Al despertarme pensé que todo había sido un sueño pero al levantarme de la cama, a parte de verme con el vestido de Sofi, tenía un increíble dolor de cabeza.
Lo extraño es que recordaba a la perfección todo lo que había ocurrido ayer, bueno hasta que me dormí en brazos de.. ¡ Zack ! El me tuvo que haber traído y me habría metido en la cama. Fui corriendo a ver el movil a ver si había rastro de llamadas o mensajes o algo que me pudiera informar donde se encontraba ahora. Estaba sin batería, perfecto. Ahora tardaría una vida en tener la batería suficiente como para encenderse. Salí de mi habitación y fui directa al salón, no había ni rastro de mis padres. Entonces recordé que hoy miércoles los dos tenían que ir a la cafetería durante casi todo el día, por lo que se habrían ido a las 5:00 am y llegarán sobre las 23:00 pm. Fui en busca de mi hermano por si se habían dado cuenta o algo de si yo había estado fuera durante la noche, no estaba en La Cocina así que seguiría durmiendo. Aunque conociéndole se habría quedado hasta las tantas jugando a los videojuegos así que algo tendría que saber, ya le preguntare cuando se levante porque conociéndole si lo levanto yo se va a enfadar y no me querrá informar de nada.
Justo cuando me derrumbé en el sofá, muerta del cansancio y descubriendo al encenderse el movil a parte de que no había mensajes que eran las 12:00 am una voz sonó a mis espaldas, una voz que casi me provoca un infarto.
-¿Eres madrugadora por lo que parece no?- me pregunto Zack mientras se frotaba los ojos fruto del cansancio que tenía.
-¿Que haces tú aquí?- dije casi gritando.
-¿Es que no lo recuerdas? Ya sabes lo que pasó anoche..- dijo guiñándome un ojo.En ese instante me temí lo peor. No, no podía ser, no podía a ver perdido mi virginidad borracha, por mucho que lo quisiera desee no haberlo conocido solo por ese hecho. Eso era algo que se supone que debe recordarse durante toda la vida y se supone que si sabe que estaba borracha no debería haber intentado nada conmigo en ese estado. Lo maldije de todas las formas posibles e intuitivamente me lleve la mano a mi pelvis temiéndome lo peor. Pensé que el alma se me caía a los pies, el que lo noto no pareció afectarle mucho.
-¿Pero que se supone que haces?- dijo a punto de estallar de risa.- no nos hemos acostado tranquila no soy de esos a los que les guste abusar de personas borracha. ¿Pero en que coño pensabas?
-Pues..
-Si ya lo veo. Puesto a que no lo recuerdas cuando te traje aquí no parabas de hablar en voz alta y llamar a una tal Mireia, casi a gritos luego empezaste a llorar. Tuve que quedarme debajo de tu cama para que cuando te daban esos ataquecitos no despertaras a todo el vecindario, suerte que nadie te escuchó, si no llego a estar aquí te descubren fijo, porque por lo que pude ver te habías escapado, ¿no? He tenido que dormir debajo de tu cam...Mi cerebro se detuvo justo cuando termino de nombrar aquel nombre. Aquel dichoso y hermoso nombre. Mireia. Protagonista de mis mejores sueños y mis peores pesadillas. Casi año y medio de siquiatra para poder olvidar el fallecimiento de mi hermana. Me acuerdo perfectamente yo tan solo tenía once años y ella la misma edad que yo ahora, pero ya conducía porque ella a esta época del año ya había cumplido los dieciocho. Iba con ella en el coche. Ella y su estupido novio estaban de copilotos. Era un coche pequeño, así que no le resultó difícil expulsarme al exterior antes de que chocara contra aquel muro haciéndolo polvo. A ella no le dio tiempo a saltar, su cinturón se atascó y gritaba minnombre para que saliera, el novio iba borracho y ni lo intentó, tenía las intenciones de suicidarse aquel día llevándose por delante también nuestras vidas. Por eso casi nunca bebía cuando estaba en mi pueblo, por eso con nada con lo que bebiera me afectaría tanto, odio el alcohol. Odio los cinturones y por encima de todo quería..no, amaba a mi hermana. El se dio cuenta lo que provocó aquel nombre en mi y enseguida se abalanzó en el sofá y me rodeó con los brazos, ni si quiera me había dado cuenta de que había empezado a llorar hasta que lo vi reflejado en la camisa negra básica que llevaba aquella mañana.
Le expliqué a través de sollozos toda la historia, no quería parecer débil pero con este tema me resultaba imposible. Por eso le rete para poder aprender a conducir y nunca bajo ningún concepto exponer a nadie bajo ningún peligro. Cuando termine de contarle toda la historia al completo, me miró y yo escondí mi cabeza bajo la suya y cerré los ojos rezando como había hecho otras mil veces para que todo esto fuera un sueño y al despertar la tuviera junto a mi de nuevo. Zack no dijo nada, ni una sola palabra, se limitó a abrazarme con todas sus fuerzas y a darme besos en la cabeza en señal de protección. No tenía intención de irse, ni yo tampoco. Por alguna razón agradecí que no hubiera dicho nada y que se hubiera limitado a lo que está haciendo, es el mejor consuelo que podría tener. Estuvimos como media hora así. Y luego le ofrecí algo para desayunar pero lo rechazó.
-Me tengo que ir..- dijo algo nervioso y mirando hacia otra parte.-¿nos vemos esta tarde? Si quieres te recojo sobre las 17:00 pm y vamos otra vez a aquella playa, bueno si quiero si no pues nada otro día no te..- pero lo corte antes de que pudiera terminar de hablar.
-Claro que quiero.- le di un suave besos en los labios y ahora fue el el que me devolvió esa mirada intensa, estaba empezando a asimilar todo lo que había entre nosotros. Nacidos para estar juntos para siempre, igual que todas las parejas de la tele. Desee con toda mis fuerzas que el sintiera lo mismo que yo cuando lo vi alejarse de mi casa. Ahora toda la casa olí a el. O más bien era yo la que lo hacia, dude en bañarme no quería perder aquella aroma nunca. Pero me obligue a hacerlo después de todo lo ocurrido anoche y entonces lo vi despierto, por fin mi hermano se había despertado.

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Párenla, que va armada
RomanceINTRODUCCIÓN : Puede que te estés preguntando qué harías si llegaras a una nueva ciudad, donde no conozcas a nadie y donde tu principal preocupación sea desgraciadamente un desamor, bueno hasta que descubras otro... -¿Estarías dispuesta a perdonar c...