Capítulo 15: "Dolor y decepción"

598 54 11
                                    

Una pelinegra sollozaba tomando las manos de su amado.

Ni tu ni yo tenemos la culpa de este amor, tenemos un hijo en común Gokú, por él, por él tenemos que seguir juntos, decía Milk en tono de súplica.

Como me pides eso, tu eres la hija de mi enemigo, tengo que odiarte tanto como odio a tu padre, él ira preso por lo que le hizo a mi familia y a otras familias, decía Gokú con molestia.

Yo no creo que mi padre haya echo eso, decía Milk.

Es normal que defiendas a tu padre, así sea un asesino, pero yo nunca volvería contigo, a Gohan y a ti no les faltará nada, solo quiero pedirte que accedas al divorcio por mutuo acuerdo es mejor para los dos, tú eres joven y bella volverás a rehacer tu vida, decía Gokú en tono celoso.

Yo no quiero rehacer mi vida, solo quiero estar contigo, dijo Milk.

Eso es imposible Milk, lo nuestro quedara como un recuerdo, solo te pido que me dejes ver a Gohan así sea una vez a la semana, quiero verlo crecer, decía Gokú con tristeza.

La pelinegra no respondió nada, solo se quedo en silencio.

Es mejor que vuelvas al pasadizo, yo me encargare de que tu padre pague por todo lo que ha hecho pero tu estás en tu derecho de defenderlo, el que tengamos un hijo en común no te impide a actuar como te dicte tu corazón, mi abogado irá nuevamente a verte para que se pongan de acuerdo con las visitas de Gohan, dijo Gokú parándose de la mesa para salir del cafetín.

No pienso firmarte el divorcio, yo creo que los errores de los padres son de ellos no de los hijos y el amor debe prevalecer sobre todo, dijo Milk haciendo que el joven de cabello alborotado detenga sus pasos y voltee a verla.

Es fácil decirlo porque no estás en mi lugar, dijo Gokú con tristeza antes de salir del cafetín dejando a una desconsolada pelinegra que sentía su corazón quebrársele de tanto dolor que sentía.

Gokú salió a prisa del hospital, al hacerlo se encontró con sus amigos que ingresaban a este para encontrarse con su novias.

¡Gokú¡ dijo un calvo.

Krilín, Vegueta, dijo Gokú.

Amigo, ¿dónde andabas?, pensamos que no te volveríamos a ver, decía Krilín.

Pues ya me vieron, en estos días vuelvo a asistir al gimnasio, dijo Gokú.

¿Estás bien?, dijo Vegueta.

No, la verdad no, dijo Gokú.

Krilín, ve con las chicas, si Bulma te pregunta por mí, dile que me salio algo de improviso, que luego le explicare, no menciones que nos encontramos con Gokú, dijo Vegueta.

Está bien pero luego me explican a mí también, dijo el calvo.

Si, si amigo, dijo Vegueta.

El calvo veía partir al joven de cabello de flama y al joven de cabello alborotado mientras pensaba: ¿qué me están ocultando este par?, estoy seguro que tiene que ver con la separación de Milk y Gokú.

Dentro del hospital:

Una entristecida pelinegra terminaba de contarles a sus amigas la platica que había tenido con su aún esposo mientras sostenía a su bebé en brazos.

No puedo creerlo, decía Bulma al tiempo que un calvo llegaba junto a ellas.

¿Y Vegueta?, dijo Bulma.

Tuvo un pequeño inconveniente, vendrá en unas horas, dijo Krilín.

¿No te encontraste con Gokú?, dijo Dieciocho.

"La hija de mi enemigo"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora