Cap. 25

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- Azael enserio?  Quieres que nos fuguemos caminando? - le pregunte al notar que al salir de mi casa no había ningún coche aparcado en la entrada

- Bueno es que yo pensaba que como te gusta caminar y recibir el aire fresco, no te molestaría caminar en la madrugada 

- Si me gusta caminar pero no cuando tengo sueño y lo único que deseo es dormir, aparte de que hoy tenemos escuela dentro de unas horas - dije mientras pasábamos frente a la iglesia 

- Ya se que estas cansada pero anímate un poco, vamos es media noche! Dime cuantas veces no pensaste en las locuras que podrías hacer a media noche? - dijo cuando cruzamos la calle y giramos hacia la izquierda para camuflarnos con la oscuridad del bosque 

- Vale, lo siento pero es que hoy no fue de mis mejores días para serte sincera yo... Un bosque? Enserio? De todos los lugares a los que podríamos ir a media noche, eliges un bosque? - le pregunte al caer en cuenta en el lugar en donde nos encontrábamos 

- No es cualquier bosque... - dijo y se giro hacia la derecha apuntando con su dedo indice las casas de enfrente - Vez esas casas, ahí vivíamos mi familia y yo. Dentro de esa urbanización se encuentra mi antigua casa, el lugar en el que viví mi niñez, crecí y madure...  el cual también abandone - me dijo volteando a mirarme y tomándome de la mano guiándome por un sendero de rocas - en este bosque pase la mayor parte del tiempo, jugaba, reía, todo era para mi felicidad, amor y paz. Pero como todo tiene un final, esa etapa de mi vida concluyo. Empezaron los problemas y ninguno parecía tener solución, cuando mis padres discutían yo simplemente salia a escondidas por la ventana de mi cuarto, venia hasta este bosque y subía por las escaleras que yo mismo había construido hasta mi casa del árbol - dijo justo en el instante en el que nos detuvimos frente a un árbol. Este tenia unas ramas infiltradas organizadas una encima de la otra logrando asi crear un escalera. Yo estaba en un estado de shock por dos cosas, primero porque Azael estaba compartiendo su pasado conmigo y segundo porque todavía estaba un poco conmocionada con lo que el había dicho sobre que abandono su hogar. No hablaba solo me limitaba a escuchar porque tenia temor de decir una tontería - sube, yo voy después de ti. 

Subí por los escalones de madera hasta que llegue a un barandal delgado que conducía a una puerta pequeña, la abrí y entre por ella, todo estaba oscuro por lo que no lograba ver nada a mi alrededor y mientras esperaba a que Azael subiera tocaba las paredes tratando de sostenerme.

- La lampara de luz esta fallando por lo que estoy utilizando velas - dijo el al terminar de subir para luego sacar un encendedor y comenzar a prender las velas que se ubicaban alrededor de la casa formando un circulo - Miranda Cleveland me harías el honor de acompañarme en esta velada? - me pregunto estirando su brazo ofreciéndome su mano, la cual tome sin dudar 

- Claramente esto no es una velada, pero gracias por esforzarte - dije sentándome en el suelo con el 

- Lo intente, eso es lo que cuenta - dijo colocando una bolsa al frente nuestro y sacando de esta dos hamburguesas con gaseosa 

- Porque me has traído aquí Azael? - le pregunte observando como dejaba la bolsa a un lado y volteaba a mirarme

- Yo quiero que me conozcas mejor y yo quiero conocerte mejor y por eso esto me pareció una buena idea, que habláramos sin tener interrupciones - me explico y yo sentí una presión en mi pecho, era algo como felicidad y ternura. Su gesto me había dejado llena de alegría al saber que el tenia interés realmente en mi - por eso te voy a terminar de contar mi historia... mientras tanto come, que esto no estará caliente para siempre - dijo pasándome una hamburguesa y dejando la gaseosa frente a mi - Construí esta casa del árbol para que me resguardara de todo lo malo, que fuera como mi escudo de protección para aquellas veces en las que mi casa no se sentía como un hogar venia aquí y aun estando solo, este lugar se sentía como mi hogar. Se que puede sonar algo extraño que un niño de 14 años tuviera una casa del árbol pero en mi vida yo valoro mas los gestos nobles que las acciones enormes. Mi padre y madre siempre trataron de consentirme y de hacerme feliz pero nunca se dieron cuenta que la felicidad no va por las cosas materiales sino que se da con el cariño que tu familia te puede brindar. Y por cierto sobre mi amor platónico, ella nunca se fijo en mi por una simple razón. 

Summer NightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora