"El rey Rexus siempre odió a los hechiceros, pero era consciente de su gran fuerza. Militar había aprovechado eso, y al demostrar una lealtad inquebrantable, habí allegado a estar muy próximo al rey. Se sospechaba de él en el reino. "Los hechiceros son hechiceros". La gente de la corte lo miraba con recelo.
Y ahí estaba pidiéndome que me uniera a él. Había matado al monstruo, y él había reconocido mi potencial. Me pidió que hiciera un trabajo. Dijo que sólo así su verdadera naturaleza se revelaría.
El trabajo consistía en llevar un mensaje a una guarida en las montañas.
Todos desprecian el estilo de vida de Militar, cortesanos y hechiceros por igual. ¿Estaba dispuesto a llegar tan lejos por el poder?
Llegué a la guarida y me recibió una hechicera. El lugar estaba repleto de hechiceros.
Todos ellos servían a Militar. Reunió aliados que esperaban el momento para saltar. Esperaban su oportunidad par alzarse y derrocar al rey Rexus.
Muchos hechiceros habían perdido la vida con este rey. Militar era consciente de ello. De niño, sus padres fueron ejecutados sin motivo. Jurando venganza, se infiltró en la corte enemiga y planteó una revolución desde dentro.
El mensaje secreto rezaba: "Aún no ha llegado la hora". Órdenes de Militar.
"¿Cuánto más vamos a esperar?"
La mujer arrugó el mensaje con la mano."
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Soul Sacrifice
FantasyEn este mundo, los débiles sucumben a la codicia. Pero sus crímenes no quedarán sin castigo. Pues los hechiceros vigilan. Son ellos quienes imparten el castigo a los culpables. Quienes matan en nombre de la justicia