"La hija de mi enemigo"

Capítulo 7: "Viviendo un sueño"

Una bella pelinegra dormía profundamente entre los brazos de un atractivo joven de cabello alborotado que la miraba embelezado recorriendo con su mirada cada rasgo del rostro de su esposa.

Mi niña, eres tan bella y dulce, a tu lado soy tan feliz, tanto que a veces creo que estoy viviendo un sueño y me da tanto miedo despertar de el, tú me ayudaste a olvidarme de mis temores, por ti aprendí lo que es el verdadero amor, lo que es tener una familia a tu lado, ya que desde que falleció mi abuelito a pesar de que el maestro Roshi me adopto no fue lo mismo en cambio contigo e vuelto a tener una familia nuevamente, soy tan pero tan feliz que a veces tengo miedo de tanta felicidad, ya llevamos un mes de casados y ha sido la experiencia más bella que nunca pensé experimentar, me alegra tanto haber dado este paso contigo ¡mi amor¡.

El joven de cabello alborotado se alejo suavemente del cuerpo de su amada y tomo su ropa para vestirse mientras su esposa seguía profundamente dormida.

Me daré un duchazo y luego le preparare algo para desayunar, pensaba Gokú.

Mientras tanto:

Un gigantesco hombre hablaba con un hombre de lentes.

¿Entonces siguen investigándome?, decía el gigantesco hombre.

Si señor, todas esas personas a las que usted les hizo fraude se han unido para destruirlo, decía el hombre.

Pero, ¿por qué?, si algunos terminaron volviendo a recuperar lo que les pertenecía, lo que me faltaba no solo tengo tras de mi a ellos sino también a estos, decía el gigantesco hombre.

Si es cierto que lo recuperaron, pero tuvieron que volver a comprar lo que una vez fue suyo, por eso quieren destruirlo, además no todos han recuperado sus pertenencias, además hay un jovencito que lo acusa de homicidio, decía el hombre de lentes.

¿De homicidio?, dijo el gigantesco hombre.

Si, se apellida Son, así figura en una de las denuncias a las que tuve acceso, dijo el hombre.

¿Son?, si, si me acuerdo de ese apellido, me acusa de homicidio, yo no tuve la culpa de que su abuelo muriera por hablar conmigo, yo ni sabía que ese hombre estaba enfermo del corazón, decía furioso el gigantesco hombre.

Pues eso dice el parte policial, pero como usted dice esa denuncia no procedería pues usted desconocía el padecimiento del señor, ¿o me equivoco?, dijo el hombre de lentes.

Claro que lo desconocía, ¿no te quedo claro?, si es cierto yo me ensañe con esa familia, pero no lo hice por voluntad propia y tu lo sabes ya que tu también estás en esto y si me hundo yo también te hundes tú, dijo el gigantesco hombre con molestia.

Si, si, si lo sé, no tienes que recordármelo, dijo el hombre de lentes.

Capital Central: "Departamento de Gokú"

Una bella pelinegra que estaba sentada sobre su cama vestida aún con su pijama miraba dulcemente a su esposo acercarse con una pequeña fuente hacia la cama.

Te veías tan bella dormida que no quise despertarte, dijo Gokú al llegar junto a ella y colocar la fuente sobre la pequeña mesa de noche antes de darle un apasionado beso a su esposa.

¡Feliz aniversario de mes¡ intente prepararte algo, espero y te agrade, dijo Gokú sonriendo al separarse.

¡Gracias¡ y ¡feliz aniversario también¡ esto se ve delicioso, dijo Milk dulcemente.

Ya tengo planeado todo nuestro día para hoy, aprovechando que es sábado no tenemos clases, ni yo tengo entrenamiento en el gimnasio iremos de paseo de campo, decía Gokú dulcemente mientras miraba a su esposa tomar su jugo.