Una Nueva Droga

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N/A: Mismas advertencias que el pasado básicamente, menos lo del consentimiento porque –lo sé- no hay sexo entre Frank y Gerard aquí, es más en dirección hacia eso de nuevo. Intenté hacer esto lo más realista posible, así que si Gerard hace cosas desagradables, tengan en mente que es un adicto.

"Jesús- joder-" Gerard gimió cuando inhaló una línea, su cuerpo temblaba mientras se limpiaba la nariz. "Joder-"

Cayó de espaldas sobre su cama mientras la droga le golpeaba como un tren, sus pensamientos iban a una milla por minuto; aunque algo era diferente esta vez, todos sus pensamientos eran sobre Frank.

Frank encima de él, Frank chupándosela, Frank lanzándole esa mirada antes de tomar algo que Gerard jamás recuperaría.

"Joder." Gimió, acurrucándose cuando sintió que sus pantalones se apretaban. "Frank, joder-"

Giró la cara sobre las almohadas mientras deslizaba una mano entre sus piernas, lloriqueando quedamente mientras se imaginaba que era Frank.

El Gerard sobrio habría estado avergonzado por el hecho de que prácticamente estaba follándose la mano, pensando en alguien a quien apenas conocía y babeando sobre la almohada, pero al Gerard drogado le importaba un carajo.

No se suponía que las drogas hicieran esto, se suponía que lo distraerían de la realidad, se suponía que debían funcionar.

Si estuvieran funcionando no estaría pensando en Frank ahora mismo, solo estaría recostado en su cama, pensando en cosas que jamás pasarían.

Pero Frank había pasado, y ahora era como si Gerard lo deseara de nuevo.

"Gah-" Gerard siseó quedamente cuando metió su mano en sus pantalones, el contacto piel con piel hizo que su cuerpo se sacudiera de placer. "Oh, Frank- fóllame, por favor, aahhh-"

La vista era bastante patética, el rostro de Gerard sobre su almohada, su trasero alzado en el aire tanto como fuera posible, fingiendo que Frank estaba detrás de él mientras se tocaba.

De pronto tocaron a su puerta, era Mikey intentando hacerle saber que ya se iba al trabajo.

"¡Lárgate!" Gerard gritó, cayendo sobre su costado mientras agarraba una botella de vodka vacía, aventándola hacia la puerta de su habitación. "¡Vete!"

Mikey se fue sin mirar atrás, acostumbrado al comportamiento de su hermano, pero Gerard caminó a tropezones hasta la puerta de todos modos, asegurándose de que siguiera cerrada.

"Jódete, Mikey." Gruñó mientras se recargaba en la puerta.

Sin embargo, sus pensamientos rápido volvieron a Frank, y de inmediato se sacó los pantalones, envolviendo su polla con los dedos sin pensarlo dos veces.

"Joder, sí." Gimió, echando la cabeza hacia atrás mientras se imaginaba a Frank de rodillas frente a él. "Joder, tómala toda- atragántate-"

Sus movimientos eran rápidos y húmedos, y los sonidos que salían de sus labios no eran nada menos que de puta y desesperados.

"Ahh. Frank- oh dios-" Murmuró las cosas más raras en voz baja mientras se masturbaba, la mayoría de las cuales no tenían nada de sentido, el único factor que tenía sentido era Frank. "Mierda- joder-"

Lentamente se deslizó por la pared cuando sus piernas lucharon por mantenerse, su cuerpo acomodándolo sin cuidado sobre sus manos y rodillas de nuevo.

Juraba que podía sentir a Frank golpeando dentro de él desde atrás, sus manos tatuadas recorriendo su trasero, agarrando sus caderas con fuerza.