« Mire en sus ojos y ahí me encontré. »
Fija el blanco.Apunta.
Respira profundo.
Contrae cada músculo de tu cuerpo.
Posiciónate en el ángulo apropiado.
Mantén la respiración.
Muere por un segundo.
¡Dispara!
Vuelve a respirar.
Vuelve a vivir, no, mantente con vida tras de él.
El arco y las flechas.
Abraza con tus dedos el mástil del arco, como abrazarías a la vida misma. Aférrate a la flecha como si fuera lo más valioso y poderoso que tengas, y entonces cuando este en su punto máximo, el ángulo perfecto: Libérala.
Lo que amas debe ser libre.
— ¡Jungkook! — escuche a la lejania.— ¡Jungkook!
Reconocí el tono de voz de inmediato.
Mis sentidos, todos habían aumentado de manera considerable.
Corría por mis venas sangre nueva.
Baje con audacia de las alturas de los viejos robles donde me encontraba. Veía desde las alturas el pequeño cuerpo que corría en mi búsqueda.
Me hamaque con mis brazos sobre una rama para caer de pie frente a él.
— ¡Aquí estoy! — limpie el sudor que caía por mi frente. — ¿Que sucede Jin?
— Ugh.— exclamo.— ¡Apestas!
Olí mis extremidades, quizá el tenía razón.
Sudaba, mi cuerpo entero estaba empapado en sudor.
Pero mi olor no me repugnaba ni mucho menos, me recordaba a él.
Yo olía a él.
— ¿Viniste para decirme eso?— bromee.
Camine hasta un pequeño charco de agua con el cual lave improvisadamente mi rostro.
El agua helada, como el bosque mismo en sí, chapoteo en los poros de mi piel.
— No, he venido a buscarte por quinta, ¡no! sexta vez.— se quejaba.— El consejo exige hablar con nosotros, no puedes pos-ponerlo más.
Aquellas malditas ideas a las que querían imponernos.
Mire mi reflejo en el agua por un instante.
Mis ojos eran de un color cobrizo, casi rojo, casi como mi propia sangre.
Mis pupilas y mi iris también cambiaban de color.
Todo de mi había cambiado.
— Ya les hemos dicho.— rasguñe mi reflejo el agua con un golpe asqueado.— Taehyung no será rey, el no quiere. Y si el no quiere yo tampoco.
— Entiendo que su respuesta sea esa, aunque no pienso que sea la indicada.— respondio con clemencia.— Aún así debes asistir y dar esa respuesta a los ministros.
— Sabes mi respuesta, díselas tú Jin.
— Debes hacerlo tu mismo.— continuo.— Es tu deber, eres el acompañante de un posible futuro rey, y sabes que los vampiros y los concejales de las iglesias no se reúnen a solas. Ellos no pueden si quiera verlos a los ojos.
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Hemophobia | VKook EDITANDO
FanfictionJungkook tiene miedo a la sangre; Taehyung es un vampiro. Categoría: Vampiros. AU. Advertencias: Smut. Contenido explicito. Relación homosexual.