La verdad aveces es mas difícil de comprender y por mas que desees conocerla no siempre es lo que esperas. Mi corazón, mis pensamientos, mis creencias, mi personalidad y mi autoestima son solo una parte de lo que consiste el cuerpo humano, son solo una parte de mi ser. En la vida no se puede tener nada perfectamente planeado, las cosas siempre tienen que pasar de una manera, sea buena o mala sea perfecta o disfuncional siempre tiene que salir tal cual. Solo hay pocas veces en las que existe un punto intermedio, creado estrictamente para recapacitar sobre lo que sea que este pasando en tu vida, ese punto intermedio te da una segunda oportunidad de cambiar lo que hiciste mal y recapacitar para hacer el bien. En este momento me encontraba sentada mirando una taza de café intacta que debido a estar pensando tanto se enfrió, Azael estaba frente a mi, observandome fijamente esperando paciente a saber cual era mi respuesta ante aquella declaración que me había propuesto hace unos segundos, aunque yo no me concentraba en eso sino en que hace unos pocos instantes me había dado cuenta de que lo quería.. como algo mas que un amigo y que el me correspondía, eso es algo que ni yo misma me esperaba.
No entendía para nada que era lo que estaba debatiendo, que era lo que estaba pensando, que era exactamente lo que estaba sintiendo. Lo único que lograba comprender es que el ser humano tiene la capacidad de administrar sus emociones perfectamente y es que nosotros tenemos el "don" por asi decirlo de ocultar lo que sentimos y sacar a la luz aquello por lo que nos esforzamos y lo que creemos que es correcto. Azael Harrison había llegado a mi vida tan inesperadamente. Su aparición me había causado mucha intriga y misterio por lo desconocido. Anhelaba descubrir mas sobre su personalidad, sus gustos y defectos, por lo que decidí dejar de lado por un instante lo que estaba sucediendo realmente y desenfocarme de la realidad solo por un momento.
- Prometes que responderás con la verdad todas mis dudas? - le pregunte mirándolo a los ojos fijamente esperando su contestación
- Creo que si... Lo prometo.
- Bueno, mi primera pregunta es... - dije observando como se hallaba inquieto en su silla - Cuéntame sobre ti
- Técnicamente eso no es una pregunta Miranda
- Y técnicamente prometiste resolver mis dudas no? Y esta es una de ellas... Así que por favor no mas rodeos, cuéntame algo sobre ti - le dije bebiendo un sorbo de café, arrugando el ceño repentinamente. Estaba bastante amargo y frió, ya no me provocaba muchas ansias continuar bebiéndolo
- Bien, promesas son promesas. Haber que te digo?. Mi infancia fue normal, tuve un padre y una madre bastante estructurados como trabajadores, fui un chico normal, con juguetes de carros y trenes, tuve un amor platónico y si lo admito es bastante vergonzoso nombrarlo ahora que estoy grande en voz alta. Algo mas?...
- Si, cuéntame sobre tu amor platónico... se escucha interesantemente sorprendente.
- Nunca debí decir eso... - le interrumpí
- Si creo que fue una mala idea - le dije con una pequeña y tímida sonrisa en el rostro.
- Haber... se llamaba Bethany, ella era la típica chica de 15 años a la que le gustaba el rock y los gatos. Ella era bastante tímida en lo exterior aun que cuando tomaba confianza en las personas se volvía extremadamente extrovertida, era baja de estatura y con una personalidad lo suficientemente... única. Ella nunca me presto atención, tal vez porque nunca me hice notar. Lo que siempre admire de ella era su forma de pensar... parecía que a simple vista era una de esas chicas porristas con super novios galanes y totalmente descerebradas como desequilibradas pero ella era realmente lista para las matemáticas y la ciencia aunque no lo pareciera, esa chica tenia un aura de ser bastante especial...
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Summer Night
Mystery / ThrillerPensar que todo pasa por una razón me resulta fascinante pero aquello que me paso a mí no fue lo peor que me pudo pasar por que como todo lo malo tiene un lado bueno pues eso sí es cierto, pero si llegamos a contar todos y cada uno de los efectos se...