Bad Blood 1.0 (Kaylor)

Capítulo 37

-Muy bien, quiero discreción ¿de acuerdo?- Dijo con autoridad

-Sí jefa- dijo Toni del otro lado del escritorio 

-No podemos poner nada en riesgo ahora que la misión está prácticamente a la vuelta de la esquina-  dijo mientras se levantaba de la silla y caminaba a alguna parte fuera de aquel garaje 

-No ha olvidado la parte del trato que me corresponde ¿verdad?- Estaba un tanto asustada, pero quería aparentar lo contrario 

-Si, chiquita. Aún no se me olvida- Le dio una palmada en la espalda -Esa Swift no sabrá ni qué ocurrió, pobre Knockout, podría sentir lástima por ella- tomó una pausa y después comenzó a reír -Pero estoy tan feliz-

-Dijimos que a Knockout no la ibas a tocar- Advirtió alterada -Tranquila nenita, ella estará intacta y lista para ti- Le dio un guiño y después una nube de color amarillo la hizo desaparecer 

***

-Muy bien chicas, hemos estado entrenando como locas y no pude salir nada mal ¿bien?- Decía una Taylor muy optimista y hasta cierto punto sonriente

-Taylor ¿crees que deberíamos investigar reacciones nuevas?- Preguntó Destructa X

-Debemos cubrir todas las posibilidades que se vayan a presentar, pero tengan cuidado, vayan con especialistas y deben informarle a Kelvin también- Aseguró mientras se llevaba su botella de agua la boca; después de eso todas se dispersaron

***

-Mi amor, debes descansar un poco, llevas días de un lado a otro- Decía Karlie mientras la abrazaba a si, dentro de la oficina -Incluso hemos comido comida congelada, y no es que reclame eso, pero amor, ya ni siquiera nos vamos a dormir juntas- dijo con sentimiento Karlie y Taylor sintió como su corazón se rompía solo un poco 

-Te prometo algo- Dijo dándose vuelta y quedando frente a Karlie aún abrazadas

-¿Me conviene o va a ser solo un engaño para seguir con esta rutina?- Pregunto Karlie un poco cabizbaja 

-Tu terminas el papeleo aquí, que no es mucho, mientras yo le entrego los últimos avances a Kelvin y después voy a casa y te espero ahí con la cena- Le dio un beso en la mejilla 

-No amor, no trabajes con la cena, podría pasar a comprar algo, tal vez tu pasta favorita- Le dio un beso en los labios, muy corto

-Bien, lo mismo, pero yo paso por la pasta- La abrazó y se escondió en su cuello 

-Esta bien amor- Le dio un beso en el cabello y la abrazo más

***

Karlie entró al departamento que estaba en completa oscuridad, Meredith le brindó una caricia por sobre el pantalón mientras dejaba sus cosas sobre la mesa pegada a la puerta

-Taylor, ya llegue- Vio una luz prendida en la cocina, así que caminó hasta ella -¿Taylor?- 

Cuando entro por completo, no encontró a nadie, sin embargo al darse vuelta estaban las velas del comedor prendidas, mostrando a una Taylor vestida con un hermoso conjunto de encaje que Karlie supo solo debía verse bien en ella y entonces sonrió afortunada, corrió hasta ella y la levantó en un abrazo.

-Te ves hermosa- Le dijo una vez estuvo en el suelo y después le dio un beso certero en los labios 

-Estoy tan feliz que estés aquí- La abrazó

-Dios mio, Tay. Huele delicioso- Dijo Karlie, a pesar de querer comerse a Taylor, sus tripas tenían otros planes 

-Prepare tu favorito- dijo dándole un beso en el cuello

-Dijiste que comprarías pasta-

-Es pasta- dijo inocente

-Pero tú debías descansar- hizo un puchero adorable que derritió a Taylor 

-¿Te parece que más tarde me ayudas a descansar?- Le dio una sonrisa pícara y se separó de ella 

-Solo si prometes algo- La volvió a tomar de la cintura dándole besos por todo el perfil de su oído 

-Lo que sea- dijo suspirando, sabía cuál era su punto débil

-Debes de despertar mañana como mínimo dos horas tarde y después ya puedes ir al trabajo- Le daba caricias ahora en el abdomen

-Esta bien amor, pero detente, que tengo hambre- Esa voz ronca que desprendía sensualidad era un claro indicio de excitación

***

La cena se quedó a medio comer, las caricias que se propiciaban la una a la otra  eran muy torturantes como para esperar al postre.

Karlie cargo a Taylor con posesión hasta su habitación, y mientras sus manos dejaron la timidez de lado, Taylor solo podía pensar que era muy feliz con esa hermosa rubia castaña

-No había tenido tiempo de decirte lo bien que te queda el rojo- Le dio un beso en el oído mientras sus manos la acariciaban 

-Gracias mi amor- La tomó de las mejillas y le dio un beso directo en la boca, poco inocente y totalmente caliente 

Karlie la despojo con lentitud de aquel atuendo, donde solo dejo las ligas descansando en su cadera y recorriendo sus hermosas piernas.

Repartió besos precisos como si tuviera miedo a olvidarla.

Pronto la boca traviesa de Karlie dio besos en las clavículas, los pechos y el abdomen, Taylor intentó moverse y hacerla sentir también, pero Karlie la detuvo.

-No mi amor, hoy te toca enloquecer solo a ti- y entonces su boca asalto su intimidad, sin aviso ni permiso

-Dios, Karlie..!!- Suspiro Taylor 

Karlie hizo movimientos tan alterados tanto con su lengua como con sus dedos que cuando escucho a Taylor comenzar a gemir no espero que estos fueran tan escandalosos 

-Dios, Karlie... si ahí, oh dios si- Gemía Taylor

-Así me gusta, di mi nombre, quiero escucharte- Decía en susurros Karlie

-Dios mio, Karlie. No pares, así-

Entonces como si de una poseción se tratase, Taylor tomó la cabellera de Karlie y la hundió lo más que pudo a su intimidad, el éxtasis en el que estaba solo la dejaba en el aire, estaba levitando su alma y entonces todo ese amor se lo quiso dar a Karlie, a quien subio hasta su boca y tras probar su propio sabor, sintió que el momento tan ansiado había llegado, iba a correrse y de manera descomunal

-Karlie, ya no aguanto mas, por favor no te detengas- A penas y con esfuerzo logro formar tan larga frase 

-Si, correte amor, mientras te beso- 

Entonces pasó, el cansancio pudo ser o no una parte que influyera, pero Taylor se corrió, expulsando sus fluidos de manera poco común y el grito que se ahogó en la boca de Karlie lo hicieron todo aún más sensual

Karlie cayó sobre Taylor, ella también estaba exhausta y sin contar que también había tenido un orgasmo por la simple sensualidad del momento 

-Te quiero tanto, por favor nunca me dejes-

-Ni aunque tu quisieras- Dijo Karlie y después dejó un beso lleno de amor e inocencia (que poco encajaba en esta situación)

Aquella noche, todo volvió a lo de antes, ellas durmiendo abrazadas sintiendo el cuerpo de la otra dando un poco de calor innecesario pero sin duda agradable...

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Tarde pero seguro, no hay mucho que decir, más que el capítulo 40 es el fin del libro 7u7

Tengan una bonita semana, cuidense y voten si les gusto 

Lofyu

-Dulce Fuentes-