Capítulo # 18

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Narro yo.

El joven de ojos azules había entrado a su aula. Lo primero que sus ojos fijaron fue en el asiento de la chica de mirada mal  humorada, dio un largo suspiro al verla sentada en su lugar. No evitó sonreír un poco al tener su presencia.

Twilight sintió una mirada algo acosadora, al alzar la suya, a quien primero ve fue al joven de cabello azul junto con una pequeña sonrisa en su rostro. Ella alza una de sus cejas al darse cuenta que éste no reaccionaba a pesar de que ella lo estaba mirando; muy extraño para Twilight, puesto que cada vez que ella se daba cuenta de sus miradas, él no tardaba en desviar su vista y hacer de cuenta que nada había pasado.

El grito del maestro anunciando su llegada lo hace reaccionar de inmediato, aclaró su garganta de lo avergonzado que estaba y seguir caminando hasta su asiento. La joven, con su semblante inexpresivo, empezó a mover su cabeza de un lado a otro.

[...]

Ya era la salida. Twilight salió de  su salón para empezar a recorrer un largo pasillo con el fin de llegar a la salida del Instituto.

En medio de tanta gente rodeandola, se da cuenta que adelante de ella caminaba Flash Sentry. Frunció su ceño al recordar las innumerables veces que él la había mirado durante todo el día. Aparte de haberse sentido incómoda, también se sentía enojada. Creyó que había dejado muy en claro que ya no existe razón alguna para que tanto ella como él crucen al menos una mínima mirada.

Aceleró su paso para llegar a estar a la misma distancia de él.

-¿No te habían dicho que eres muy malo disimulando?

Flash saltó del susto debido a la inesperada pregunta, y sobre todo, por la persona que la había formulado.

-¿Qué?

-Ya deja de mirarme. -Exigió muy firme. -A este paso terminaré ojeada por causa tuya.

El joven se rascaba su nuca avergonzado, y esta vez haciendo lo posible por no mirarla.

-Lo siento. -Dijo en voz baja. -Sólo que... es imposible.

-¿Imposible? -Se detuvo de golpe, Flash repitió el acto. -Entonces hazlo posible, ¿tan difícil es dejar de mirarme y prestar atención a la clase?

Flash soltó aire para luego mirar fijamente a Twilight.

-Digamos que sí.

-Sólo pon tus ojos sobre la pizarra y ya. Yo no soy la que explica la clase para que me estés mirando cada cinco minutos.

-Te miro porque me gustas. -Confesó con total seriedad y seguridad. La joven no tuvo reacción alguna, es más, le había impactado aquello. -Sí, se me hace difícil, demasiado... Sé que te desagrado, pero eso no me quita las ganas de dejar de sentir algo por ti. Esto es fuerte y verdadero, Twilight, te lo puedo asegurar. Sé que con eso no llegaré a nada, pero sólo lo dije para que sepas mi razón del porqué te miro cada cinco minutos.

Después de escuchar aquellas palabras, Twilight terminó reaccionando. Ahora miraba a varios lados de lo incomoda que se empezó a sentir.

-Ya escuché suficiente. -Fue lo único que dijo para irse lo pronto posible de ahí. Haciendo caso omiso a las llamadas del joven.

No lo quería admitir, pero estaba huyendo. Sintió miedo. Asustada por la reacción que su cuerpo había tomado después de las reveladoras palabras de Flash. Estaba nerviosa, respiración agitada y su corazón palpitaba a mil.

Ya había sentido lo mismo antes y nunca dejó de culpar aquellas sensaciones, porque si no fuera por eso nunca habría sufrido tanto. Debido a eso, juró nunca más traerlas de nuevo. Y ahora, se odiaba a más no poder por no estar cumpliendo su juramento.

Mi Amargada Rockera.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora