MALFOY MANERIUM

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Capítulo XXI


MALFOY  MANOR



La primera noche de mi regreso a Malfoy Manor, fue reconfortante volver a lugar que ahora sentía mi casa es una sensación que no podría explicar porque sé que allá a fuera habrá muchas personas que me estén juzgando en este momento por haber regresado a la casa con mi agresor, pero también sé que hay muchas otras en especial mujeres que saben lo que es estar en mis zapatos tener la responsabilidad de mantener unida a tu familia.

Aun creo que la decisión que tome fue la correcta, no obstante, las cosas cambiaran pues también soy consciente de que muchos de mis comportamientos sin inaceptables pues no soy la sumisa de mi esposo, soy su esposa y como tal me tendrá que tratar, sé que será un proceso demasiado largo para poder realizarlo con éxito y que me encontrare con trabas más tengo confianza en que todo saldrá bien.

Ya por la mañana volví a tomar mi rutina nuevamente, al levantarme fui por mi pequeño que aún estaba dormido, aproveché esto para bañarme y alistarme para mi día, una vez me encontré lista fui a por mi hijo quien ya estaba despertando y de muy buen humor pues había dormido lo suficiente.

-       ¡Buen día mi amor! – le dije a mi hijo que abría sus ojos.

-       Hola mami – respondió él.

-       Es hora de despertar – mi pequeño solo sonrió y me estiro sus brazos – que rico dormiste ¿verdad dragoncito?

Cuando ambos estábamos listos comenzamos a bajar las escaleras en dirección al comedor donde me supongo la familia estaba reunida, aunque por mi regreso me estoy esperando que los que se encuentran reunidos en el comedor son los Mortifagos. Antes de poder ingresar a comedor fuimos retenidos por mi esposo.

-       Buen día, mis amores – nos saludó, quitando de mis brazos a Scorpius.

-       Buenos días, cariño – le respondí dándole un beso en la mejilla.

-       ¿Cómo durmieron? – pregunto.

-       Bien papá, ¿Puedo ir con mi abuelita? – pregunto Scorpius a su padre.

-       Está bien campeón, anda ve – le respondió mientras lo ponía en suelo para que pudiera ir con Narcisa.

-       ¿Cómo dormiste, hermosa? – me pregunto con una sonrisa.

-       Muy bien, aunque no me dejaste dormir por tus ronquidos – le respondí.

-       Lo siento cariño, pero hace mucho no podía dormir tan bien.

Nos acercamos hasta el punto en que quedé recargada en la pared, Draco comenzó liderando el beso que poco a poco comencé a acapararlo yo, tomando la iniciativa, hasta que nos vimos interrumpidos por el grito de Astoria.

-       ¿Qué haces mi draquito?, ¡A quien estas besando que, obviamente no soy yo! - Draco se volteo para verla, no sé si con incomodidad o con enojo.

-       ¿Qué quieres Astoria? - pregunta irritado.

-       ¿Qué hace está de nuevo aquí? – pregunto irritada.

-       Te recuerdo, que es la madre de mi hijo, de quien estas refiriéndote – respondió.

-       ¡Yo te daría más hijos! –  nos gritó, mientras comenzaba a llorar por el enojo.

-       Con tu cara de puta, pobres bebes – juro que intente detenme, pero no pude hacerlo, es una de cal por las que fueron de arena.

-       ¿Qué has dicho zorra?

POR SIEMPRE A TU LADO - DRACO MALFOYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora