Eneágono

Simplemente estoy cansada de fingir.

Minutos. Los minutos pasan y yo sigo con la cabeza reposada encima de la mesa. Atada. Me duele todo y necesito dormir. No sé cuánto tiempo llevo aquí, pero ya es suficiente. Por lo menos para mí lo es. Estoy empezando a quedarme dormida cuando escucho la puerta abrirse. Incorporo la cabeza. Cuando me doy cuenta un hombre me levanta de la silla y me desata. Me vuelve a sentar bruscamente. Entran ahora dos de los hombres de antes, no está el del pelo gris, acompañados de la rubia y otras dos chicas. Una rubia y otra pelirroja. Comprobado, no contratan a morenas. Nos marginan. Se sientan. Los miro con miedo. No tengo miedo en realidad, pero me tengo que mostrar inferior.

-Te presento a tus supervisoras, ellas estarán contigo en todo esto, te asesorarán y ayudarán a tu cuidado y vigilancia. –las miro- Ellas son Marta y Andrea. –me río. Me miran con desconcierto.

-¿Qué? ¡Rima! –digo convencida. Se miran alucinados por mi subnormalidad extrema y no los culpo.

-No rima. –me dice el pelirrojo. Le miro. Abro la boca como para decir algo. Frunzo el ceño. Cierro la boca. Dirijo mi mirada con el ceño fruncido hasta Marta y Andrea. Tuerzo la comisura derecha de mi labio y subo y bajo los hombros como diciendo “qué se le va a hacer”. Me sonríen.

-Ellos son Héctor y Christian. –señala a los dos hombres. Christian es el pelirrojo y Héctor el moreno. Les doy una pequeña sonrisa.

*Un mes y un single después*

Suena la alarma. Las nueve de la mañana. Abro los ojos, me incorporo un poco y me extraño, de nuevo. Llevo un mes aquí y sigo sin hacerme a la idea de que ahora esta es mi casa. Todo es muy minimalista, combinando el blanco con toques de azul y rojo. La cama es de matrimonio con una colcha con motivos de Londres y alguna bandera de Inglaterra, el cabecero de la cama es de madera, blanco, y encima un cuadro con la bandera de Inglaterra. En frente tengo una gran cómoda blanca con los pomos azules y rojos. La puerta, situada en un lateral de la cama, también es blanca y de lado de esta un gran espejo de este mismo color. De lado de la cómoda hay otra puerta que da a un hermoso y enorme baño, todo blanco, con una ducha y una gran bañera. Al  otro lado de la cómoda hay otra puerta con un gran vestidor lleno de ropa que habíamos comprado el día después de llegar a LA. Y ahí está, la joya de la corona, lo mejor de toda la habitación, relegado a una esquina como el arpa de Quevedo pero no lleno de polvo, un perfecto y hermoso piano blanco. La habitación está insonorizada por lo que puedo tocar todo lo que quiera.

Me levanto. Voy al baño y decido que lo mejor es una ducha rápida, a las once y media tengo que estar en el estudio para seguir con mi CD, después del éxito que ha tenido mi primer single, Join Us, me quieren exprimir al máximo.

Entro en la ducha. No sé si estoy consiguiendo que la gente se una o no, pero dinero están consiguiendo todo el que quieren. Aunque yo también me llevo mi comisión, que no es pequeña. Cuando me dijeron que mi single era un éxito no me lo esperaba, a ver, ¿no pillan el gran mensaje subliminal? <<Come with me, let´s get rush, this is the moment, Join Us >> (Ven conmigo, vamos de prisa, este es el momento. Únete) VAMOS, ¡SI TODO EL MUNDO SABE QUE SOY UNA PUTA MANDADA DEL ENEÁGONO! Aunque también hay polémica por ello y tengo un gran ejército de haters a mis espaldas, en mayor número que personas a las que guste, pero claro que si lo muestran pueden acabar muertos y como que no les apetece.

Salgo de la ducha. Me visto. Bajo a desayunar. Saludo a Marta y Héctor. Creo que están liados, pero no estoy segura. Al acabar de desayunar nos dirigimos al estudio. No es que salga mucho a explorar por la ciudad pero LA me encanta. Mi sueño siempre ha sido Londres, pero LA no está nada mal.

Cuando llegamos al estudio noto que hay bastante gente y muy revolucionada. Seguro que anda por aquí alguna superestrella y espero encontrarme con ella porque de aquí no me voy sin una foto y autógrafo. Ahora me pregunto qué fans le quedan a cantantes y grupos adolescentes, cuyo público no suele superar los 18. Ahora están todos en el Eneágono sin música. Supongo que tienen también bastantes fans de más de 18 aunque perder a sus más fieles ha tenido que doler.

Cada persona que pasamos me mira mal. Sabe lo qe estamos haciendo, lo que estoy haciendo y no les parece bien. No les culpo.

Nos vamos a nuestro estudio, me paso el día grabando canciones horrendas que en una situación  normal no cantaría ni loca, sobre todo sabiendo que significado llevan en ellas.

Acabamos y salimos.

-¿Qué hay allí? –pregunto a Marta señalando el gran tumulto de personas que hay en el pasillo.

-Me han dicho que One Direction anda por aquí – y de repente una sonrisa inunda mi cara. Mis ídolos, mis queridos ídolos. Los necesito demasiado. Son mi vida, lo son todo para mí. Sobre todo en momentos como estos en los que hacen que no me hunda y siga luchando. –Puedes. –me dice Marta al ver mi cara en la que iba explícita la pregunta si me podía acercar.

Mientras voy hacia allí la gente se va dispersando y ellos se dirigen a seguir su camino cuando se percatan de mi presencia.

-Hola, me preguntaba si me podríais firmar un autógrafo –ahora el tono de tonta me sale solo, no lo finjo. Estoy demasiado emocionada. Noto como Louis y Zayn me miran raro.

-Claro, ¿cómo te llamas? –dice Harry cogiendo el trozo de papel y el boli que le tiendo sin saber de dónde lo he sacado.

-Paula, Paula de la Rosa. –entonces por sus caras veo que las sospechas de Louis y Zayn son verdaderas y el resto se da cuenta de quién soy yo. Me fijo y sus expresiones son de ¿rabia? No, es más bien, asco. ¿Me tienen asco?

El alma se me cae a los pies.

-Nos tenemos que ir. –responde Liam cortante y se van.

Y yo finjo que no ha pasado nada y me vuelvo con Marta y Héctor a casa. Nada más llegar digo que estoy cansada y subo a mi habitación. Cierro la puerta con llave y lloro. Lloro mucho.

Ellos eran todo lo que me quedaba, todo lo que me hacía seguir en pie y me tienen asco. Un asco tremendo. Y no los culpo por ello. Lo que estoy haciendo es una cosa horrible que le está arruinando la vida a todo el mundo, literalmente.

No estoy llorando porque ellos me odien y me tengan asco, estoy llorando porque tienen razón.

Estoy llorando porque esta vez ni ellos me pueden salvar.

Estoy llorando porque llevo un mes hecha una mierda y esto es el puto colmo.

Estoy llorando porque simplemente estoy cansada de fingir.

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Hola, hola personitas queridas. Antes de nada quería deciros que este jueves NO va a haber capítulo de eneágono porque estoy en la semana de exámenes y no me da el tiempo para escribir.

HAN APARECIDO LOS CHICOS!! Sé que parece que pasaron así de refilón pero ellos van a ser una de las partes más importantes de la trama. 

¿QUÉ CREEIS QUE VA A HACER PAULA? ¿LO DEJARÁ TODO DIRÁ LA VERDAD Y SE ATENDRÁ A LAS CONSECUENCIAS? ¿LO DIRÁ TODO Y LUEGO SE IRÁ A REFUGIAR AL LADO DE LOS CHICOS? Dejadme vuestra opinión en los comentarios, y no olvideis que aquí puede pasar de todo.

No os olvideis votar/comentar. 

Os quiero XxXx