitaba hacerlo. Lo necesitaba hacer por mí misma, por mi equipo, por mi escuela y por mi familia y amigos. Yo quería que todos ellos estuvieran orgullosos de mí.
-______- escuche a alguien llamándome así que me di vuelta y me encontré con mi entrenadora. – ¿Estas lista?- yo simplemente asentí con un movimiento de cabeza mientras sonreía. Estaba lista para hacer lo mejor y mostrarles a todos lo que puedo hacer.
El partido termino. Nosotros ganamos gracias a que una de mis compañeras y yo anotáramos dos veces cada una un gol. Estábamos realmente felices. Esa era mi meta del año y lo logre. Recuerdo el primer día de clases, hablando con mis mejores amigos sobre nuestras metas para el año en el almuerzo, cosa que solíamos hacer cada año desde que éramos pequeños.
-voy a ganar la competencia de hándbol. Sé que este año podemos hacerlo y estoy lista para eso- dije sonriendo mientras Max se reía de mi, simplemente porque el amaba molestarme- lo digo en serio.- dije.
- ¡LO HICISTE!- escuche una voz detrás de mí. Voltee y vi a mis cuatro mejores amigos sonriéndome y con sus brazos abiertos listos para un abrazo de oso.- ¡sabíamos que podías hacerlo! –dijo Jazmín.
-Max no. – dije mirándolo. El rio por lo bajo y puso uno de sus brazos alrededor de mis hombros- ¡aléjate, niño estúpido! – dije, sacando su brazo de mis hombros y haciéndome la ofendida.
-¡ay dale! ¡No seas así! ¡Sabes que estaba jodiendo! Era OBVIO que iban a ganar.- dijo el tratando de abrazarme otra vez.
- bueno… está bien, te creo. – dije y lo abrace.
-así que… ¿vamos a ir a la fiesta de noche?- dijo Jenny. Ella amaba las fiestas, el bailar hasta que te duelan los pies, no importaba que pensaran los demás. En realidad, cuando estábamos en una fiesta, Jazmín, Jenny y yo éramos así, bailábamos como si no hubiera un mañana, aunque Jenny era la que mas amaba estas cosas. Yo sonreí y asentí. Estaba tan feliz, tenía que celebrarlo de alguna manera y que mejor que con mis amigos en una gran fiesta, ¿no?
El partido fue en la mañana así que cuando llegue a casa me bañe, almorcé y luego tuve toda la tarde libre para hacer lo que quisiera. Estaba algo cansada e iría a una fiesta esa noche así que después de elegir el conjunto perfecto para la fiesta, me senté en mi cama y prendí mi computadora.
La semana siguiente estaría viajando a Sídney, donde mis padres tenían una enorme casa, para ayudar a mi padre a elegir a los concursantes. El me había dicho que ese año estaría siendo el mentor de los grupos. No estaba muy conforme con esto ya que un grupo nunca había ganado The X Factor antes y eso era obviamente por algo.
Comencé a mirar las audiciones de los grupos que habían pasado a la casa de los jueces. Dos de ellos fueron formados en el bootcamp: One Direction y Belle Amie. Cada integrante de cada banda había audicionado por separado, como artistas solistas pero en el bootcamp sus audiciones no fueron lo suficientemente buenas para pasar a la casa de los jueces solos, pero no podían dejarlos ir, eran muy buenos, así que los juntaron en dos grupos. Mire todas sus audiciones, pero uno de ellos capto toda mi atención. Niall Horan.
Su audición había sido demasiado dulce y el era muy divertido, confiado, amistoso y muy muy muy adorable. Era irlandés, y su acento era increíble. Definitivamente tenía un flechazo con él, era como un amor platónico para mí, a pesar de no ser famoso. El había cantado “so sick” de Ne-yo, canción que adoro. Oh dios, realmente quería conocer a este chico en la casa de los jueces pero la única manera en que podía conocerlo era si One Direction, la banda en la que él estaba, pasaba a los Live Shows.
Quiero olvidar esa noche con todas mis fuerzas. No sé porque ni cómo pero me emborrache. No recuerdo NADA pero mis amigos me dijeron que estaba gritando “¡NIALL HORAN ES MIO!” por todas partes y todo el tiempo. Una chica me dijo que él era su novio, obviamente para molestarme, y yo trate de pegarle en la cara pero, por suerte, Jazmín y Jenny estaban ahí conmigo y me pararon. Creo que aprendí mi lección, no voy a volver a tomar alcohol.
Ese día viajaría a Australia, y por suerte mis padres no se enteraron nunca de lo que paso esa noche de sábado en la fiesta. Si se enteraban, no me dejarían ayudar a mi padre este año y eso no estaba en mis planes.
Me senté en mi asiento en el avión y mire por la ventana. Vi a mi madre saludándome con su mano. Le devolví el gesto aunque sabía que no podía verme. Sonríe y respire hondo. Estaba nerviosa, cosa que nunca me había pasado antes, pero este año era diferente y yo sabía porque. Niall Horan no había salido de mi cabeza desde aquel día en que vi su audición. Estaba todo el tiempo pensando en él, y no podía dejar de hacerlo, era imposible. Y en ese momento, viajando a Sídney, estaba realmente nerviosa. Quería que él y toda su banda lograra pasar a los live shows, así podría conocerlo y ser amigos aunque yo quisiera algo más que una amistad con él.
Me puse mis auriculares y me relaje escuchando algo de música, como Rihanna, Taylor Swift y Adele. Mire por la ventana nuevamente. La siguiente cosa que recuerdo es despertarme y seguir aun en el avión.
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The Secret [Niall Horan]
Fiksi PenggemarLa hija de Simon Cowell: _______ Cowell. Nadie sabía de ella porque su padre quería que tuviera una vida normal y fuera a la escuela como una chica normal. Todo iba genial hasta que conoció a Niall Horan en The X Factor. ______ siempre ayudaba a su...