Perdida en su mirada (Perdida en su Mundo Parte 2)

Capítulo 29- En un extraño lugar

Nota: A partir de ahora, los capítulos serán narrados en tercera persona en las partes donde no aparece Taylor.

Abro los ojos... estoy tirada en un suelo frío y áspero... todo está oscuro y siento frío... es una habitación solitaria, las paredes son grises, al igual que el suelo, no puedo pensar ni recordar nada bien... esas personas que me agarraron... ¡Me encerraron aquí! Estoy secuestrada en un sitio desconocido, me dejaron inconsciente y ahora estoy tirada aquí... lo último que recuerdo antes del golpe es que iba a casa de Meg... a recuperarla...¡Diablos! Iba a recuperar a mi novia porque le había terminado por una estupidez, que tonta soy, y ahora estoy aquí encerrada, ni siquiera pude ir y decirle que la amo o tan siquiera decirle adiós... tengo miedo, no quiero morir y menos aquí... pero no temo por mí, temo por mi familia, temo por mi mamá, por Corey, por Meg, por Clarissa, por Dany, por Yunka y la banda... por mis amigos y mi familia... temo por ellos.

Empiezo a llorar fuertemente y a sollozar, siento que me ahogo, algo falla en mí... no sé quién hizo esto ni qué he hecho yo para que me encerraran, solo quiero salir de aquí... me duele la cabeza y las lágrimas no ayudan en esto... estoy sufriendo, estoy sola, tan sola...

Con dificultad trato de levantarme, hay una puerta de metal al frente y quiero abrirla, pero no sé si haya alguien allí y tengo miedo de lo que pueda pasar... pero me armo de valor y voy hasta la puerta para abrirla, pero no tardé en darme cuenta de que me encadenaron un pie y no puedo caminar hasta la puerta, está muy lejos.

Tampoco tardé en darme cuenta que estoy desnuda... ¡No puede ser! Estoy desnuda... esas personas me quitaron la ropa, solamente llevo mis bragas pero de resto no tengo nada... esto me deja pensando de todo, pero nada bueno. ¡Primero me mato antes de que una persona que no sea Meg toque mi cuerpo!

¿Dónde está mi celular? Necesito llamar a mi mamá o a Meg...

Miro a los lados y observo que mi ropa está doblada en una mesa... puedo alcanzarla, eso espero.

Me trato de levantar para buscar en los pantalones y encontrar mi celular pero en ese momento siento unos pasos que vienen desde afuera. Me asusto y rápidamente me siento en el suelo.

Alguien abre la puerta y grita.

-Ya se despertó.

Entonces otra persona se dirige hacia donde estoy... el corazón se me acelera, tengo una mala sensación, se me revuelve el estómago y me duele la cabeza más que antes.

-Perfecto... nuestra Taylorsita tiene que comer.

Esa voz.

-Luke.

-Sí... soy yo. ¿Te acuerdas de mí?

Se me fue el habla...no tengo palabras para esto.

-Luke... ¿tú planeaste todo esto?

Él contesta con una risa, se agacha hasta donde estoy yo y me mira fijamente a los ojos.

-Por supuesto... ¿crees que me iba a aguantar la vergüenza que me hiciste pasar?

Me quedo callada.

-La cárcel es un infierno ¿sabes? Tengo varios motivos.

-¡Luke! ¡Estás loco! ¿Cómo pudiste secuestrarme? ¿Ese es el tipo de persona que eres?

-¡CÁLLATE!-me grita –cállate, estúpida...yo te amaba ¿sabes? No iba a aceptar el hecho de que me cambiaras por una mujer machorra.

-¡NO HABLES ASÍ DE MI NOVIA!