Capitulo 11

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Narra Luis

7 de la mañana, Alex y su mamá estaban listos para quedarse con Gabo y nosotros listos para irnos a nuestras respectivas casas...o al menos eso pensé.

- Chicos, estoy viendo en el juzgado el caso de ese maldito, ahorita de hecho voy para allá, mi mamá se quedara aquí, en la noche regreso y me quedo yo. Quería pedirles si podemos cambiar, ustedes que vengan en la tarde, digamos pasando las 12 del día, y en la noche nos quedaremos mi mamá y yo - Alex esperaba ansioso una respuesta.

- Pues creo que no hay problema – Fede nos miró, cada uno iba asintiendo – solo sería cosa de que nos pusiéramos de acuerdo entre nosotros.

- Gracias chicos.

- E igual si necesitas ayuda en el juzgado no dudes en decirnos – esta vez Wero hablo por todos.

- Lo hare sin duda, de nuevo gracias.

Todos nos despedimos y nos dirigimos a la salida

- Pues entonces nos veremos mañana – dijo Félix rascándose la cabeza.

- Amm chicos – Wero hablo antes de que nos marcháramos – ¿no quieren ir a desayunar? Podemos ponernos de acuerdo para mañana – todos nos miramos, dudosos, desde la discusión no habíamos estados juntos más que aquí en el hospital.

- Claro, yo....yo no tengo problema – Fede quiso alentarnos.

- Si, estaría bien – Isra nos miró, todos terminamos accediendo.

El único que tenía carro era Wero, pero entrabamos bien los 6. Félix se fue de copiloto, los demás nos acomodamos bien atrás, aparte que Cristhian e Isra eran un poco delgados, así que no tuvimos problemas.

Llegamos a un pequeño restaurante, nada lujoso, más bien rustico y hogareño, buscamos una mesa grande y nos acomodamos. Todos empezamos con un café y un poco de fruta.

- Entonces – rompí con el silencio – como nos iremos turnando.

- Podemos estar cada quien hora y media, pero sin estar todos en el hospital – opino Isra- por ejemplo, que alguien llegue a las 12, y a la 1:30 que terminaría su turno, hasta entonces llegue el otro, porque digo, al final de cuentas creo que también debemos seguir con nuestras vidas, tenemos trabajo y familia – todos asentimos.

- A mí me parece buena idea, asi no dejamos nuestras cosas ni dejamos a Gabo – dijo Wero mientras terminaba su ultimo pedazo de fruta.

Continuamos con nuestro desayuno, de repente platicábamos cosas sin sentido y reíamos, una parte de mí se sentía bien.


 Es un poco corto, por lo que subiré dos capítulos.

24 Horas [Luisabo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora