La familia de Gustavo

201 9 1
                                    

-___- escucho mi nombre proveniente de un callejón oscuro.

-¿Hola?... ¿Quién eres?

-¿Acaso ya no me reconoces?- se  aproxima una figura no tan desconocida

-¡Jonas!- me lanzo a abrazarlo con fuerza- ¿Qué hacías ahí?

-Vine a hacerte una pregunta.

-Hazlo-  Jonás sonríe de una manera perturbadora

-Ahora no, no es buen momento

-Si es que ya empezaste, termina.- Me cruzo de brazos esperando, él sabe que no me gustan las cosas a medias. Se ríe evitando mirarme- Puedes continuar si deseas

-No lo entiendes ¿no?

-Sinceramente no.

-Es una pena, mi querida ___- me da dos palmaditas en el hombro- Pero pronto lo sabrás, muy pronto- no sé si mi vista está borrosa,  o si él se está alejando tan rápidamente hasta el punto de verlo pequeño

-¡Jonas! ¡Espera! ¡Esta conversación no ha acabado!

-Muy pronto lo sabrás….- me contesta como si aún estuviera en frente mío

¿Pero qué fue ese sueño?

*¿En qué andas?
-¿En que ando? Pues en un bus, ¿no?
*Qué sarcástica.  ¿Estás en el hotel?
-No, estoy en un parque donde hay muchos abuelitos
*¿Sola?
-Sí, quise venir a pensar un rato
*Te acompañaré en tus pensamientos. Estoy aburrido

-Me imagino qué cosas sentirán esos viejitos- pienso en voz alta- ¿Será interesante llegar a esa edad?- Observo el ambiente lleno de parejas. Algunas mayores que otras

-Yo opino que sí, por algo son sabios

-Por la experiencia

-Por los años transcurridos

-¿Qué cosas habrán pensado ellos cuando tenían nuestra edad?

-Quizá pensaban que les faltaba mucho, o quién sabe, ni siquiera estaban pensando en su futuro

-¡Mira! Ese de ahí tiene tu peinado

-Y esa señora de ahí, que es su pareja, frunce el ceño como tú.

-¡Que mentiroso!- le intento hacer cosquillas- ¿Y cómo sabías que era su esposa?

-Ay, ¿no será porque le está ayudando a bajar las escaleras a su novia?

-Cieeerto

-Además, los dos tienen anillo si es que te has fijado en los detalles- acerca su rostro al mío, ambos seguimos mirando a los ancianos

-Pero no le digas novia, que suena raro

-¿Ah sí? ¿Y cómo se les llama?
-Es su señora esposa… ¡no te rías!

-Y tú no te quejes que dentro de un par de décadas vamos a estar así

¿Escuché bien eso?

¿Dijo “vamos” a estar así?

¿Vamos?

Vamos…

-Gustavo. ¿Va en serio?

-Va en serio….¿qué?

-Lo nuestro, me refiero a que si lo nuestro va en serio. Porque ya ha pasado un mes y quisiera saber si…

-No, ¿por qué? – me interrumpe drásticamente

Me quedé callada, porque ya no es necesario terminar la oración, ya sé la respuesta.

-Gracias por tanta sinceridad- me levanto de la banca de madera y me salgo de ahí

Loca por él (Gustavo Daneluz y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora