Los guardianes del castillo

Capitulo 5

"¿Por qué?"

Hay muchas historias que contar, y que debemos conocer sé que me voy por otro tema pero voy a contar muchas historias que ocurrieron varios años a tras...

Yo soy Jin Wolks ese no verdadero apellido, pero desconozco cual fue, mi vida empieza con Frida, ella es mi madre siempre me conto la historia de cómo me encontró en medio del bosque cuando fue a buscar hierbas medicinales...también tengo una pequeña hermana es dos años menor que yo ella si es hija de Frida, pero la quiero como si fuera mi hermana de sangre, mi infancia fue feliz al lado de ellas...si fue feliz, pero mi vida cambio completamente cuando él llego...

- Buenas tardes yo soy Albus Dumbledore...necesito que vengas conmigo – me dijo aquel señor anciano, pero yo nunca dejaría a mi familia, así que negué con la cabeza.

- Sé que tu hermana está enferma - si era verdad los médicos no tenían esperanza de que viviera, pero yo haría hasta lo imposible para que se curara.

- Jin tu eres especial...si vienes con migo prometo que la curare –

- ¿de verdad?...entonces cuando ella mejore iré con usted – dijo no me importaba con tal de cuidar a mi hermana. Aquel anciano me dio la medicina que curo a mi hermana siempre se lo agradeceré, también me enseño que era la magia, fue muy difícil para mí separarme de mi familia pero tenía que hacerlo para protegerlos, mi hermana tuvo que olvidarse de quién era yo ya que no me dejaba ir, actualmente ella junto con mi madre viven en el norte de california, a veces voy a verla ha crecido tanto, me alegra que este bien aunque no sepa quién soy.

A mis 7 años llegue a una mansión en donde conocí a Shun y Hanna...

- ¿Quién eres tú? – me pregunto la niña de hermosos ojos azules, con su largo cabello rojizo, detrás de ella un niño de cabello negro me miraba fijamente a través de sus lentes.

- A partir de hoy él se quedara con nosotros – dijo la anciana que me acompaño en el camino creo que se llamaba Alice.

- Hola soy Jin Wolks – dije extendiendo la mano.

- Hola Jin yo soy Hanna – dijo la niña pelirroja con un apretón amistoso – él es Shun – me dijo señalando al chico de lentes.

- Hola – le dije a Shun él me miro calculadoramente, y se fue.

Si esa fue la primera vez que los vi ellos no parecían muy felices, aquella mansión parecía cárcel para los que vivíamos allí. Un día cuando exploraba el ático lo oí claramente un llanto, sin pensarlo mucho me acerque y vi a Shun echo un ovillo sentado frente a un espejo.

- ¿Shun? - dije sentándome a su lado.

- Vienes a reírte? - dijo el frio.

- No – al ver mi reflejo me vi junto con mi hermana y mi madre - ¿Cómo? –

- Es el espejo de Oesed nos muestra lo que queremos ver –

- Alice me conto que tus padres murieron...lo siento –

- Ellos no murieron – dijo viendo el espejo – aun siguen vivos en mi corazón – me miro – que hay de tus padres –

- No lo sé...ellos me abandonaron – dije viendo al vacio – antes siempre me preguntaba porque, ¿por qué no me querían? ¿tan malo era? Pero mi madre Frida me apoyo para salir de aquel profundo y oscuro lugar –

- Mi padre nos abandono – me sorprendió Shun.

- ¿qué? –

- El se suicido..., mi madre murió cuando nació mi hermana, él no quería ni cargarla, él me dijo que lo perdonara porque si se quedaba no podría darle el amor que ella merecía, y me preguntaba por qué no fuimos lo suficientemente buenos para que nos cuidara –