POR SIEMPRE A TU LADO - DRACO MALFOY

HISTORIA SCELERUM

Capítulo XIII

ANTECEDENTES DE CULPA

- Vallamos a un bar – les pedí a los chicos.

- Si, será mejor que vallamos así Draco despeja su mente – apoyo la noción Theodore.

- Está bien – accedió Blaise, sé muy bien que está molesto, pero al carajo es mi amigo o tal vez él es el amante de _____, esa Zorra y este mal amigo. - ¿Por qué tan molesto eh? – le pregunto a Zabini.

- Porque eres un idiota, mejor vallamos antes de que te muela la cara a golpes – me amenazo.

- ¿Por qué me golpearías? – le pregunte, levantándome y encararlo.

- Tranquilos mejor vayámonos – nos separó Theodore.

Todos caminamos a la chimenea de mi casa y nos fuimos por la red flu en dirección al primer bar que encontramos, donde no se hicieron esperar los tragos, ronda tras ronda, pensando una y otra vez en lo que hice, hasta que se comenzaron a mover los chicos de un lado hacia otro o puede ser que yo sea el mareado.

- ¿Creen que me equivoque? – les pregunte a los chicos.

- La verdad es que yo no la conozco muy bien que digamos – respondió Goyle.

- ¡Claro que te equivocaste! – me respondió con sarcasmo Blaise.

- yo también creo que te equivocaste – me dijo Theodore y Crabbe solo asintió como en concordancia a lo que había dicho Goyle.

- Pero todo indicaba que si me engaña – les dije.

- ¡Todo indica que eres un pendejo!, y no por eso te humillamos – respondió con enojo y sarcasmo Blaise.

- ¡Bueno!, a ti ¿qué te importa tanto mi esposa? – le pregunte enojada, cual era ese interés que tenía por ella.

- ¿Ahora si es tu esposa? – me pregunto con sarcasmo enojado, mientras tomaba de trago su bebida.

- ¡Siempre ha sido mi esposa! – le grite, mientras le arroje mi cerveza.

- ¡Draco! – me grito Theodore.

- ¿Qué? – le pregunte.

- ¿Anda idiota levántate y enfréntame o acaso tienes miedo? – me reto Blaise.

- ¡Claro que no te tengo miedo asqueroso Mortifago! – le grite a Blaise dispuesto a ponerme de pie para ir tras él.

- ¡No te muerdas la lengua! – me grito de regreso - ¡Que no se te olvide que tú también eres uno de ellos! – me grito de regreso.

- Los dos cálmense ahora – nos demandó Theodore – Zabini estamos aquí para ayudar a Draco no para sumirlo más.

- Lo que deberíamos hacer es golpearlo para ver si algo se le acomoda en la cabeza, además recordemos que fue el quien me ha empapado de cerveza – respondió Zabini intentando secar la cerveza que le aventé. Yo solo me reí, Blaise era una niñita.

- Lo que pasa es que eres una niñita, eso es lo que eres – le dije.

- Pues seré una niñita, pero lo mejor de todo es que jamás le he hecho daño a la madre de mis hijos – me grito ya bastante enojado y de pie frente a mí.