" Venatar hizo una confesión. A veces se despertaba por la mañana en lugares desconocidos. Estaba claro como el agua. La razón por la que el hombre lobo atacaba cerca de Venatar. Y la razón por la que Venatar coincidía con el hombre lobo. Era que...
Venatar era el hombre lobo en persona. Venatar no detestaba a nadie más que a sí mismo. Se cubrió la cabeza con las manos.
"Vigílame durante una temporada, ¿de acuerdo?".
Quería un testigo que observara el momento de su transformación.
Era el tercer día que vigilaba a Venatar. Nos llegaron noticias de que el hombre lobo había aparecido en otro lugar. No le había quitado la vista a Venatar ni un momento. Fuimos al lugar de los hechos para que Venatar pudiera luchar con la bestia.
Venatar llevaba décadas deseando esto. Al fin, el combate que ansiaba hasta el punto de sacrificar parte de su propio cuerpo...
No encontramos a un hombre débil tras su transformación en lobo. Encontramos otra cosa.
Era pequeña y redonda. Venatar lanzó un grito. Era un ojo humano. Todo cobró sentido de repente.
Venatar había pasado años persiguiendo a la bestia conocida como el hombre lobo. Sin darse cuenta de que él mismo era la bestia. Su ansia de encontrarse con el hombre lobo engendró un sustituto. Creado a cambio de un ojo.
¿Cómo no se dio cuenta de ello a pesar de que era parte de su propio cuerpo?
Quizá en lo más hondo de su ser lo sabía, pero prefería no aceptar... que el hombre lobo era él."
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Soul Sacrifice
FantasíaEn este mundo, los débiles sucumben a la codicia. Pero sus crímenes no quedarán sin castigo. Pues los hechiceros vigilan. Son ellos quienes imparten el castigo a los culpables. Quienes matan en nombre de la justicia
